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La trata de personas: compraventa de seres humanos

Melanie Müllers
23 de junio, 2021

En el informe del Departamento de Estado, establece que el Gobierno de Guatemala no cumple plenamente con los estándares mínimos para la eliminación de la trata de personas, pero está haciendo esfuerzos importantes para lograrlo. Estos esfuerzos han sido una mejora en investigar, enjuiciar y condenar a más traficantes, dedicar recursos adicionales para aumentar la capacidad judicial y procesal fuera de la capital. Aumentar la coordinación regional sobre casos de trata, identificar y brindar servicios a más víctimas, mejorar la identificación de nuevas víctimas y el lanzamiento de varias campañas nuevas de concienciación. El gobierno inauguró un nuevo tribunal especializado para manejar los casos de trata de niños y creó una nueva base de datos interinstitucional para manejar los casos de trata de personas. Sin embargo, el gobierno no cumplió con los estándares mínimos en varias áreas clave. El gobierno redujo los fondos para la protección de las víctimas y no cuenta con refugios adecuados para todas las víctimas de trata identificadas. El gobierno no mejoró el monitoreo y la supervisión general de sus refugios que brindan atención a niños víctimas de la trata, remitió solo el 32 % de las víctimas a atención y los servicios especializados para víctimas siguieron siendo inadecuados debido al alcance del problema y la falta de servicios para víctimas adultas. La corrupción y la complicidad siguieron siendo preocupaciones importantes.

El gobierno ha identificado un número creciente de mujeres traficantes, los traficantes apuntan particularmente a los niños, para realizar trabajos forzados, incluso en tiendas de tortillas y para traficar a otros países. Los traficantes explotan a los niños guatemaltecos para la mendicidad forzada, ventas ambulantes y como artistas callejeros, particularmente dentro de la Ciudad de Guatemala y a lo largo de la frontera con México. Las familias de los niños víctimas suelen ser cómplices de su explotación. Las organizaciones delictivas, incluidas las pandillas, explotan a las niñas en el tráfico sexual y coaccionan a jóvenes en las zonas urbanas para vender o transportar drogas y extorsionar. Los traficantes explotan migrantes latinoamericanos que transitan de manera irregular por Guatemala en ruta a México y Estados Unidos con fines de tráfico sexual o trabajo forzoso en México, Estados Unidos y Guatemala, el descaro es que han explotado a las víctimas incluso en los refugios para migrantes. 

De las aproximadamente 50,000 víctimas de trata sexual reportadas en Guatemala, casi el 60 por ciento son niños, con el alto número de niños vendidos para tráfico sexual, los ingresos equivalen al 2.7 por ciento del producto interno bruto (PIB) de Guatemala.

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La trata de personas es una industria grande y lucrativa, que genera aproximadamente $31.6 mil millones en los mercados internacionales anualmente. De esos $31.6 mil millones, alrededor de $1.3 mil millones un poco más del 4%, depende del tráfico de América Latina.

Es importante conocer que la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes son dos delitos distintos pero que tienen problemas relacionados y es de suma importancia distinguir los dos delitos para ayudar a alcanzar intervenciones relevantes. Para proteger con éxito a las personas de los riesgos de ser víctimas de trata en su migración, se deben considerar diferentes factores para responder con éxito a las necesidades específicas de las víctimas de la trata a fin de velar por que no se sigan violando sus derechos y por que tengan acceso a la asistencia, medidas de protección, servicios de apoyo a la salud física y mental.  Si no se aplica un enfoque basado en los derechos humanos, las víctimas de la trata de personas y las posibles víctimas quedan expuestas a nuevas violaciones de derechos. 

La trata de personas: compraventa de seres humanos

Melanie Müllers
23 de junio, 2021

En el informe del Departamento de Estado, establece que el Gobierno de Guatemala no cumple plenamente con los estándares mínimos para la eliminación de la trata de personas, pero está haciendo esfuerzos importantes para lograrlo. Estos esfuerzos han sido una mejora en investigar, enjuiciar y condenar a más traficantes, dedicar recursos adicionales para aumentar la capacidad judicial y procesal fuera de la capital. Aumentar la coordinación regional sobre casos de trata, identificar y brindar servicios a más víctimas, mejorar la identificación de nuevas víctimas y el lanzamiento de varias campañas nuevas de concienciación. El gobierno inauguró un nuevo tribunal especializado para manejar los casos de trata de niños y creó una nueva base de datos interinstitucional para manejar los casos de trata de personas. Sin embargo, el gobierno no cumplió con los estándares mínimos en varias áreas clave. El gobierno redujo los fondos para la protección de las víctimas y no cuenta con refugios adecuados para todas las víctimas de trata identificadas. El gobierno no mejoró el monitoreo y la supervisión general de sus refugios que brindan atención a niños víctimas de la trata, remitió solo el 32 % de las víctimas a atención y los servicios especializados para víctimas siguieron siendo inadecuados debido al alcance del problema y la falta de servicios para víctimas adultas. La corrupción y la complicidad siguieron siendo preocupaciones importantes.

El gobierno ha identificado un número creciente de mujeres traficantes, los traficantes apuntan particularmente a los niños, para realizar trabajos forzados, incluso en tiendas de tortillas y para traficar a otros países. Los traficantes explotan a los niños guatemaltecos para la mendicidad forzada, ventas ambulantes y como artistas callejeros, particularmente dentro de la Ciudad de Guatemala y a lo largo de la frontera con México. Las familias de los niños víctimas suelen ser cómplices de su explotación. Las organizaciones delictivas, incluidas las pandillas, explotan a las niñas en el tráfico sexual y coaccionan a jóvenes en las zonas urbanas para vender o transportar drogas y extorsionar. Los traficantes explotan migrantes latinoamericanos que transitan de manera irregular por Guatemala en ruta a México y Estados Unidos con fines de tráfico sexual o trabajo forzoso en México, Estados Unidos y Guatemala, el descaro es que han explotado a las víctimas incluso en los refugios para migrantes. 

De las aproximadamente 50,000 víctimas de trata sexual reportadas en Guatemala, casi el 60 por ciento son niños, con el alto número de niños vendidos para tráfico sexual, los ingresos equivalen al 2.7 por ciento del producto interno bruto (PIB) de Guatemala.

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La trata de personas es una industria grande y lucrativa, que genera aproximadamente $31.6 mil millones en los mercados internacionales anualmente. De esos $31.6 mil millones, alrededor de $1.3 mil millones un poco más del 4%, depende del tráfico de América Latina.

Es importante conocer que la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes son dos delitos distintos pero que tienen problemas relacionados y es de suma importancia distinguir los dos delitos para ayudar a alcanzar intervenciones relevantes. Para proteger con éxito a las personas de los riesgos de ser víctimas de trata en su migración, se deben considerar diferentes factores para responder con éxito a las necesidades específicas de las víctimas de la trata a fin de velar por que no se sigan violando sus derechos y por que tengan acceso a la asistencia, medidas de protección, servicios de apoyo a la salud física y mental.  Si no se aplica un enfoque basado en los derechos humanos, las víctimas de la trata de personas y las posibles víctimas quedan expuestas a nuevas violaciones de derechos.