Recientemente,
la Real Academia Sueca de las Ciencias anunció el otorgamiento del Premio Nobel
en Economía 2014 a Jean Tirole de la Universidad de Toulouse, Francia.
Actualmente, Tirole es considerado como uno de los economistas más influyentes. Ha hecho importantes contribuciones a la investigación teórica sobre cómo
entender y regular la actividad de las empresas más grandes y poderosas del
mundo debido a su influencia o efecto sobre la vida de las personas y de las
sociedades.

Existen
industrias que están dominadas por un pequeño grupo de grandes empresas o de
una monopólica a nivel internacional. Según los estudios de Tirole, esto suele
producir en los mercados resultados indeseables, como por ejemplo, la subida de
precios más allá que los justificados por los costos de producción, el bloqueo
a la libre competencia por medio del control político o económico o la
explotación de los consumidores.

Desde
mediados de la década de los ’80 el estudio de las fallas del mercado ha
adquirido mayor importancia, no solamente por las razones ya apuntadas, sino
por la responsabilidad que su regulación representa para los gobiernos del
mundo en cuanto a cómo hacer efectiva la prohibición de las prácticas
monopólicas y por ende, cómo legislar los términos y condiciones de las
fusiones empresariales tendientes al monopolio que restrinjan la libre
competencia y aminoren sus beneficios para las personas.

Previo
al trabajo de Tirole, tanto la academia como el sector gubernamental creyeron
que la regulación de este tipo debía cubrir aspectos generales tales como los
“precios tope” o máximos (medida política común en Latinoamérica) o
prohibir la cooperación entre competidores en perjuicio del consumidor o de la
libre competencia (sin embargo, en muchas legislaciones se permite la
cooperación entre empresas con diferentes posiciones en la cadena de valor). Ahora,
los postulados del investigador laureado demuestran teóricamente que tales
reglas pueden funcionar bien bajo ciertas condiciones, pero hacer más daño que
bien en otras. Los precios máximos pueden forzar a las empresas dominantes a
reducir sus costos, pero también puede dar lugar a ganancias excesivas, algo
contrario a los intereses sociales.

Cuando
una empresa ostenta una posición de poder en el mercado, ¿cómo va a
comportarse? ¿Cómo su comportamiento afectará a sus proveedores, clientes y
competidores? Preguntas como éstas son las que deben guiar a los encargados de
la formulación de las políticas públicas. Tirole ha diseñado una serie de
postulados para industrias especializadas como la banca y telecomunicaciones,
pues considera que cada caso en particular requiere de soluciones y de reglas
del juego propias.

La
investigación de Jean Tirole se caracteriza por la consideración de las
particularidades de los diferentes mercados y el hábil uso de nuevos métodos de
análisis en las ciencias económicas. Ha desarrollado profundos resultados de
sus análisis sobre la naturaleza esencial de la competencia imperfecta y la contratación
bajo información asimétrica. Tirole también ha decantado su propio método para la
enseñanza, el asesoramiento sobre políticas, y la investigación continua sobre
las fuerzas del mercado y su debida regulación. Sus contribuciones proporcionan
un espléndido ejemplo de cómo la teoría económica puede ser de gran importancia
pragmática.