Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

La escasez de contenedores en el mundo, la tormenta perfecta

Melanie Müllers
10 de noviembre, 2021

La interrupción de las cadenas de suministro provocada por los impactos de COVID19 desencadenó una crisis de envío mundial, los precios se dispararon debido a la escasez de contenedores.  La podemos llamar “La tormenta perfecta” una combinación de presiones, que elevó los costos del transporte marítimo a más de cuatro veces la tarifa normal, amenazando la estabilidad de las empresas que dependen de estas líneas de transporte comercial.

Algunos reportan el precio de un contenedor de 40 pies desde Asia al norte de Europa aumentó de $2,000 a $9,000 y el transporte desde Asia a la costa oeste de América ha aumentado en un 145 por ciento. En medio de este problema está el desequilibrio del comercio mundial, que se ha agravado como resultado de la pandemia. Con la economía comercial de China recuperándose a un ritmo rápido y una afluencia en la demanda de productos en lugar de servicios, se espera que la escasez de contenedores y las crecientes tarifas de flete continúen durante la primera mitad de 2022.

Se calcula que hay más de 170 millones de contenedores de envío en todo el mundo, que se utilizan para transportar alrededor del 90% de las mercancías. Sin embargo, los efectos de COVID19 han dejado a las líneas navieras con atrasos y retrasos debido a la escasez de mano de obra, la reducción de la capacidad en los sistemas logísticos, la congestión en los puertos y la carga en cuarentena. Esto significa que China no tiene suficientes contenedores disponibles para satisfacer la demanda. Con los productos acumulándose en las fábricas chinas y los comerciantes ofreciendo precios altos por los contenedores, los tiempos promedio de respuesta de los contenedores se han disparado a 100 días.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Como resultado, China está pagando tarifas altas para que los importadores devuelvan los contenedores, lo que hace que sea más rentable enviar cajas vacías en lugar de llenas. Este es claramente un problema creciente, ya que la Global Shipping Alliance sugiere que las compañías navieras están rechazando las reservas de salida porque quieren acelerar la devolución de los contenedores. Las reservas ahora se aceptan en función de la rentabilidad y la importancia estratégica y lastimosamente se están sacrificando muchos transportistas medianos y pequeños.

La combinación de altos precios de envío y competencia por contenedores se ha sentido inevitablemente en la industria alimentaria y agrícola. Bloomberg reportó que los alimentos se están acumulando en los lugares equivocados, los tiempos de carga se han acortado drásticamente, lo que significa que los productores están luchando por llenar los contenedores rapidamente. Además, las altas tarifas de transporte han provocado que los minoristas cancelen contratos, compren suministros a granel o retrasen las compras hasta que los precios se hayan equilibrado.

Con la perspectiva de un aumento de los precios de la escasez de alimentos, el aumento de la presión de los consumidores sobre el precio de los alimentos y los altos costos de envío, muchos compradores están preocupados por la rentabilidad. Comprar bienes a un precio más barato o venderlos a un precio más alto no siempre es posible dentro de las cadenas de suministro existentes, por lo que los compradores buscan formas alternativas de combatir las fluctuaciones de precios. En una industria que generalmente ha dependido del corredor o “intermediario” para hacer el trato, las soluciones digitales deber ser otro camino de exploración para ayudar a los compradores y vendedores en el mercado actual.

En un mundo donde la velocidad lo es todo y donde la pandemia global ha provocado graves retrasos en el envío de productos, las soluciones digitales son vitales para  ayudar a la industria a seguir siendo competitiva y responder a la demanda, conectando a los compradores con proveedores que están más cerca de ellos geográficamente o con el precio de compra significativamente más barato.

La escasez de contenedores en el mundo, la tormenta perfecta

Melanie Müllers
10 de noviembre, 2021

La interrupción de las cadenas de suministro provocada por los impactos de COVID19 desencadenó una crisis de envío mundial, los precios se dispararon debido a la escasez de contenedores.  La podemos llamar “La tormenta perfecta” una combinación de presiones, que elevó los costos del transporte marítimo a más de cuatro veces la tarifa normal, amenazando la estabilidad de las empresas que dependen de estas líneas de transporte comercial.

Algunos reportan el precio de un contenedor de 40 pies desde Asia al norte de Europa aumentó de $2,000 a $9,000 y el transporte desde Asia a la costa oeste de América ha aumentado en un 145 por ciento. En medio de este problema está el desequilibrio del comercio mundial, que se ha agravado como resultado de la pandemia. Con la economía comercial de China recuperándose a un ritmo rápido y una afluencia en la demanda de productos en lugar de servicios, se espera que la escasez de contenedores y las crecientes tarifas de flete continúen durante la primera mitad de 2022.

Se calcula que hay más de 170 millones de contenedores de envío en todo el mundo, que se utilizan para transportar alrededor del 90% de las mercancías. Sin embargo, los efectos de COVID19 han dejado a las líneas navieras con atrasos y retrasos debido a la escasez de mano de obra, la reducción de la capacidad en los sistemas logísticos, la congestión en los puertos y la carga en cuarentena. Esto significa que China no tiene suficientes contenedores disponibles para satisfacer la demanda. Con los productos acumulándose en las fábricas chinas y los comerciantes ofreciendo precios altos por los contenedores, los tiempos promedio de respuesta de los contenedores se han disparado a 100 días.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Como resultado, China está pagando tarifas altas para que los importadores devuelvan los contenedores, lo que hace que sea más rentable enviar cajas vacías en lugar de llenas. Este es claramente un problema creciente, ya que la Global Shipping Alliance sugiere que las compañías navieras están rechazando las reservas de salida porque quieren acelerar la devolución de los contenedores. Las reservas ahora se aceptan en función de la rentabilidad y la importancia estratégica y lastimosamente se están sacrificando muchos transportistas medianos y pequeños.

La combinación de altos precios de envío y competencia por contenedores se ha sentido inevitablemente en la industria alimentaria y agrícola. Bloomberg reportó que los alimentos se están acumulando en los lugares equivocados, los tiempos de carga se han acortado drásticamente, lo que significa que los productores están luchando por llenar los contenedores rapidamente. Además, las altas tarifas de transporte han provocado que los minoristas cancelen contratos, compren suministros a granel o retrasen las compras hasta que los precios se hayan equilibrado.

Con la perspectiva de un aumento de los precios de la escasez de alimentos, el aumento de la presión de los consumidores sobre el precio de los alimentos y los altos costos de envío, muchos compradores están preocupados por la rentabilidad. Comprar bienes a un precio más barato o venderlos a un precio más alto no siempre es posible dentro de las cadenas de suministro existentes, por lo que los compradores buscan formas alternativas de combatir las fluctuaciones de precios. En una industria que generalmente ha dependido del corredor o “intermediario” para hacer el trato, las soluciones digitales deber ser otro camino de exploración para ayudar a los compradores y vendedores en el mercado actual.

En un mundo donde la velocidad lo es todo y donde la pandemia global ha provocado graves retrasos en el envío de productos, las soluciones digitales son vitales para  ayudar a la industria a seguir siendo competitiva y responder a la demanda, conectando a los compradores con proveedores que están más cerca de ellos geográficamente o con el precio de compra significativamente más barato.