Estafa de Odebrecht le cuesta Q2 mil 945 millones a los guatemaltecos
Los casi Q3 mil millones estafados los guatemaltecos los empezaron a pagar en 2017 y será hasta 2033 cuando se realice el último desembolso del dinero prestado por un banco brasileño.
La estafa cometida por la constructora Odebrecht, en complicidad con guatemaltecos, le cuesta a los ciudadanos Q2 mil 945 millones que se terminarán de pagar hasta en 2033.
Los brasileños que planificaron la estafa y sobornaron en Guatemala, están libres de la justicia debido a un oscuro convenio suscrito entre el Ministerio Público (MP), dirigido entonces por Thelma Aldana.
En este acuerdo también participaron la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), a cargo de Juan Francisco Sandoval, bajo la guía de la extinta Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
Los casi Q3 mil millones estafados, los guatemaltecos los empezaron a pagar en 2017 y será hasta 2033 cuando se realice el último desembolso del dinero prestado por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).
La otra entidad que también dio parte del préstamo que fue a parar a los bolsillos de los brasileños es el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), al que Guatemala le cancelará la deuda en 2028.
En 2012 el Congreso de la República aprobó el convenio con Odebrecht para construir una carretera de cuatro carriles de la aldea Cocales, en Suchitepéquez, hacia Tecún Umán, San Marcos. La obra fue abandonada por los brasileños luego que saliera a luz la trama de corrupción de la constructora en diversos países. En Guatemala fueron implicados por los representantes de Odebrecht, el exministro Alejandro Sinibaldi y el expresidenciable Manuel Baldizón. A cambio de contar detalles de los sobornos, los brasileños escaparon de la justicia.
Historia de la estafa
Los dos préstamos aprobados por el BNDES y el BCIE sumaban US$399.4 millones (Q3 mil 75 millones). De ese monto, los brasileños recibieron US$254.4 millones (Q1 mil 959 millones).
A la cantidad entregada a Odebrecht se debe sumar los intereses que en trece años pagarán los guatemaltecos. La suma será de US$128 millones (Q986 millones).
Las autoridades del Ministerio de Comunicaciones, durante la gestión de Jimmy Morales, ordenaron suspender los desembolsos a Odebrecht, pues encontraron diversas ilegalidades y denunciaron a la constructora.
Una de las irregularidades fue que la obra tenía un avance físico del 35 por ciento, pero el Gobierno ya le había dado el 75 por ciento del dinero a los brasileños.
Pasado los meses, el MP dirigido por Aldana inició negociaciones con los representantes de Odebrecht y llegaron a acuerdos en los que no estuvo presente la Procuraduría General de la Nación, que es el abogado del Estado.
La FECI, con el acompañamiento de la CICIG, suspendió la persecución penal contra los estafadores brasileños, y, además, Odebrecht se comprometió a reintegrar US$18 millones que fue lo entregado en sobornos y otra cantidad similar integrada por materiales de construcción.
Se ignora si Odebrecht cumplió con entregar esos US$36 millones, pero de lo que no hay duda es que ese dinero no salió de los bolsillos de la constructora, sino de los propios recursos estafados a los guatemaltecos, los US$254 millones recibidos por una obra abandonada y que debió licitarse de nuevo para recuperar la vía que quedó casi instransitable.
En otras palabras, los guatemaltecos se quedaron con la deuda de casi Q3 mil millones, sin una moderna carretera de cuatro carrilles y con la carga de tener que pagar otros cientos de millones para reconstruir el tramo carretero.
- Deberías leer:
¿Se puede recuperar el dinero estafado?
La Procuraduría General de la Nación, al enterarse del acuerdo realizado por el MP de Aldana y la FECI, con la guía de la CICIG, presentó diversos recursos para anular el oscuro convenio, pero hasta ahora todo fue inútil.
El viernes 31 de julio de 2020 la Corte de Constitucionalidad encabezada por Gloria Porras, rechazó una de las acciones legales emprendidas por la PGN para anular el acuerdo entre los brasileños y la Fiscalía.
¿Qué acciones quedan ahora para intentar recuperar los casi Q3 mil millones estafados? El abogado del Estado puede hacer un reclamo en los tribunales y pasar muchos años en un proceso con resultados inciertos.
Los brasileños ya no tienen la presión penal que los obligue a devolver el dinero por el convenio suscrito con el MP. Vale recordar que para realizar este acuerdo, Sandoval viajó a Brasil y parte del proceso se realizó vía skype.
Otro punto importante es que se desconoce con detalle el contenido del acuerdo entre la Fiscalía y los estafadores brasileños. República. solicitó copia al MP, pero no la obtuvo. En el Juzgado de Mayor Riesgo D, a cargo de Erika Aifán, tampoco se pudo tener acceso a ese convenio.
Estafa de Odebrecht le cuesta Q2 mil 945 millones a los guatemaltecos
Los casi Q3 mil millones estafados los guatemaltecos los empezaron a pagar en 2017 y será hasta 2033 cuando se realice el último desembolso del dinero prestado por un banco brasileño.
La estafa cometida por la constructora Odebrecht, en complicidad con guatemaltecos, le cuesta a los ciudadanos Q2 mil 945 millones que se terminarán de pagar hasta en 2033.
Los brasileños que planificaron la estafa y sobornaron en Guatemala, están libres de la justicia debido a un oscuro convenio suscrito entre el Ministerio Público (MP), dirigido entonces por Thelma Aldana.
En este acuerdo también participaron la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), a cargo de Juan Francisco Sandoval, bajo la guía de la extinta Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
Los casi Q3 mil millones estafados, los guatemaltecos los empezaron a pagar en 2017 y será hasta 2033 cuando se realice el último desembolso del dinero prestado por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).
La otra entidad que también dio parte del préstamo que fue a parar a los bolsillos de los brasileños es el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), al que Guatemala le cancelará la deuda en 2028.
En 2012 el Congreso de la República aprobó el convenio con Odebrecht para construir una carretera de cuatro carriles de la aldea Cocales, en Suchitepéquez, hacia Tecún Umán, San Marcos. La obra fue abandonada por los brasileños luego que saliera a luz la trama de corrupción de la constructora en diversos países. En Guatemala fueron implicados por los representantes de Odebrecht, el exministro Alejandro Sinibaldi y el expresidenciable Manuel Baldizón. A cambio de contar detalles de los sobornos, los brasileños escaparon de la justicia.
Historia de la estafa
Los dos préstamos aprobados por el BNDES y el BCIE sumaban US$399.4 millones (Q3 mil 75 millones). De ese monto, los brasileños recibieron US$254.4 millones (Q1 mil 959 millones).
A la cantidad entregada a Odebrecht se debe sumar los intereses que en trece años pagarán los guatemaltecos. La suma será de US$128 millones (Q986 millones).
Las autoridades del Ministerio de Comunicaciones, durante la gestión de Jimmy Morales, ordenaron suspender los desembolsos a Odebrecht, pues encontraron diversas ilegalidades y denunciaron a la constructora.
Una de las irregularidades fue que la obra tenía un avance físico del 35 por ciento, pero el Gobierno ya le había dado el 75 por ciento del dinero a los brasileños.
Pasado los meses, el MP dirigido por Aldana inició negociaciones con los representantes de Odebrecht y llegaron a acuerdos en los que no estuvo presente la Procuraduría General de la Nación, que es el abogado del Estado.
La FECI, con el acompañamiento de la CICIG, suspendió la persecución penal contra los estafadores brasileños, y, además, Odebrecht se comprometió a reintegrar US$18 millones que fue lo entregado en sobornos y otra cantidad similar integrada por materiales de construcción.
Se ignora si Odebrecht cumplió con entregar esos US$36 millones, pero de lo que no hay duda es que ese dinero no salió de los bolsillos de la constructora, sino de los propios recursos estafados a los guatemaltecos, los US$254 millones recibidos por una obra abandonada y que debió licitarse de nuevo para recuperar la vía que quedó casi instransitable.
En otras palabras, los guatemaltecos se quedaron con la deuda de casi Q3 mil millones, sin una moderna carretera de cuatro carrilles y con la carga de tener que pagar otros cientos de millones para reconstruir el tramo carretero.
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¿Se puede recuperar el dinero estafado?
La Procuraduría General de la Nación, al enterarse del acuerdo realizado por el MP de Aldana y la FECI, con la guía de la CICIG, presentó diversos recursos para anular el oscuro convenio, pero hasta ahora todo fue inútil.
El viernes 31 de julio de 2020 la Corte de Constitucionalidad encabezada por Gloria Porras, rechazó una de las acciones legales emprendidas por la PGN para anular el acuerdo entre los brasileños y la Fiscalía.
¿Qué acciones quedan ahora para intentar recuperar los casi Q3 mil millones estafados? El abogado del Estado puede hacer un reclamo en los tribunales y pasar muchos años en un proceso con resultados inciertos.
Los brasileños ya no tienen la presión penal que los obligue a devolver el dinero por el convenio suscrito con el MP. Vale recordar que para realizar este acuerdo, Sandoval viajó a Brasil y parte del proceso se realizó vía skype.
Otro punto importante es que se desconoce con detalle el contenido del acuerdo entre la Fiscalía y los estafadores brasileños. República. solicitó copia al MP, pero no la obtuvo. En el Juzgado de Mayor Riesgo D, a cargo de Erika Aifán, tampoco se pudo tener acceso a ese convenio.