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¿Secuestros al alza?

Salvador Paiz
22 de octubre, 2020

En las últimas semanas han circulado en redes sociales informaciones que evidencian un supuesto aumento de secuestros en el país. Esto asusta a cualquiera, pero ¿es información basada en datos o simplemente un chisme que vino a desinformar, alarmar y crear pánico en todos nosotros? 

Entre audios, videos, fotos y alertas, realmente no se sabe qué creer ni cómo guardar la calma. Es un bombardeo constante de información que valida los temores que la misma información ha generado. No obstante, ¿qué dicen los datos oficiales? ¿es información certera y de una fuente fiable? 

De acuerdo con información de la Policía Nacional Civil (PNC) y del Ministerio Público (MP), es falso que los secuestros y las denuncias por secuestro han aumentado en lo que va del 2020. Según la Fiscalía contra secuestros del MP, de enero a octubre de 2020, se han documentado 92 denuncias por secuestro una baja significativa contra las 140 denuncias del mismo período en el año anterior. Según el departamento de Investigación Criminal de la PNC, se registra una reducción interanual de 20% en la cantidad de secuestros. 

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Un solo secuestro es demasiado. Implica un fuerte trauma emocional y un desgarre familiar que cambia por completo la vida de alguien. Es importante tener mecanismos ágiles para identificar un rebrote de este fenómeno delictivo. Sin embargo, no aporta en lo absoluto el generar una psicosis colectiva cuando se basa en circulaciones falsas. El problema aquí es que las percepciones se autoalimentan a través de la recirculación de rumores y chismes infundados, pero que compartimos como verídicos. Las redes sociales pueden llegar a ser un arma de dos filos: nos empoderan como ciudadanos, pero también nos exponen al convertirse en nuestra fuente primaria de información.  

Lamentablemente, en Guatemala abundan los rumores y chismes (aunque no es solo en Guatemala que se da este fenómeno). En especial aquellos que se hacen pasar por noticias legítimas y que, en un abrir y cerrar de ojos, se riegan por doquier. Esto solo causa desinformación y confusión. Para aquellos que sí tengan información fehaciente sobre secuestradores, sobre sus métodos de operación, sobre los movimientos de sus fondos ilícitos, etcétera, pueden (y deben) entregar dicha información a las autoridades. ¿Cómo? Denunciando. 

Lo he dicho en varias ocasiones, y lo repito, la denuncia es un insumo crítico para que las autoridades luchen contra el crimen, sobretodo contra un crimen tan inhumano como el secuestro. Sin la denuncia, es imposible investigar los crímenes que suceden en nuestro país. Un canal seguro y confiable mediante el cual podemos llevar a cabo este valiente acto de forma anónima es TuPista.gt, de Crime Stoppers Guatemala. 

Crime Stoppers Guatemala es una iniciativa que empodera a la ciudadanía, promoviendo una cultura de legalidad al incentivar la denuncia anónima. Crime Stoppers además trabaja muy de cerca con nuestras autoridades y otras entidades, para ayudar a erradicar el crimen en el país, entre ellas el MP, la PNC, la Superintendencia de Administración Tributaria, el Viceministerio de Prevención, la Secretaría contra la violencia sexual, explotación y trata de personas y Guate-Íntegra. Esto con el fin de fortalecer la institucionalidad y lograr un verdadero estado de derecho.

La próxima vez que recibamos una “noticia” en nuestras redes o aplicaciones de mensajería, tomemos un momento para evaluar la conveniencia de su reenvío. No seamos artífices de la propagación del chisme. Contestemos estas tres preguntas antes de apretar el botón de reenvío: ¿Es verdad? ¿Es bueno? ¿Es útil? En una era en donde la desinformación es la norma y donde nuestras fuentes primarias de información se limitan a nuestro círculo de amistades, tenemos que ser extra cuidadosos de qué creemos y qué no creemos. 

La realidad es que cualquiera puede circular cualquier cosa y, de paso, llegar a tener cierto grado de credibilidad, independientemente de la calidad o veracidad de la información que da a conocer. No le demos el beneficio de nuestra credibilidad a una estrategia de desinformación que nace de intereses espurios. Y, en caso si tengamos información de un hecho delictivo, denunciemos para compartirla con las autoridades competentes.  

www.salvadorpaiz.com

¿Secuestros al alza?

Salvador Paiz
22 de octubre, 2020

En las últimas semanas han circulado en redes sociales informaciones que evidencian un supuesto aumento de secuestros en el país. Esto asusta a cualquiera, pero ¿es información basada en datos o simplemente un chisme que vino a desinformar, alarmar y crear pánico en todos nosotros? 

Entre audios, videos, fotos y alertas, realmente no se sabe qué creer ni cómo guardar la calma. Es un bombardeo constante de información que valida los temores que la misma información ha generado. No obstante, ¿qué dicen los datos oficiales? ¿es información certera y de una fuente fiable? 

De acuerdo con información de la Policía Nacional Civil (PNC) y del Ministerio Público (MP), es falso que los secuestros y las denuncias por secuestro han aumentado en lo que va del 2020. Según la Fiscalía contra secuestros del MP, de enero a octubre de 2020, se han documentado 92 denuncias por secuestro una baja significativa contra las 140 denuncias del mismo período en el año anterior. Según el departamento de Investigación Criminal de la PNC, se registra una reducción interanual de 20% en la cantidad de secuestros. 

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Un solo secuestro es demasiado. Implica un fuerte trauma emocional y un desgarre familiar que cambia por completo la vida de alguien. Es importante tener mecanismos ágiles para identificar un rebrote de este fenómeno delictivo. Sin embargo, no aporta en lo absoluto el generar una psicosis colectiva cuando se basa en circulaciones falsas. El problema aquí es que las percepciones se autoalimentan a través de la recirculación de rumores y chismes infundados, pero que compartimos como verídicos. Las redes sociales pueden llegar a ser un arma de dos filos: nos empoderan como ciudadanos, pero también nos exponen al convertirse en nuestra fuente primaria de información.  

Lamentablemente, en Guatemala abundan los rumores y chismes (aunque no es solo en Guatemala que se da este fenómeno). En especial aquellos que se hacen pasar por noticias legítimas y que, en un abrir y cerrar de ojos, se riegan por doquier. Esto solo causa desinformación y confusión. Para aquellos que sí tengan información fehaciente sobre secuestradores, sobre sus métodos de operación, sobre los movimientos de sus fondos ilícitos, etcétera, pueden (y deben) entregar dicha información a las autoridades. ¿Cómo? Denunciando. 

Lo he dicho en varias ocasiones, y lo repito, la denuncia es un insumo crítico para que las autoridades luchen contra el crimen, sobretodo contra un crimen tan inhumano como el secuestro. Sin la denuncia, es imposible investigar los crímenes que suceden en nuestro país. Un canal seguro y confiable mediante el cual podemos llevar a cabo este valiente acto de forma anónima es TuPista.gt, de Crime Stoppers Guatemala. 

Crime Stoppers Guatemala es una iniciativa que empodera a la ciudadanía, promoviendo una cultura de legalidad al incentivar la denuncia anónima. Crime Stoppers además trabaja muy de cerca con nuestras autoridades y otras entidades, para ayudar a erradicar el crimen en el país, entre ellas el MP, la PNC, la Superintendencia de Administración Tributaria, el Viceministerio de Prevención, la Secretaría contra la violencia sexual, explotación y trata de personas y Guate-Íntegra. Esto con el fin de fortalecer la institucionalidad y lograr un verdadero estado de derecho.

La próxima vez que recibamos una “noticia” en nuestras redes o aplicaciones de mensajería, tomemos un momento para evaluar la conveniencia de su reenvío. No seamos artífices de la propagación del chisme. Contestemos estas tres preguntas antes de apretar el botón de reenvío: ¿Es verdad? ¿Es bueno? ¿Es útil? En una era en donde la desinformación es la norma y donde nuestras fuentes primarias de información se limitan a nuestro círculo de amistades, tenemos que ser extra cuidadosos de qué creemos y qué no creemos. 

La realidad es que cualquiera puede circular cualquier cosa y, de paso, llegar a tener cierto grado de credibilidad, independientemente de la calidad o veracidad de la información que da a conocer. No le demos el beneficio de nuestra credibilidad a una estrategia de desinformación que nace de intereses espurios. Y, en caso si tengamos información de un hecho delictivo, denunciemos para compartirla con las autoridades competentes.  

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