Los autos se han convertido en una extensión muy importante de los seres humanos. Son el medio de transporte número uno, gracias a la facilidad e independencia de movilización que brinda, y con ello ha creado un nuevo estilo de vida a su alrededor.

Es importante que los conductores tengan en mente la importancia de tomar en cuenta varios factores de conducta que pueden ayudar al mantenimiento del carro y evitar deterioros inesperados.

Pese a que es inevitable que los vehículos sufran algún desperfecto en algún punto de su vida, existen ciertos comportamientos de cuidado que se pueden tomar en cuenta, no solo para ahorrar unos centavos en constantes mantenimientos o reparaciones, sino también para alargar la vida de tu automóvil.

¿Qué malos hábitos pueden dañar mi vehículo?

1. No realizar el mantenimiento durante el periodo establecido. Este proceso es fundamental para el cambio de aceite, filtros y líquidos, sin importar el modelo o la marca. Cada fabricante determina la cantidad de kilómetros recorridos para la revisión periódica, por ello, consulta con el fabricante o tu experto de confianza para determinar el mismo.

2. Mantén limpio el carro. Puede que sea algo tan simple o lógico, sin embargo, muchas veces se toma como un segundo plano y un tema más visual. En realidad retirar la suciedad evitará que interfiera en el sistema vehicular y se dañe.

3. No hacer caso a las luces del tablero. Cuando un indicador se enciende es importante prestarle atención de inmediato, si no logras reconocer el origen del problema acude con tu mecánico para darle solución al problema.

4. No conduzcas demasiado lento. Esto podría afectar las válvulas, que desencadenaría un mal funcionamiento en el motor, hasta el punto de no poder darle movilidad al carro.

5. No conduzcas de forma agresiva. Podría parecer lógico, ya que se deben respetar los límites de velocidad establecidos en las leyes de tránsito de cada ciudad, sin embargo, muchos conductores gozan de apretar el pedal de velocidad. Además de poner en peligro tu vida, está práctica maltrata los neumáticos al causar un desgaste irregular.

6. No arranques el auto con demasiada fuerza. Encender el vehículo de forma correcta consiste en esperar unos segundos para que el aceite llegue al circuito, de esta forma ya se puede acelerar de manera progresiva.

7. No utilices los frenos demasiado. Un prolongado uso del pedal puede acelerar el desgaste de los discos y pastillas, deformar los discos, crear vibraciones en el volante al frenar e incluso deteriorar el líquido.

8. Mover la dirección con el coche estacionado. La cremallera de la dirección se verá afectada, y la conducción sufrirá holguras. Al hacerlo se fuerza el mecanismo y se puede arruinar antes de tiempo.

9. Excederse con el embrague. Un elemento que funciona por fricción sufre un desgaste de los discos y pastillas cada vez que se pisa sin necesidad de uso alguno.

10. Conducir en reserva. Pese a que el automóvil se mueva con el límite de gasolina en su interior, conducir en ese estado hará que la bomba quede desprotegida al no tener un tanque que garantice la lubricación y enfriamiento de la bomba.