Mario Taracena ocupa la presidencia del Organismo Legislativo. Un puesto importantísimo en Guatemala, ya que las leyes que conozca el Congreso dependerán de él. Mario Taracena en sus años en el Congreso ha demostrado dos cosas, sabe hacer lobby político (del bueno) y también le es fiel a su partido (UNE).

Taracena jugó un papel determinante en la comisión extraordinaria de asuntos electorales el año pasado con las reformas a la Ley electoral y de partidos políticos, en la mesa de dicha comisión era él quien ponía el ritmo y defendió muy bien sus puntos logrando consensos entre los diputados de toda la mesa.

Mario Taracena tiene la aptitud política y la oportunidad de cambiar el Congreso que tenemos hoy en día, la pregunta del millón que solo él sabe es ¿Tiene la voluntad de cambiar el Congreso?

Considero que él tiene mucho que ganar haciendo un trabajo honrado, responsable y productivo. Puede terminar su gestión y cerrar con broche de oro su trabajo de vida (más de 30 años de ser diputado). Tiene la capacidad, el conocimiento y la experiencia para cambiar el Congreso para el progreso de la política y del desarrollo del país en general.

Su capacidad para hacer un excelente trabajo como Presidente del Congreso también se puede convertir en lo contrario. Puede utilizar su conocimiento legislativo, lobby político y experiencia para abusar del sistema y satisfacer intereses personales.

Un punto muy importante que él debe de tomar en cuenta es que, si hay un momento en donde se puede cambiar el Congreso para bien, es ahora. A pesar de los intereses obscuros de diputados y negocios clandestinos, si hace un buen trabajo tendrá el apoyo de la ciudadanía guatemalteca, prensa y sociedad civil.