Aprobación de la Ley de Incentivos para Movilidad Eléctrica: oportunidades y beneficios para todos
Este es un excelente ejemplo de lo que puede hacerse desde el gobierno en beneficio de todos, tanto productores como consumidores y, desde el punto de vista de los beneficios ambientales, conseguir una mejor calidad de vida de todos los habitantes del país.
El 9 de agosto recién pasado, el Congreso de la República aprobó el Decreto 40-2022, Ley de Incentivos para Movilidad Eléctrica, con la cual Guatemala se une a sus pares latinoamericanos y a otros a nivel mundial. Cepal, en un estudio denominado: “Movilidad Eléctrica: Avances en América Latina y el Caribe” xda cuenta de los países con normas que facilitan -incentivan- el uso de vehículos eléctricos. México y Colombia son los países que más vehículos eléctricos tienen y como dato curioso, Barbados tiene más estaciones de carga eléctrica para vehículos que gasolineras.
Aunque la penetración de ese tipo de vehículos, tanto particulares como para uso colectivo es todavía bajo en Latinoamérica, cada día nos enteramos de que países legislan para que, a partir de algunos años en el futuro, todo vehículo nuevo que se venda deberá ser eléctrico. Con la aprobación del Decreto 40-2022, Guatemala sienta las bases para iniciar el camino hacia el futuro de la movilidad, pero, además -y no menos importante- cumplir la reducción de los Gases Efecto Invernadero (GEI) parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que son un compromiso adquirido por el Estado de Guatemala.
En este último respecto, Guatemala no es un contribuyente significativo al calentamiento global, pero sí sufre sus efectos; no es en esa línea por la que se conseguirá mayores beneficios. Los beneficios se obtendrán más patentemente a nivel local en cuanto a calidad de aire (reducción de emisiones) y gracias al alto componente de generación con fuentes renovables de energía con la que cuenta la matriz energética del país, el usuario podrá contar con precios competitivos versus carburantes, pero más importante aún, estabilidad en los precios versus la volatilidad inherente del mercado mundial de petróleo y combustibles.
Guatemala cuenta con más de un mil cien cuenta megavatios de capacidad instalada de generación con fuetes renovables, lo que la coloca en una posición de liderazgo, cuando menos, a nivel regional. Esto se traduce en la estabilidad en los precios que antes se mencionaba, algo que cualquier consumidor podrá apreciar.
El principal beneficio que la ley otorga, como su nombre lo indica, son incentivos fiscales para motivar la adopción de nuevas tecnologías. Esos beneficios vienen en la forma de exoneración de impuestos tanto para la importación de equipos de abastecimiento -estaciones de carga- como para los vehículos propiamente dichos que además de excepción del impuesto de importación (100% los primeros 5 años y en disminución hasta el año 10), contarán con exoneración de un porcentaje en el pago de impuesto de circulación (100% de modelos de año en curso y año siguiente de curso, luego disminuyendo en los próximos años hasta el 5to). Estos beneficios fiscales son inmediatos para el consumidor.
Pero tomando en cuenta el gran porcentaje de capacidad instalada de generación con fuentes renovables de energía que tiene el país, el beneficio también será para los generadores que encontrarán una nueva avenida dónde poder ofrecer y vender su producto -energía- más allá de las tradicionales. Está de más decir que conforme el parque vehicular eléctrico vaya en aumento, el aliciente para la instalación de más plantas generadoras con fuentes renovables se incentivará. Aunque por el momento Guatemala tiene un superávit energético que se comercializa regionalmente, con el potencial mayor consumo por la vía de vehículos eléctricos, ese excedente podrá ser aprovechado localmente.
De acuerdo con el marco legal vigente, la Comisión Nacional de Energía Eléctrica deberá emitir las normas técnicas para el correcto funcionamiento del abastecimiento en los puntos de servicio de carga; Guatemala cuenta con un marco regulatorio eléctrico (Ley General de Electricidad, Reglamentos de la Ley, del Mercado Mayorista, etc.) que en el año de su aprobación en el año 1996 fue de vanguardia y actualmente sigue siendo avanzado y adecuado para el mercado eléctrico.
Con la aprobación del Decreto 40-2022, el Estado cumple con su función de creación de condiciones favorables para el desarrollo de la industria y comercio en el país, además de crear incentivos para los consumidores. Este es un excelente ejemplo de lo que puede hacerse desde el gobierno en beneficio de todos, tanto productores como consumidores y, desde el punto de vista de los beneficios ambientales, conseguir una mejor calidad de vida de todos los habitantes del país.
Aprobación de la Ley de Incentivos para Movilidad Eléctrica: oportunidades y beneficios para todos
Este es un excelente ejemplo de lo que puede hacerse desde el gobierno en beneficio de todos, tanto productores como consumidores y, desde el punto de vista de los beneficios ambientales, conseguir una mejor calidad de vida de todos los habitantes del país.
El 9 de agosto recién pasado, el Congreso de la República aprobó el Decreto 40-2022, Ley de Incentivos para Movilidad Eléctrica, con la cual Guatemala se une a sus pares latinoamericanos y a otros a nivel mundial. Cepal, en un estudio denominado: “Movilidad Eléctrica: Avances en América Latina y el Caribe” xda cuenta de los países con normas que facilitan -incentivan- el uso de vehículos eléctricos. México y Colombia son los países que más vehículos eléctricos tienen y como dato curioso, Barbados tiene más estaciones de carga eléctrica para vehículos que gasolineras.
Aunque la penetración de ese tipo de vehículos, tanto particulares como para uso colectivo es todavía bajo en Latinoamérica, cada día nos enteramos de que países legislan para que, a partir de algunos años en el futuro, todo vehículo nuevo que se venda deberá ser eléctrico. Con la aprobación del Decreto 40-2022, Guatemala sienta las bases para iniciar el camino hacia el futuro de la movilidad, pero, además -y no menos importante- cumplir la reducción de los Gases Efecto Invernadero (GEI) parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que son un compromiso adquirido por el Estado de Guatemala.
En este último respecto, Guatemala no es un contribuyente significativo al calentamiento global, pero sí sufre sus efectos; no es en esa línea por la que se conseguirá mayores beneficios. Los beneficios se obtendrán más patentemente a nivel local en cuanto a calidad de aire (reducción de emisiones) y gracias al alto componente de generación con fuentes renovables de energía con la que cuenta la matriz energética del país, el usuario podrá contar con precios competitivos versus carburantes, pero más importante aún, estabilidad en los precios versus la volatilidad inherente del mercado mundial de petróleo y combustibles.
Guatemala cuenta con más de un mil cien cuenta megavatios de capacidad instalada de generación con fuetes renovables, lo que la coloca en una posición de liderazgo, cuando menos, a nivel regional. Esto se traduce en la estabilidad en los precios que antes se mencionaba, algo que cualquier consumidor podrá apreciar.
El principal beneficio que la ley otorga, como su nombre lo indica, son incentivos fiscales para motivar la adopción de nuevas tecnologías. Esos beneficios vienen en la forma de exoneración de impuestos tanto para la importación de equipos de abastecimiento -estaciones de carga- como para los vehículos propiamente dichos que además de excepción del impuesto de importación (100% los primeros 5 años y en disminución hasta el año 10), contarán con exoneración de un porcentaje en el pago de impuesto de circulación (100% de modelos de año en curso y año siguiente de curso, luego disminuyendo en los próximos años hasta el 5to). Estos beneficios fiscales son inmediatos para el consumidor.
Pero tomando en cuenta el gran porcentaje de capacidad instalada de generación con fuentes renovables de energía que tiene el país, el beneficio también será para los generadores que encontrarán una nueva avenida dónde poder ofrecer y vender su producto -energía- más allá de las tradicionales. Está de más decir que conforme el parque vehicular eléctrico vaya en aumento, el aliciente para la instalación de más plantas generadoras con fuentes renovables se incentivará. Aunque por el momento Guatemala tiene un superávit energético que se comercializa regionalmente, con el potencial mayor consumo por la vía de vehículos eléctricos, ese excedente podrá ser aprovechado localmente.
De acuerdo con el marco legal vigente, la Comisión Nacional de Energía Eléctrica deberá emitir las normas técnicas para el correcto funcionamiento del abastecimiento en los puntos de servicio de carga; Guatemala cuenta con un marco regulatorio eléctrico (Ley General de Electricidad, Reglamentos de la Ley, del Mercado Mayorista, etc.) que en el año de su aprobación en el año 1996 fue de vanguardia y actualmente sigue siendo avanzado y adecuado para el mercado eléctrico.
Con la aprobación del Decreto 40-2022, el Estado cumple con su función de creación de condiciones favorables para el desarrollo de la industria y comercio en el país, además de crear incentivos para los consumidores. Este es un excelente ejemplo de lo que puede hacerse desde el gobierno en beneficio de todos, tanto productores como consumidores y, desde el punto de vista de los beneficios ambientales, conseguir una mejor calidad de vida de todos los habitantes del país.