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La migración como el salvavidas de la juventud guatemalteca

Antonio Melgar
05 de noviembre, 2021

En Guatemala, uno esperaría que los jóvenes tuvieran mejores condiciones de vida, sobre todo pensando en que representan a la mayoría y que es lamentable que la mayoría en la actualidad solo piensen en que salir del país es la única opción que les queda, cuando lo normal debería ser que pudieran elegir lo que quieren hacer en su propio hogar, junto a los suyos. 

El primer pensamiento que me viene a la mente en este tema es que es inevitable pensar en los grandes problemas a los que se enfrentan estos jóvenes entre la falta de oportunidades, la pobreza y con esto vienen de la mano la delincuencia y trata de personas.

Por otro lado, no quiero dejar de mencionar lo que atraviesan muchas mujeres jóvenes, que además de lo anterior deben enfrentarse al acoso tanto en sus lugares de estudio, así en el trabajo e incluso en el entorno familiar. 

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Los que se enfrentan los jóvenes siguen sin ser tomados en cuenta y mucho menos se ven soluciones que puedan hacer frente y dejar en los jóvenes un aliciente a seguir soñando en un futuro prometedor en Guatemala.

Lamentablemente la realidad nos hace ver como los jóvenes buscan salir adelante pensando en la migración, que más que el último recurso de vida debería ser una opción, porque el trayecto de manera irregular es peligroso y su costo es elevado. 

Lo que piensan muchos jóvenes depende de su realidad, es decir que cada uno ve su condición de vida, algunos que no son muchos tienen la capacidad de ver su realidad muy distinta a la mayoría y son aquellos quienes piensan en salir del país para poder estudiar con todas las comodidades, y con esto tener una posibilidad mayor para concretar sus sueños de superación personal.

Pero la mayoría de jóvenes no tiene esta realidad, sino que viven al borde la pobreza, y a esto se suma el abandono del Estado, que no logra concretar políticas que permitan la superación de los problemas que agobian a nuestra juventud, que cada vez encuentra más obstáculos para poder salir adelante ante este cumulo de situaciones complejas.

Pero esta realidad en la que se encuentran muchos jóvenes, viene a consolidar una percepción de que la juventud actual busca a cualquier costa escapar de las condiciones de pobreza y condiciones de desventaja que ellos tienen, y es evidente que muchos jóvenes manifiestan su inconformidad con el actuar de los que administran el Estado y claro son conscientes que la administración no deja oportunidades para salir adelante.

Al tener esta consciencia, también son sus solicitudes de mejorar condiciones las que llevan a provocar un contraste entre la alegría que provoca la juventud y por supuesto el desgano que se tiene porque no se ven oportunidades para cumplir los objetivos.

Lo que se necesita ahora son políticas que de verdad estén pensadas en resultados, porque si se siguen pensando en parches, lo que seguiremos observando es el drama de la migración, no como una opción sino un paso obligatorio.

La migración como el salvavidas de la juventud guatemalteca

Antonio Melgar
05 de noviembre, 2021

En Guatemala, uno esperaría que los jóvenes tuvieran mejores condiciones de vida, sobre todo pensando en que representan a la mayoría y que es lamentable que la mayoría en la actualidad solo piensen en que salir del país es la única opción que les queda, cuando lo normal debería ser que pudieran elegir lo que quieren hacer en su propio hogar, junto a los suyos. 

El primer pensamiento que me viene a la mente en este tema es que es inevitable pensar en los grandes problemas a los que se enfrentan estos jóvenes entre la falta de oportunidades, la pobreza y con esto vienen de la mano la delincuencia y trata de personas.

Por otro lado, no quiero dejar de mencionar lo que atraviesan muchas mujeres jóvenes, que además de lo anterior deben enfrentarse al acoso tanto en sus lugares de estudio, así en el trabajo e incluso en el entorno familiar. 

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Lamentablemente la realidad nos hace ver como los jóvenes buscan salir adelante pensando en la migración, que más que el último recurso de vida debería ser una opción, porque el trayecto de manera irregular es peligroso y su costo es elevado. 

Lo que piensan muchos jóvenes depende de su realidad, es decir que cada uno ve su condición de vida, algunos que no son muchos tienen la capacidad de ver su realidad muy distinta a la mayoría y son aquellos quienes piensan en salir del país para poder estudiar con todas las comodidades, y con esto tener una posibilidad mayor para concretar sus sueños de superación personal.

Pero la mayoría de jóvenes no tiene esta realidad, sino que viven al borde la pobreza, y a esto se suma el abandono del Estado, que no logra concretar políticas que permitan la superación de los problemas que agobian a nuestra juventud, que cada vez encuentra más obstáculos para poder salir adelante ante este cumulo de situaciones complejas.

Pero esta realidad en la que se encuentran muchos jóvenes, viene a consolidar una percepción de que la juventud actual busca a cualquier costa escapar de las condiciones de pobreza y condiciones de desventaja que ellos tienen, y es evidente que muchos jóvenes manifiestan su inconformidad con el actuar de los que administran el Estado y claro son conscientes que la administración no deja oportunidades para salir adelante.

Al tener esta consciencia, también son sus solicitudes de mejorar condiciones las que llevan a provocar un contraste entre la alegría que provoca la juventud y por supuesto el desgano que se tiene porque no se ven oportunidades para cumplir los objetivos.

Lo que se necesita ahora son políticas que de verdad estén pensadas en resultados, porque si se siguen pensando en parches, lo que seguiremos observando es el drama de la migración, no como una opción sino un paso obligatorio.