Al ver lo que sucedió ayer en el país, donde el Presidente con sus ministros dio una conferencia de prensa en la que se dar por terminado el mandato de la CICIG, pensé en las conversaciones informales que he tenido con amigos sobre este tema y que sería importante compartirlas mis lectores y el público en general. De hecho, esta respuesta de mi parte a las inquietudes de mi amigo ocurrió el mes pasado, pero ahora está más vigente que nunca.
Sin meterme a decir si lo que se hizo es legal o no, considero que mis respuestas a las inquietudes de mi amigo pueden dar una luz del por qué yo he estado en contra de la CICIG desde su inicio. No espero que todos estén de acuerdo con lo que le escribí como tampoco lo estuvo en todo mi amigo, pero al menos creo que hay puntos válidos que considerar a la hora de pensar en una Guatemala mejor, una Guatemala donde la Justicia sea ciega de verdad, donde la ideología y la política no la ensucien y que cuando se acuse a alguien se haga con evidencias y no con especulaciones. Les dejo mi respuesta a las inquietudes de mi amigo:
Hola mi querido Amigo:
Me preguntas que ¿cuál es entonces la solución para combatir la corrupción?
Pienso que es un sistema de justicia reformado. En ProReforma hicimos una propuesta que no era perfecta pero que hasta gente de la izquierda estaba de acuerdo con la parte de Justicia y elección de Jueces y magistrados. El resto no. Los diputados no quisieron. Pero ahí está. Hay otras reformas parecidas que podrían pasarse. Pero este es el primer paso.
Luego me dices que si se va la CICIG regresamos al 2015. Y ¿antes de esa fecha a cuantos CORRUPTOS había condenado el sistema de Justicia en Guatemala? Yo te digo que antes había muchos corruptos como ahora. Tal vez se atraparon a algunos. Además, sobreestimas a la CICIG. La CICIG fue creada el 12 de diciembre de 2006 por medio del acuerdo firmado entre las Naciones Unidas y el Gobierno de Guatemala, tras la opinión consultiva favorable de la Corte de Constitucionalidad en mayo de 2007.
Es verdad que algunos casos fueron exitosos por parte de la CICIG y el MP en cuanto a corrupción. Pero también porque la gente se cansó y presionó por todos lados. No te olvides del poder de las masas.
Que los comisionados han sido parciales y tienen una agenda política al igual que la ONU no lo dudes. Traen una agenda socialista totalmente. Quieren destruir la República e instaurar un sistema donde los derechos individuales sean violados destruyendo la propiedad privada, la vida y la libertad de muchos a favor de otros. Si no, mira lo que está pasando en el país. ¿Cómo es posible que se apoye a CODECA tan descaradamente? Son ladrones de energía eléctrica.
Sé que hay casos donde sin CICIG se han procesado y metidos presos a corruptos. Pero eso no debe servir de esperanza pues hay muchos más que no fueron procesados y por eso se afirma con toda razón que en Guatemala hay un nivel de impunidad elevadísimo.
Nadie dijo que la CICIG impartiera Justicia y lo hizo (indirectamente presionando a jueces para que metiera a la cárcel a algunas personas, inocentes, y que no tuvieran medidas sustitutivas). Varios de estos presos inocentes ya murieron. La CICIG no debía impartir justicia, pero tampoco debía violar las leyes ni la misma Justicia.
Al Ministerio Público hay que reforzarlo. El INACIF ha sido una de las mejores creaciones que han surgido para reforzar con evidencia científica al MP y así los jueces puedan tomar decisiones basadas en hechos reales demostrados y no en testimonios que muchas veces son falsos. Los jueces tienen una labor muy importante y difícil y también hay que reforzarlos. Pero te recuerdo que ni el gobierno confía en ellos. Hace unos cuantos años, un buen juez le dijo a un amigo que ni tenían internet porque desde arriba decían que sólo serviría para que vieran pornografía. ¡Que ridículo!, ¿no?, cuando dejamos en sus manos las vidas de tantas personas.
No dije que fuera injusto que a unos acusen y a otros no. Dije que era injusto que metieran a inocentes a la cárcel y que luego, después de varios años, sin pruebas, los dejen libres con todo el daño hecho a sus vidas, reputación y familias.
Lo de que se acusen a unos y no a otros es también injusto, aunque no lo había dicho. Porque en justicia no hay ideologías, o se comete un crimen o no. No importa la ideología. Sin embargo, se nota una justicia parcializada favoreciendo a los de la UNE, por ejemplo y no procesándolos o bien dejándoles en libertad condicional mientras que a otros inocentes no.
¿Cuál es entonces la solución?
No creo que la CICIG sea la solución.
No creo que por unos casos exitosos se justifiquen todas las atrocidades e irrespeto a la ley y al debido proceso que los comisionados de CICIG, sin excepción, han cometido abusando de su poder absoluto y su total inmunidad e impunidad.
No creo que debamos darle un cheque en blanco a ningún organismo ni del país ni internacional. La CICIG tiene un cheque en blanco y puede hacer lo que quiera. Puede asesinarte y no pasa nada. Los mismos poderes del Estados están divididos en tres para lograr ese balance y supervisión a modo de evitar un abuso de parte de uno de ellos. Y si por momentos se han visto épocas de abuso al final no perduran porque el sistema se autocorrige. No en el tiempo y momento que uno desearía. Pasan más años de los que uno quisiera, pero es un tema que hay que resolver.
Si creo en un sistema de justicia reforzado, no politizado (de esto ya he escrito muchas veces y depende de la forma de escoger a jueces y magistrados, por sorteo, y que sean vitalicios).
Si creo que nosotros somos los que debemos cambiar ese sistema. Cuántos intentos se han hecho y no se ha logrado, pero eso no significa que deba tirar la toalla y someterme a la merced de otros corruptos todos poderosos que tienen total inmunidad e impunidad como CICIG.
Recuerdo que se quiso privatizar Guatel y otras empresas en los años 80. No se pudo. Yo estuve apoyando a Manuel Ayau en eso. En estas instituciones había piñatas de él en un féretro con un rotundo “No a la Privatización”. Una década y media después se privatizó Guatel con una liberación de las frecuencias y sin monopolio. Se pasó una ley de electricidad que permitió años más tarde, por fin, la competencia en el sector. Todavía con defectos, pero fue un avance. Se desconcentró el sistema financiero y de posesión y transacciones de divisas (antes todo era en Quetzales según la ley). Lo que quiero decir es que todo tienen su momento. Y el momento político se acerca. Cada vez estamos más cerca de ello. Así lo siento.
Siento que la CICIG tuvo algunos aciertos, pero no se justifican sus errores, su parcialización, su violación de las mismas leyes y del debido proceso, su coerción a los jueces y magistrados, así como a los fiscales, su presión política sesgada y mucho menos su inmunidad e impunidad.
Cada día se hará más difícil para los políticos corruptos ser impunes gracias a la tecnología. Las escuchas telefónicas, cámaras, videos, y otros medios digitales que permiten una mayor transparencia en las actuaciones de los funcionarios públicos permiten descubrir ahora muchos actos de corrupción. Y también ahora es fácil enterarse inmediatamente de muchas cosas gracias a las redes sociales, el internet y las cada día mejores comunicaciones del país. Verás a los enemigos de estas tecnologías tratando de sacar leyes para limitarlas. No nos sorprendamos.
Termino con una frase de uno de mis personajes favoritos:
“Ninguna sociedad puede existir, si no impera en algún grado el respeto a las leyes.” Frédéric Bastiat
República es ajena a la opinión expresada en este artículo
Al ver lo que sucedió ayer en el país, donde el Presidente con sus ministros dio una conferencia de prensa en la que se dar por terminado el mandato de la CICIG, pensé en las conversaciones informales que he tenido con amigos sobre este tema y que sería importante compartirlas mis lectores y el público en general. De hecho, esta respuesta de mi parte a las inquietudes de mi amigo ocurrió el mes pasado, pero ahora está más vigente que nunca.
Sin meterme a decir si lo que se hizo es legal o no, considero que mis respuestas a las inquietudes de mi amigo pueden dar una luz del por qué yo he estado en contra de la CICIG desde su inicio. No espero que todos estén de acuerdo con lo que le escribí como tampoco lo estuvo en todo mi amigo, pero al menos creo que hay puntos válidos que considerar a la hora de pensar en una Guatemala mejor, una Guatemala donde la Justicia sea ciega de verdad, donde la ideología y la política no la ensucien y que cuando se acuse a alguien se haga con evidencias y no con especulaciones. Les dejo mi respuesta a las inquietudes de mi amigo:
Hola mi querido Amigo:
Me preguntas que ¿cuál es entonces la solución para combatir la corrupción?
Pienso que es un sistema de justicia reformado. En ProReforma hicimos una propuesta que no era perfecta pero que hasta gente de la izquierda estaba de acuerdo con la parte de Justicia y elección de Jueces y magistrados. El resto no. Los diputados no quisieron. Pero ahí está. Hay otras reformas parecidas que podrían pasarse. Pero este es el primer paso.
Luego me dices que si se va la CICIG regresamos al 2015. Y ¿antes de esa fecha a cuantos CORRUPTOS había condenado el sistema de Justicia en Guatemala? Yo te digo que antes había muchos corruptos como ahora. Tal vez se atraparon a algunos. Además, sobreestimas a la CICIG. La CICIG fue creada el 12 de diciembre de 2006 por medio del acuerdo firmado entre las Naciones Unidas y el Gobierno de Guatemala, tras la opinión consultiva favorable de la Corte de Constitucionalidad en mayo de 2007.
Es verdad que algunos casos fueron exitosos por parte de la CICIG y el MP en cuanto a corrupción. Pero también porque la gente se cansó y presionó por todos lados. No te olvides del poder de las masas.
Que los comisionados han sido parciales y tienen una agenda política al igual que la ONU no lo dudes. Traen una agenda socialista totalmente. Quieren destruir la República e instaurar un sistema donde los derechos individuales sean violados destruyendo la propiedad privada, la vida y la libertad de muchos a favor de otros. Si no, mira lo que está pasando en el país. ¿Cómo es posible que se apoye a CODECA tan descaradamente? Son ladrones de energía eléctrica.
Sé que hay casos donde sin CICIG se han procesado y metidos presos a corruptos. Pero eso no debe servir de esperanza pues hay muchos más que no fueron procesados y por eso se afirma con toda razón que en Guatemala hay un nivel de impunidad elevadísimo.
Nadie dijo que la CICIG impartiera Justicia y lo hizo (indirectamente presionando a jueces para que metiera a la cárcel a algunas personas, inocentes, y que no tuvieran medidas sustitutivas). Varios de estos presos inocentes ya murieron. La CICIG no debía impartir justicia, pero tampoco debía violar las leyes ni la misma Justicia.
Al Ministerio Público hay que reforzarlo. El INACIF ha sido una de las mejores creaciones que han surgido para reforzar con evidencia científica al MP y así los jueces puedan tomar decisiones basadas en hechos reales demostrados y no en testimonios que muchas veces son falsos. Los jueces tienen una labor muy importante y difícil y también hay que reforzarlos. Pero te recuerdo que ni el gobierno confía en ellos. Hace unos cuantos años, un buen juez le dijo a un amigo que ni tenían internet porque desde arriba decían que sólo serviría para que vieran pornografía. ¡Que ridículo!, ¿no?, cuando dejamos en sus manos las vidas de tantas personas.
No dije que fuera injusto que a unos acusen y a otros no. Dije que era injusto que metieran a inocentes a la cárcel y que luego, después de varios años, sin pruebas, los dejen libres con todo el daño hecho a sus vidas, reputación y familias.
Lo de que se acusen a unos y no a otros es también injusto, aunque no lo había dicho. Porque en justicia no hay ideologías, o se comete un crimen o no. No importa la ideología. Sin embargo, se nota una justicia parcializada favoreciendo a los de la UNE, por ejemplo y no procesándolos o bien dejándoles en libertad condicional mientras que a otros inocentes no.
¿Cuál es entonces la solución?
No creo que la CICIG sea la solución.
No creo que por unos casos exitosos se justifiquen todas las atrocidades e irrespeto a la ley y al debido proceso que los comisionados de CICIG, sin excepción, han cometido abusando de su poder absoluto y su total inmunidad e impunidad.
No creo que debamos darle un cheque en blanco a ningún organismo ni del país ni internacional. La CICIG tiene un cheque en blanco y puede hacer lo que quiera. Puede asesinarte y no pasa nada. Los mismos poderes del Estados están divididos en tres para lograr ese balance y supervisión a modo de evitar un abuso de parte de uno de ellos. Y si por momentos se han visto épocas de abuso al final no perduran porque el sistema se autocorrige. No en el tiempo y momento que uno desearía. Pasan más años de los que uno quisiera, pero es un tema que hay que resolver.
Si creo en un sistema de justicia reforzado, no politizado (de esto ya he escrito muchas veces y depende de la forma de escoger a jueces y magistrados, por sorteo, y que sean vitalicios).
Si creo que nosotros somos los que debemos cambiar ese sistema. Cuántos intentos se han hecho y no se ha logrado, pero eso no significa que deba tirar la toalla y someterme a la merced de otros corruptos todos poderosos que tienen total inmunidad e impunidad como CICIG.
Recuerdo que se quiso privatizar Guatel y otras empresas en los años 80. No se pudo. Yo estuve apoyando a Manuel Ayau en eso. En estas instituciones había piñatas de él en un féretro con un rotundo “No a la Privatización”. Una década y media después se privatizó Guatel con una liberación de las frecuencias y sin monopolio. Se pasó una ley de electricidad que permitió años más tarde, por fin, la competencia en el sector. Todavía con defectos, pero fue un avance. Se desconcentró el sistema financiero y de posesión y transacciones de divisas (antes todo era en Quetzales según la ley). Lo que quiero decir es que todo tienen su momento. Y el momento político se acerca. Cada vez estamos más cerca de ello. Así lo siento.
Siento que la CICIG tuvo algunos aciertos, pero no se justifican sus errores, su parcialización, su violación de las mismas leyes y del debido proceso, su coerción a los jueces y magistrados, así como a los fiscales, su presión política sesgada y mucho menos su inmunidad e impunidad.
Cada día se hará más difícil para los políticos corruptos ser impunes gracias a la tecnología. Las escuchas telefónicas, cámaras, videos, y otros medios digitales que permiten una mayor transparencia en las actuaciones de los funcionarios públicos permiten descubrir ahora muchos actos de corrupción. Y también ahora es fácil enterarse inmediatamente de muchas cosas gracias a las redes sociales, el internet y las cada día mejores comunicaciones del país. Verás a los enemigos de estas tecnologías tratando de sacar leyes para limitarlas. No nos sorprendamos.
Termino con una frase de uno de mis personajes favoritos:
“Ninguna sociedad puede existir, si no impera en algún grado el respeto a las leyes.” Frédéric Bastiat
República es ajena a la opinión expresada en este artículo