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Prensa responsable y no abusiva

Redacción
28 de enero, 2016

El domingo 24 de enero en la sección llamada “el peladero” fue publicada a todo color, una barbárica publicación insultando al Presidente de Guatemala y a la comunidad LGTB: “Ni corrupto, ni ladrón, pero sí Payaso y Maricón”.
Lo insólito del desagradable asunto es que haya sido posible que se autorizara una publicación de tan baja categoría. Surgen las preguntas entonces, más allá de la pírrica disculpa publicada el lunes por el señor Zamora (propietario del medio escrito): ¿Cómo pudo haberse pasado la dirección editorial del Periódico, el estiradísimo “red tape” de lo que es posible y adecuado publicar? Un sin sentido…que mal para su negocio, aunque costo reputacional no tiene porque no le queda nada. Sencillamente se le pasó, fue estúpido y vergonzoso.
“el peladero” ha causado sismas en nuestra sociedad, todos los domingos desde hace muchos años. Por medio de sus métodos no ortodoxos de chismografía, infiltración de informantes o filtración de información, ha expuesto lo malo, feo, vergonzoso, trivial, y también las frívolas calumnias. Muchos cuestionamos las fabulas animadas y los inventos, exageraciones hiperbólicas de la realidad que publican. Pero a veces, vaya que han puesto el dedo en la yaga en los asuntos graves de desgobierno y la voracidad de los corruptos. Es cierto que de no ser por esta vía, muy probablemente no hubiésemos conocido tantos desastres en los gobiernos.
La cuestión es el resguardo de las libertades de expresión y de información en sociedades como la nuestra. Nosotros vivimos en una democracia de mala calidad. De eso hay que ser consciente, pero es democracia. Con sistemas de pesos y contrapesos tan deliberadamente debilitados, los medios de comunicación sirven para hacer valer el peso de entes observantes y una ciudadanía informada (no es lo mismo que bien informada) y con opinión. El quinto poder solían ser los medios de comunicación, hoy ya no lo son más, ya que la ciudadanía activa usa la tecnología para ejercer este rol de observador crítico y como medio de presión.
Entonces, ¿es mejor de repente lidiar con una prensa insidiosa, y hasta si se quiere abusiva, antes que cerrar y cercenar la posibilidad de que los asuntos públicos se ventilen al público?
Tiene que haber una especie de control social, que se da a en tiempo real, a través de los medios de prensa y redes sociales. En países como el nuestro, los sistemas de control del Estado están en proceso de construcción y con tan grandes retrocesos en los pasados 4 años, es momento de ser más innovador y agresivos para restringir los abusos. Hoy por hoy la ciudadanía ejerce controles a una velocidad impresionante, los medios informativos aún no terminan de pasar de reportar noticias para profundizar en periodismo investigativo.
Independientemente de los calificativos de que puede o no gustarnos es importante el papel de supervisión que ejerce la prensa, pero en un circuito cerrado, un medio de comunicación como el Periódico y su “peladero”, ya es un hecho que recibe rechazo social colectivo y fuertes críticas sobre su vergonzoso desempeño. Tenemos entonces que GRITARLES para que entiendan, dónde están los límites y que sus acciones tienen serias repercusiones.
El poder está retornando a la ciudadanía, el actor principal del ejercicio de los derechos en democracia. El capital social que se construye con mayor posibilidad de éxito, esas habilidades de relacionarnos entre nosotros, hacer bloque, trabajar en red, comunicarnos en pro de un bien común. Finalmente, respecto a los medios de comunicación que son irresponsables e irrespetuosos como el arriba mencionado, hay una revitalizada masa crítica de ciudadanos guatemaltecos, quienes compramos un periódico o lo dejamos de lado. Sino por su reputación, digamos que por mantenerse en el negocio, asuman su responsabilidad de informar, no de deformar la opinión pública, y mucho menos insultar.

Prensa responsable y no abusiva

Redacción
28 de enero, 2016

El domingo 24 de enero en la sección llamada “el peladero” fue publicada a todo color, una barbárica publicación insultando al Presidente de Guatemala y a la comunidad LGTB: “Ni corrupto, ni ladrón, pero sí Payaso y Maricón”.
Lo insólito del desagradable asunto es que haya sido posible que se autorizara una publicación de tan baja categoría. Surgen las preguntas entonces, más allá de la pírrica disculpa publicada el lunes por el señor Zamora (propietario del medio escrito): ¿Cómo pudo haberse pasado la dirección editorial del Periódico, el estiradísimo “red tape” de lo que es posible y adecuado publicar? Un sin sentido…que mal para su negocio, aunque costo reputacional no tiene porque no le queda nada. Sencillamente se le pasó, fue estúpido y vergonzoso.
“el peladero” ha causado sismas en nuestra sociedad, todos los domingos desde hace muchos años. Por medio de sus métodos no ortodoxos de chismografía, infiltración de informantes o filtración de información, ha expuesto lo malo, feo, vergonzoso, trivial, y también las frívolas calumnias. Muchos cuestionamos las fabulas animadas y los inventos, exageraciones hiperbólicas de la realidad que publican. Pero a veces, vaya que han puesto el dedo en la yaga en los asuntos graves de desgobierno y la voracidad de los corruptos. Es cierto que de no ser por esta vía, muy probablemente no hubiésemos conocido tantos desastres en los gobiernos.
La cuestión es el resguardo de las libertades de expresión y de información en sociedades como la nuestra. Nosotros vivimos en una democracia de mala calidad. De eso hay que ser consciente, pero es democracia. Con sistemas de pesos y contrapesos tan deliberadamente debilitados, los medios de comunicación sirven para hacer valer el peso de entes observantes y una ciudadanía informada (no es lo mismo que bien informada) y con opinión. El quinto poder solían ser los medios de comunicación, hoy ya no lo son más, ya que la ciudadanía activa usa la tecnología para ejercer este rol de observador crítico y como medio de presión.
Entonces, ¿es mejor de repente lidiar con una prensa insidiosa, y hasta si se quiere abusiva, antes que cerrar y cercenar la posibilidad de que los asuntos públicos se ventilen al público?
Tiene que haber una especie de control social, que se da a en tiempo real, a través de los medios de prensa y redes sociales. En países como el nuestro, los sistemas de control del Estado están en proceso de construcción y con tan grandes retrocesos en los pasados 4 años, es momento de ser más innovador y agresivos para restringir los abusos. Hoy por hoy la ciudadanía ejerce controles a una velocidad impresionante, los medios informativos aún no terminan de pasar de reportar noticias para profundizar en periodismo investigativo.
Independientemente de los calificativos de que puede o no gustarnos es importante el papel de supervisión que ejerce la prensa, pero en un circuito cerrado, un medio de comunicación como el Periódico y su “peladero”, ya es un hecho que recibe rechazo social colectivo y fuertes críticas sobre su vergonzoso desempeño. Tenemos entonces que GRITARLES para que entiendan, dónde están los límites y que sus acciones tienen serias repercusiones.
El poder está retornando a la ciudadanía, el actor principal del ejercicio de los derechos en democracia. El capital social que se construye con mayor posibilidad de éxito, esas habilidades de relacionarnos entre nosotros, hacer bloque, trabajar en red, comunicarnos en pro de un bien común. Finalmente, respecto a los medios de comunicación que son irresponsables e irrespetuosos como el arriba mencionado, hay una revitalizada masa crítica de ciudadanos guatemaltecos, quienes compramos un periódico o lo dejamos de lado. Sino por su reputación, digamos que por mantenerse en el negocio, asuman su responsabilidad de informar, no de deformar la opinión pública, y mucho menos insultar.