En estos meses hemos encontrado una nueva forma de vivir, entre el confinamiento y el trabajo en casa ha marcado características que son nuevas y que nos han hecho cambiar o por lo menos ver desde una óptica diferente las cosas, desde hace unas semanas se han relajado las restricciones y nos ha llevado a una nueva normalidad que aún es incierta pero que conlleva responsabilidades.
Ahora lo que observamos en países que tomaron medidas similares a las nuestras es una nueva ola de contagios de COVID 19, que ha provocado que regresen al confinamiento y mucho temo que esas características son similares a las que nosotros mostramos y por ende creo que volveremos a un repunte de casos y a un confinamiento nuevamente.
La gran pregunta será ¿Cuándo?, se habla de la primera o segunda quincena de octubre, cosa que nos llevaría a un fin de año con complicaciones en movilidad y restricciones de movilidad y no digamos los efectos económicos que podrá tener este fin de año, con caos que puedan generar una crisis financiera más aguda de lo esperado.
Si esta nueva ola de contagios nos llevara de nuevo a un confinamiento o a restringir la movilidad estaríamos ante un fenómeno que podría llevar consigo una serie de condiciones que nos marcarían para el año 2021, en donde las condiciones no variarían mucho en lo que actualmente estamos viviendo y sin las condiciones necesarias para hacerles frente.
Es por ello que al no tener certeza de que cual será el rumbo que tome la pandemia y mucho menos los rebrotes de contagio seguimos en situaciones criticas en el sentido de salubridad en donde la salud a mi juicio es lo prioritario para la sociedad, esperando que de ser la segunda ola de contagios esta no sea tan desalentadora como la primera.
Pedir al Creador que escuche las peticiones mundiales para que de una salida a esta pandemia que nos ha dejado un sabor amargo de boca y con miles de dificultades que nos llevan a ver mas pobreza y desigualdad en este país tan bello, pero tan dificultoso con problemas en lo político, social y de toda índole que no nos dejan sobresalir y desarrollarnos.
La incertidumbre nos esta marcando en esta temporada al no tener claridad en que sucederá con en esta pandemia que de momento ya deja en muchos hogares dolor por la muerte de un ser cercano a consecuencia de esta enfermedad y una difícil situación económica a muchos en donde se está pasando situaciones difíciles que involucran diferentes aspectos.
Es por ello que ahora al igual que en los primeros meses de esta pandemia debemos cuidarnos mucho, el distanciamiento social es esencial, el lavado de manos y el uso de la mascarilla han sido por el momento el paliativo ante esta terrible enfermedad que todavía no tiene una vacuna que nos permita retornar de forma segura a nuestra forma de vida y de convivencia social tan arraigada en nuestra bella cultura.
La responsabilidad por supuesto que depende de la población, pero el Gobierno también tendrá que responder y actuar de cara a la segunda ola de contagios del nuevo coronavirus.
En estos meses hemos encontrado una nueva forma de vivir, entre el confinamiento y el trabajo en casa ha marcado características que son nuevas y que nos han hecho cambiar o por lo menos ver desde una óptica diferente las cosas, desde hace unas semanas se han relajado las restricciones y nos ha llevado a una nueva normalidad que aún es incierta pero que conlleva responsabilidades.
Ahora lo que observamos en países que tomaron medidas similares a las nuestras es una nueva ola de contagios de COVID 19, que ha provocado que regresen al confinamiento y mucho temo que esas características son similares a las que nosotros mostramos y por ende creo que volveremos a un repunte de casos y a un confinamiento nuevamente.
La gran pregunta será ¿Cuándo?, se habla de la primera o segunda quincena de octubre, cosa que nos llevaría a un fin de año con complicaciones en movilidad y restricciones de movilidad y no digamos los efectos económicos que podrá tener este fin de año, con caos que puedan generar una crisis financiera más aguda de lo esperado.
Si esta nueva ola de contagios nos llevara de nuevo a un confinamiento o a restringir la movilidad estaríamos ante un fenómeno que podría llevar consigo una serie de condiciones que nos marcarían para el año 2021, en donde las condiciones no variarían mucho en lo que actualmente estamos viviendo y sin las condiciones necesarias para hacerles frente.
Es por ello que al no tener certeza de que cual será el rumbo que tome la pandemia y mucho menos los rebrotes de contagio seguimos en situaciones criticas en el sentido de salubridad en donde la salud a mi juicio es lo prioritario para la sociedad, esperando que de ser la segunda ola de contagios esta no sea tan desalentadora como la primera.
Pedir al Creador que escuche las peticiones mundiales para que de una salida a esta pandemia que nos ha dejado un sabor amargo de boca y con miles de dificultades que nos llevan a ver mas pobreza y desigualdad en este país tan bello, pero tan dificultoso con problemas en lo político, social y de toda índole que no nos dejan sobresalir y desarrollarnos.
La incertidumbre nos esta marcando en esta temporada al no tener claridad en que sucederá con en esta pandemia que de momento ya deja en muchos hogares dolor por la muerte de un ser cercano a consecuencia de esta enfermedad y una difícil situación económica a muchos en donde se está pasando situaciones difíciles que involucran diferentes aspectos.
Es por ello que ahora al igual que en los primeros meses de esta pandemia debemos cuidarnos mucho, el distanciamiento social es esencial, el lavado de manos y el uso de la mascarilla han sido por el momento el paliativo ante esta terrible enfermedad que todavía no tiene una vacuna que nos permita retornar de forma segura a nuestra forma de vida y de convivencia social tan arraigada en nuestra bella cultura.
La responsabilidad por supuesto que depende de la población, pero el Gobierno también tendrá que responder y actuar de cara a la segunda ola de contagios del nuevo coronavirus.