No dudo en decir que es durante la niñez en que se espera vivir experiencias únicas y sobre todo que te marcaran por el resto de tu vida, por eso es que el Estado tiene como orden proteger a las niñas y niños con el fin de proporcionarles una vida en donde la educación, salud y la recreación sean parte indispensable de aquellos que en unos años serán el futuro de Guatemala.
Pero, la reflexión a realizar se tiene que basar en que muchos de los menores de edad del país, no gozan de esa infancia soñada, sino al contrario viven en completa desigualdad y con grandes carencias.
Lo más grave es que miles viven sin alimentación y por eso nos convertimos en los grandes poseedores de los más altos niveles de desnutrición aguda y crónica, esta situación delicada nos hace pensar en la necesidad de ver que estamos haciendo de cara a una crisis cada vez más aguda.
Pero lo más grave de todo, resulta en que hasta ahora a nuestra lamentable tragedia no se le encuentra una solución pronta a la que por visto estamos dispuestos a continuar, de no hacerse cambios estructurales al país y que tienen que ver con la búsqueda el bien común.
Ver a nuestra niñez a merced de falta de educación, hambre y la recreación en la población más vulnerable me hace meditar en la clase de futuro que tendrá el país, con niños y sin educación.
El llamado serio es y será hacia la clase política que dirige el país para que tome cartas en el asunto y deje de llenar los bolsillos de los poderosos de siempre que parece enconcordancia con las mafias e intereses personales y no debien común como se esperaría.
En este día, se debe hacer un llamado a que las condiciones de pobreza y pobreza extrema están llevando por el hambre a migrar, tengamos presente que la niñez está sufriendo esta condición ya que su situación de migrante los está llevando incluso a ser detenidos por su condición de migrantes y separados de sus padres y el país que los vio nacer.
Por eso, creo indispensable que esta gran problemática el Gobierno debiera ponerla como prioridad es decir pensar enacciones prontas y mejorando condiciones de vida a las niñas y niños y con esto establecer las condiciones necesarias para propicia, la buena gobernanza y la seguridad con el fin de que se creen condiciones necesarias para el desarrollo formal de un país que tanto necesita.
Hoy en el Día del Niño, la reflexión es dar a nuestros niños lo mejor y esto se logrará cuando en realidad sus condiciones cambien y ese futuro que muchos esperamos que ocurra, será solo si existe compromisos de Gobierno, más allá de publicidad y de palabras de politiquero.
República es ajena a la opinión expresada en este artículo
No dudo en decir que es durante la niñez en que se espera vivir experiencias únicas y sobre todo que te marcaran por el resto de tu vida, por eso es que el Estado tiene como orden proteger a las niñas y niños con el fin de proporcionarles una vida en donde la educación, salud y la recreación sean parte indispensable de aquellos que en unos años serán el futuro de Guatemala.
Pero, la reflexión a realizar se tiene que basar en que muchos de los menores de edad del país, no gozan de esa infancia soñada, sino al contrario viven en completa desigualdad y con grandes carencias.
Lo más grave es que miles viven sin alimentación y por eso nos convertimos en los grandes poseedores de los más altos niveles de desnutrición aguda y crónica, esta situación delicada nos hace pensar en la necesidad de ver que estamos haciendo de cara a una crisis cada vez más aguda.
Pero lo más grave de todo, resulta en que hasta ahora a nuestra lamentable tragedia no se le encuentra una solución pronta a la que por visto estamos dispuestos a continuar, de no hacerse cambios estructurales al país y que tienen que ver con la búsqueda el bien común.
Ver a nuestra niñez a merced de falta de educación, hambre y la recreación en la población más vulnerable me hace meditar en la clase de futuro que tendrá el país, con niños y sin educación.
El llamado serio es y será hacia la clase política que dirige el país para que tome cartas en el asunto y deje de llenar los bolsillos de los poderosos de siempre que parece enconcordancia con las mafias e intereses personales y no debien común como se esperaría.
En este día, se debe hacer un llamado a que las condiciones de pobreza y pobreza extrema están llevando por el hambre a migrar, tengamos presente que la niñez está sufriendo esta condición ya que su situación de migrante los está llevando incluso a ser detenidos por su condición de migrantes y separados de sus padres y el país que los vio nacer.
Por eso, creo indispensable que esta gran problemática el Gobierno debiera ponerla como prioridad es decir pensar enacciones prontas y mejorando condiciones de vida a las niñas y niños y con esto establecer las condiciones necesarias para propicia, la buena gobernanza y la seguridad con el fin de que se creen condiciones necesarias para el desarrollo formal de un país que tanto necesita.
Hoy en el Día del Niño, la reflexión es dar a nuestros niños lo mejor y esto se logrará cuando en realidad sus condiciones cambien y ese futuro que muchos esperamos que ocurra, será solo si existe compromisos de Gobierno, más allá de publicidad y de palabras de politiquero.
República es ajena a la opinión expresada en este artículo