Rodolfo Abularach, reconocido artista plástico y ganador del Premio Nacional de Pintura, Carlos Mérida 2019, falleció este domingo 30 de agosto, a los 87 años, por complicaciones de salud luego de una recuperación exitosa de covid-19.
Su amiga y artista Ingrid Klussmann, contó que el deceso ocurrió a las ocho de la mañana en el hospital donde fue internado.
Perfiles en redes sociales de personalidades, asociaciones, academias, colectivos de artistas y el Ministerio de Cultura y Deportes, entre otros, lamentaron la partida del dibujante guatemalteco.
En ellos se leía que era un gran amigo y benefactor, además de recordarlo por el tema en sus representaciones artísticas: un gran ojo abierto, permitiéndole explorar la luz y las sombras.
El destacado artista nació en 1933 y era conocido desde los 14 años por sus dibujos. Fue autodidacta y en sus inicios pintó y dibujó temática taurina. En 1953, el guatemalteco estudió en Pasadena, California y más tarde en México y hasta 1957 en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la Ciudad de Guatemala, para luego convertirse en un referente de la pintura guatemalteca a nivel nacional.
“Se hizo famoso a escala internacional debido a sus imágenes aumentadas del ojo humano. En su visión de conjunto subyacen energías creadoras, que surgen como símbolo e imagen, que justifican la fe del autor por crear un orden puro y supremo”, anotan desde el Latin American Art.
Junto a Luis Díaz, Ramón Banús y Margarita Azurdia, entre otros, el maestro formó parte de una generación que le dio vida a las mejores obras visuales nacionales.
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Perfiles en redes sociales de personalidades, asociaciones, academias, colectivos de artistas y el Ministerio de Cultura y Deportes, entre otros, lamentaron la partida del dibujante guatemalteco.
En ellos se leía que era un gran amigo y benefactor, además de recordarlo por el tema en sus representaciones artísticas: un gran ojo abierto, permitiéndole explorar la luz y las sombras.
El destacado artista nació en 1933 y era conocido desde los 14 años por sus dibujos. Fue autodidacta y en sus inicios pintó y dibujó temática taurina. En 1953, el guatemalteco estudió en Pasadena, California y más tarde en México y hasta 1957 en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la Ciudad de Guatemala, para luego convertirse en un referente de la pintura guatemalteca a nivel nacional.
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