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El Consenso de la Declaración de Ginebra

Jose Goubaud
10 de noviembre, 2021

Un acuerdo de suma importancia, que ha pasado desapercibido

El 12 de octubre recién pasado, Guatemala se convirtió en el país número 35 en firmar el Consenso de Ginebra, que promueve entre otras cosas, la protección de la familia, sin embrago, este convenio contiene una serie de objetivos que son en opinión de este servidor la base para la construcción de una sociedad con principios y valores que permiten la mejor convivencia entre ciudadanos.

Para poner en contexto al lector sobre este convenio, trataré de enumerar los principales ideales del mismo. Podemos comenzar reconociendo que es un esfuerzo multinacional que iniciaron 6 países, entre ellos, Brasil, Estados Unidos y Hungría, posteriormente, se unieron 29 países más sumando 35 naciones; desde el inicio del consenso se plantearon cuatro objetivos fundamentales, tomando como base el desarrollo y bienestar de las mujeres desde el inicio de su vida, dicho en otras palabras desde la propia concepción, estos cuatro ideales son: 1) mejorar la salud de las mujeres; 2) preservar toda la vida humana; 3) fortalecer la familia como base esencial y natural de la sociedad, y 4) asegurar la soberanía de las naciones para no dejarse presionar de las políticas impositivas globales.

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Cuando me referí antes a que el consenso basa su eje estratégico en el desarrollo y bienestar de las mujeres, se hace necesario ampliar este concepto; lo anterior hace referencia a que este proyecto promueve la libertad de las mujeres para que gocen de todos sus derechos civiles, políticos y humanos; afirma que deben gozar de accesos igualitarios a la educación y que esta debe ser de calidad. Es necesario resaltar, que el Consenso de Ginebra defiende que el derecho a la vida es inherente a la persona humana y que en ningún caso se debe promover el aborto como método de planificación familiar y mucho menos como un servicio de salud auspiciado por el Estado; afirma que la familia es el elemento fundamental de la sociedad y que esta tiene el derecho a la protección del Estado.

Otro factor que considero importante resaltar, es lo referente a la defensa de la soberanía de cada país, el documento reitera que NO EXISTE UN DERECHO INTERNACIONAL AL ABORTO NI RECAE SOBRE LAS NACIONES UNA OBLIGACIÓN INTERNACIONAL DE ACEPTAR O FACILITAR EL ABORTO.

Pocas semanas atrás, una delegación de tres diputados de Guatemala asistió a la conmemoración del primer aniversario de la firma de la Declaración del Consenso de Ginebra, realizada en Washington en el edificio Russel del Senado, en donde participaron delegados de los 35 países firmantes en la que los representantes de cada país reafirmaron su compromiso de respetar y apoyar toda legislación referente al bienestar de la mujer, la familia y la vida y a promover la soberanía de cada país.

Escribiendo esta columna, leí la noticia que el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden; había ordenado retirar a su país de este consenso y recomendaba a otras naciones firmantes a hacer lo mismo, sorprendentemente, luego de esta orden presidencial y durante el mismo acto de la firma del aniversario, Rusia se sumaba a este acuerdo, dando un nuevo impulso a esta iniciativa pro vida, así mismo, líderes del Congreso de Estados Unidos, haciendo caso omiso de la instrucción del Presidente Biden, presentaron una resolución el mismo día dónde daban todo su respaldo a los principios de la declaración.

Para concluir, no me queda más que agregar que en la Constitución de la República de Guatemala, en su Título I, Artículo 1º. Protección a la persona. Se lee: “El Estado de Guatemala se organiza para proteger a la persona y a la familia…”, de igual forma, el Artículo 4.1, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, reza: “Toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley y, en general, a partir del momento de la concepción.  Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente.” Convención en la que Guatemala es signataria, por lo que el país está siendo congruente con su legislación y acuerdos internacionales contraídos. Estoy consciente que la modernidad y la globalización avanzan a un ritmo que en ocasiones deja atrás la legislación y que esta no debe ser estática sino que dinámica, sin embargo, hay principios y valores que deben mantenerse como las bases inviolables de los individuos y entre estos deben estar el respeto a la vida, la defensa de la familia y el respeto al derecho ajeno.

El Consenso de la Declaración de Ginebra

Jose Goubaud
10 de noviembre, 2021

Un acuerdo de suma importancia, que ha pasado desapercibido

El 12 de octubre recién pasado, Guatemala se convirtió en el país número 35 en firmar el Consenso de Ginebra, que promueve entre otras cosas, la protección de la familia, sin embrago, este convenio contiene una serie de objetivos que son en opinión de este servidor la base para la construcción de una sociedad con principios y valores que permiten la mejor convivencia entre ciudadanos.

Para poner en contexto al lector sobre este convenio, trataré de enumerar los principales ideales del mismo. Podemos comenzar reconociendo que es un esfuerzo multinacional que iniciaron 6 países, entre ellos, Brasil, Estados Unidos y Hungría, posteriormente, se unieron 29 países más sumando 35 naciones; desde el inicio del consenso se plantearon cuatro objetivos fundamentales, tomando como base el desarrollo y bienestar de las mujeres desde el inicio de su vida, dicho en otras palabras desde la propia concepción, estos cuatro ideales son: 1) mejorar la salud de las mujeres; 2) preservar toda la vida humana; 3) fortalecer la familia como base esencial y natural de la sociedad, y 4) asegurar la soberanía de las naciones para no dejarse presionar de las políticas impositivas globales.

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Cuando me referí antes a que el consenso basa su eje estratégico en el desarrollo y bienestar de las mujeres, se hace necesario ampliar este concepto; lo anterior hace referencia a que este proyecto promueve la libertad de las mujeres para que gocen de todos sus derechos civiles, políticos y humanos; afirma que deben gozar de accesos igualitarios a la educación y que esta debe ser de calidad. Es necesario resaltar, que el Consenso de Ginebra defiende que el derecho a la vida es inherente a la persona humana y que en ningún caso se debe promover el aborto como método de planificación familiar y mucho menos como un servicio de salud auspiciado por el Estado; afirma que la familia es el elemento fundamental de la sociedad y que esta tiene el derecho a la protección del Estado.

Otro factor que considero importante resaltar, es lo referente a la defensa de la soberanía de cada país, el documento reitera que NO EXISTE UN DERECHO INTERNACIONAL AL ABORTO NI RECAE SOBRE LAS NACIONES UNA OBLIGACIÓN INTERNACIONAL DE ACEPTAR O FACILITAR EL ABORTO.

Pocas semanas atrás, una delegación de tres diputados de Guatemala asistió a la conmemoración del primer aniversario de la firma de la Declaración del Consenso de Ginebra, realizada en Washington en el edificio Russel del Senado, en donde participaron delegados de los 35 países firmantes en la que los representantes de cada país reafirmaron su compromiso de respetar y apoyar toda legislación referente al bienestar de la mujer, la familia y la vida y a promover la soberanía de cada país.

Escribiendo esta columna, leí la noticia que el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden; había ordenado retirar a su país de este consenso y recomendaba a otras naciones firmantes a hacer lo mismo, sorprendentemente, luego de esta orden presidencial y durante el mismo acto de la firma del aniversario, Rusia se sumaba a este acuerdo, dando un nuevo impulso a esta iniciativa pro vida, así mismo, líderes del Congreso de Estados Unidos, haciendo caso omiso de la instrucción del Presidente Biden, presentaron una resolución el mismo día dónde daban todo su respaldo a los principios de la declaración.

Para concluir, no me queda más que agregar que en la Constitución de la República de Guatemala, en su Título I, Artículo 1º. Protección a la persona. Se lee: “El Estado de Guatemala se organiza para proteger a la persona y a la familia…”, de igual forma, el Artículo 4.1, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, reza: “Toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley y, en general, a partir del momento de la concepción.  Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente.” Convención en la que Guatemala es signataria, por lo que el país está siendo congruente con su legislación y acuerdos internacionales contraídos. Estoy consciente que la modernidad y la globalización avanzan a un ritmo que en ocasiones deja atrás la legislación y que esta no debe ser estática sino que dinámica, sin embargo, hay principios y valores que deben mantenerse como las bases inviolables de los individuos y entre estos deben estar el respeto a la vida, la defensa de la familia y el respeto al derecho ajeno.