A raíz del reciente #JuevesDeCICIG, como le ha titulado la población, es importante aclarar tres aspectos.
La corrupción no termina aquí. Yo también estoy harto de esta frase (porque quisiera que todo se solucionara más rápido) pero es cierta: “Esto apenas empieza”. Los casos de corrupción, lastimosa pero necesariamente, seguirán saliendo a la luz por muchos años más. Esto nos lleva al segundo aspecto.
No podemos bajar la guardia. El año anterior fue el año para manifestar en la plaza. Este es el año para realizar acciones concretas y organizar grupos de sociedad civil para trabajar en conjunto con las instituciones del Estado, puesto que ya sabemos que el Gobierno no puede solucionarlo todo. En otras palabras, tenemos que “meter las manos y las narices” en el gobierno actual: fiscalizar y auditar. Y esto nos lleva al tercer aspecto.
Tampoco podemos dejar que todo lo resuelva el MP y la CICIG (comisión con la que tenemos que ser cuidadosos también; darle mucho poder a una institución siempre será peligroso). Nosotros como ciudadanos tenemos que, como mínimo, estar informados de todo lo que sucede en el país. Lo he dicho en varias columnas y lo repito en esta: informarse es el primer paso para tener el país que queremos. Saber todo lo que sucede no solo es tarea de los periodistas.
No olvidemos que Guatemala está cambiando, y nosotros con ella. Antes el silencio era hábito, ahora manifestarse y decir lo que pensamos es costumbre. Antes robar no traía repercusiones, ahora estamos viendo el precio. Antes se llamaban “jueves de paches”, ahora son #JuevesDeCICIG.