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Conocer nuestra realidad, es también una forma de lucha contra la corrupción

Antonio Melgar
13 de mayo, 2021

Alcanzar un mejor futuro por supuesto que es posible, pero sólo si como ciudadanos somos capaces de incorporar conductas adecuadas para el desarrollo sostenible y para todos. Con lo anterior digo que es lamentable ver cómo seguimos hundidos en la corrupción y cómo las cosas pasan desapercibidas por todos.

En esto me parece que la vida en el país sigue siendo una lucha por sobrevivir en donde las brechas sociales económicas son cada vez más abismales y a veces hasta parece imposible desuperar. 

Es por ello que cuando vemos necesidades básicas sin ser satisfechas por la mayoría, nos frustramos y no entendemos cómo lograr el desarrollo que nos puede llevar a una mejor vida.

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Nuestro país tiene mucha riqueza considerando que tiene dos costas, y la tierra es un recurso natural provisto de lo mejor; sin embargo, no logramos despegar para lograr el desarrollo social que necesitamos y esto, por supuesto que es preocupante y las respuestas sobre cómo solucionarlo cada vez se hacen más complejas.

Creo, sin temor a equivocarme, que la situación que vivimos está amarrada a la corrupción y a que la mayoría de nosotros nos conformamos con lo mínimo y no comprendemos que si en realidad se tuviera una lucha frontal contra las injusticias sociales que vemos a diario, la Guatemala que tendríamos sería diferente.

Al hablar de las causas por las que hemos llegado a este punto, tendremos que retroceder y comprender que no se trata sólo de culpar ideologías, sino más bien pensar a quién o a quiénes les conviene que sigamos en la situación en que nos encontramos.

Esa es una discusión que lleva muchos años y que nos demuestra que, si estamos divididos, es más bien por no conocer las razones de nuestra actual situación y que sólo nos lleva a mantenernos en el mismo punto. 

Debemos analizar y después actuar con claridad y de alguna manera dejar de ser borregos para que hagan con nosotros lo que quieran o que se siga sirviendo para seguir desangrando a nuestra sociedad y el debate debe ser abierto y con claridad más no un ataque que genere violencia que sólo provocaría más caos.

El insistir en la educación es una forma de presionar a aquellos que nos quieren sin conocimiento y desconociendo la realidad que nos rodea, con el fin de conseguir que sus intereses no sean alterados por ninguna razón y que el estatus quo no cambie en ningún momento.

En Washington, creo que entienden claro el mensaje, pues si la corrupción se mantiene la gente sigue migrando, así que, si esto sigue igual, por más que se atraiga inversión y se busque mejorar, el cáncer de quiénes sólo buscan enriquecerse a costa de todos, no hará más que traernos más pobreza, violencia y falta de oportunidades.

Es tiempo de abrir los ojos, de dejar de ser indiferentes y exigir de verdad, que todos se involucren en la misma causa, de lo contrario los dos pasos que dimos ayer para avanzar mañana serán hacia atrás. 

Conocer nuestra realidad, es también una forma de lucha contra la corrupción

Antonio Melgar
13 de mayo, 2021

Alcanzar un mejor futuro por supuesto que es posible, pero sólo si como ciudadanos somos capaces de incorporar conductas adecuadas para el desarrollo sostenible y para todos. Con lo anterior digo que es lamentable ver cómo seguimos hundidos en la corrupción y cómo las cosas pasan desapercibidas por todos.

En esto me parece que la vida en el país sigue siendo una lucha por sobrevivir en donde las brechas sociales económicas son cada vez más abismales y a veces hasta parece imposible desuperar. 

Es por ello que cuando vemos necesidades básicas sin ser satisfechas por la mayoría, nos frustramos y no entendemos cómo lograr el desarrollo que nos puede llevar a una mejor vida.

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Nuestro país tiene mucha riqueza considerando que tiene dos costas, y la tierra es un recurso natural provisto de lo mejor; sin embargo, no logramos despegar para lograr el desarrollo social que necesitamos y esto, por supuesto que es preocupante y las respuestas sobre cómo solucionarlo cada vez se hacen más complejas.

Creo, sin temor a equivocarme, que la situación que vivimos está amarrada a la corrupción y a que la mayoría de nosotros nos conformamos con lo mínimo y no comprendemos que si en realidad se tuviera una lucha frontal contra las injusticias sociales que vemos a diario, la Guatemala que tendríamos sería diferente.

Al hablar de las causas por las que hemos llegado a este punto, tendremos que retroceder y comprender que no se trata sólo de culpar ideologías, sino más bien pensar a quién o a quiénes les conviene que sigamos en la situación en que nos encontramos.

Esa es una discusión que lleva muchos años y que nos demuestra que, si estamos divididos, es más bien por no conocer las razones de nuestra actual situación y que sólo nos lleva a mantenernos en el mismo punto. 

Debemos analizar y después actuar con claridad y de alguna manera dejar de ser borregos para que hagan con nosotros lo que quieran o que se siga sirviendo para seguir desangrando a nuestra sociedad y el debate debe ser abierto y con claridad más no un ataque que genere violencia que sólo provocaría más caos.

El insistir en la educación es una forma de presionar a aquellos que nos quieren sin conocimiento y desconociendo la realidad que nos rodea, con el fin de conseguir que sus intereses no sean alterados por ninguna razón y que el estatus quo no cambie en ningún momento.

En Washington, creo que entienden claro el mensaje, pues si la corrupción se mantiene la gente sigue migrando, así que, si esto sigue igual, por más que se atraiga inversión y se busque mejorar, el cáncer de quiénes sólo buscan enriquecerse a costa de todos, no hará más que traernos más pobreza, violencia y falta de oportunidades.

Es tiempo de abrir los ojos, de dejar de ser indiferentes y exigir de verdad, que todos se involucren en la misma causa, de lo contrario los dos pasos que dimos ayer para avanzar mañana serán hacia atrás.