Lionel Messi terminó con la angustia de muchos seguidores del Barcelona que ya lo daban fuera del club, pero la aflicción del considerado mejor jugador del mundo no ha cesado. Lejos de ello, los días de incertidumbre apenas empiezan para el crack argentino.
En una entrevista exclusiva con el medio Goal, Messi rompió el silencio y no se quedó con nada. Habló de la reprochable actitud del presidente del club catalán, Josep Maria Bartomeu, quien le habría prometido al goleador dejarlo libre a partir del final de la temporada.
Sin embargo, Bartomeu falló y lejos de facilitar la salida del goleador que ya no está cómodo en el Barsa, condicionó su retiro al pago de 700 millones de euros o llegar a instancias legales.
Messi, con el rostro contrariado durante la entrevista, no aceptó ninguna de las condiciones. Pero lo que jamás consideró fue llegar a tribunales contra el equipo que él considera de sus amores. Ese fue el motivo que lo llevó a seguir un año más, pero serán meses difíciles.
Messi angustiado y con incertidumbre
El mayor referente del Barcelona dijo que se queda con el equipo y lo hace de buena gana, pero con un sabor amargo por todo lo que vivió durante estos días, a partir de que se conociera que podría mudarse de España.
Su esposa y los hijos no querían el cambio. Confesó que lloraron y la angustia se apoderó de todos porque no veían otra casa que la del Barcelona.
Pero Messi ya no daba para más. La humillante derrota contra el Bayern, en la Champions, fue la gota que derramó el vaso. Para Lio ese resultado desnudó al equipo y dejó una pobre imagen del conjunto.
El goleador ha venido reclamando y viendo que el cuadro ya no se prepara para ganar. Considera que la dirigencia encabezada por Bartomeu solo tapa agujeros y no ve un proyecto exitoso.
Messi ya no se siente bien en un club perdedor. Ahora se queda y asegura que siempre dará su mayor y mejor esfuerzo, pero a sus 32 años el tiempo ya no está a su favor.
En las condiciones actuales se puede anticipar que el argentino saldrá por la puerta trasera del Barcelona. Vienen días difíciles para la institución y para el futbolista formado en las filas catalanas.
Con un nuevo técnico que sí lo quiere en el equipo, pero que se deshizo de uno de sus mejores amigos, Luis Suárez, Messi no ve todavía un equipo para trascender en la Liga Española y menos en el campeonato europeo.
El rosarino quiere irse del club con gloria, pero todo apunta a que pasará el peor año de su vida en la institución que le dio todo, pero que sin una dirigencia acertada, ha llevado al equipo a no ganar, y lo peor, a sufrir un descalambro anunciado.
Lionel Messi terminó con la angustia de muchos seguidores del Barcelona que ya lo daban fuera del club, pero la aflicción del considerado mejor jugador del mundo no ha cesado. Lejos de ello, los días de incertidumbre apenas empiezan para el crack argentino.
En una entrevista exclusiva con el medio Goal, Messi rompió el silencio y no se quedó con nada. Habló de la reprochable actitud del presidente del club catalán, Josep Maria Bartomeu, quien le habría prometido al goleador dejarlo libre a partir del final de la temporada.
Sin embargo, Bartomeu falló y lejos de facilitar la salida del goleador que ya no está cómodo en el Barsa, condicionó su retiro al pago de 700 millones de euros o llegar a instancias legales.
Messi, con el rostro contrariado durante la entrevista, no aceptó ninguna de las condiciones. Pero lo que jamás consideró fue llegar a tribunales contra el equipo que él considera de sus amores. Ese fue el motivo que lo llevó a seguir un año más, pero serán meses difíciles.
Messi angustiado y con incertidumbre
El mayor referente del Barcelona dijo que se queda con el equipo y lo hace de buena gana, pero con un sabor amargo por todo lo que vivió durante estos días, a partir de que se conociera que podría mudarse de España.
Su esposa y los hijos no querían el cambio. Confesó que lloraron y la angustia se apoderó de todos porque no veían otra casa que la del Barcelona.
Pero Messi ya no daba para más. La humillante derrota contra el Bayern, en la Champions, fue la gota que derramó el vaso. Para Lio ese resultado desnudó al equipo y dejó una pobre imagen del conjunto.
El goleador ha venido reclamando y viendo que el cuadro ya no se prepara para ganar. Considera que la dirigencia encabezada por Bartomeu solo tapa agujeros y no ve un proyecto exitoso.
Messi ya no se siente bien en un club perdedor. Ahora se queda y asegura que siempre dará su mayor y mejor esfuerzo, pero a sus 32 años el tiempo ya no está a su favor.
En las condiciones actuales se puede anticipar que el argentino saldrá por la puerta trasera del Barcelona. Vienen días difíciles para la institución y para el futbolista formado en las filas catalanas.
Con un nuevo técnico que sí lo quiere en el equipo, pero que se deshizo de uno de sus mejores amigos, Luis Suárez, Messi no ve todavía un equipo para trascender en la Liga Española y menos en el campeonato europeo.
El rosarino quiere irse del club con gloria, pero todo apunta a que pasará el peor año de su vida en la institución que le dio todo, pero que sin una dirigencia acertada, ha llevado al equipo a no ganar, y lo peor, a sufrir un descalambro anunciado.