Casi todos hemos participado en la elaboración de algún presupuesto durante nuestras vidas. El más elemental es el de nuestro propio hogar donde por un lado calculamos los ingresos que esperamos tener y por otro los gastos mensuales u anuales que podríamos esperar. Este presupuesto lo vamos ajustando mes a mes por el lado de los gastos para que no nos pasemos de lo que disponemos para el mismo.
El paquetazo fiscal que entró en vigencia en el 2012 ha sido otra causa de la baja en la recaudación tributaria. Parece que a nuestros expertos económicos se les olvida que cualquier incremento en los precios hace caer la cantidad demandada, ceteris paribus. Lo mismo ocurre con los impuestos como demostró George Gilder y Arthur Laffer. El incremento de la tasa impositiva pasado cierto punto hace caer la recaudación porque la actividad económica sufre y decae.
La solución a esta fatal sobreestimación de ingresos es un recorte de los gastos menos prioritarios ajustándolos al nivel real de lo que se espera recaudar y no más deuda.
Casi todos hemos participado en la elaboración de algún presupuesto durante nuestras vidas. El más elemental es el de nuestro propio hogar donde por un lado calculamos los ingresos que esperamos tener y por otro los gastos mensuales u anuales que podríamos esperar. Este presupuesto lo vamos ajustando mes a mes por el lado de los gastos para que no nos pasemos de lo que disponemos para el mismo.
El paquetazo fiscal que entró en vigencia en el 2012 ha sido otra causa de la baja en la recaudación tributaria. Parece que a nuestros expertos económicos se les olvida que cualquier incremento en los precios hace caer la cantidad demandada, ceteris paribus. Lo mismo ocurre con los impuestos como demostró George Gilder y Arthur Laffer. El incremento de la tasa impositiva pasado cierto punto hace caer la recaudación porque la actividad económica sufre y decae.
La solución a esta fatal sobreestimación de ingresos es un recorte de los gastos menos prioritarios ajustándolos al nivel real de lo que se espera recaudar y no más deuda.