Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

¿Una Guatemala más próspera? Comercio, para reducir la dependencia de la ayuda internacional

Melanie Müllers
16 de junio, 2021

Estamos convencidos de que el comercio es lo más importante para los países en desarrollo. Los programas de ayuda muchas veces conducen a la dependencia y la pasividad, impiden la creatividad y la responsabilidad de querer salir adelante por sus propios medios. Es fundamental que los países industrializados abran sus fronteras y permitan que los países en desarrollo participen en el crecimiento económico. Guatemala no debe ser vista como un proveedor sencillo y barato de recursos, adicionar valor a  la cadena de  suministros es parte de la garantizar el desarrollo para crear puestos de trabajo cualificados y mejor remunerados.

Un libro de la economista zambiana Dambisa Moyo llamado “Dead Aid” sostiene que la ayuda occidental ha dado lugar a una cultura de dependencia en los países en desarrollo.  Pero la pregunta es: ¿Por qué debería sustituirse la ayuda? Expertos en organizaciones sin fines de lucro, empresarios y grupos de la sociedad civil opinan que los emprendedores, deben ser ayudados no solo a subirse a la bicicleta sino a mantenerse en ella.

La crisis financiera mundial ha aumentado las tendencias proteccionistas entre las potencias del mundo, lo que dificulta el acceso de países en desarrollo a esos mercados. Se estima que en Guatemala, la población menor de 20 años asciende al 55%, la concentración de población en zonas rurales es de las más altas de América Latina y el Caribe, después de Haití. El nivel de escolaridad en Guatemala es sumamente bajo, el Instituto Nacional de Estadística (INE) estima que el promedio es de solo 2.3 años. Incluso menor en los departamentos mayoritariamente indígenas (1.3 años). Las oportunidades de acceso y permanencia en el sistema educativo no se hayan al alcance de la mayoría de la población guatemalteca.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Guatemala debe crear políticas y planes de implementación que permitan un sector privado más competitivo que favorezca el crecimiento empresarial, la creación de empleo y el estímulo de la economía guatemalteca, un mejor clima de inversión y reducción de la corrupción. En especial fomentar con certeza jurídica, inversiones a largo plazo en el sector privado, infraestructura y las industrias manufactureras. En la agricultura, se debe impulsar la seguridad alimentaria para mejorar la situación de salud de la población lo cual reforzará  las oportunidades de empleo necesarias para los jóvenes guatemaltecos e impulsar los incentivos para mejorar la calidad de la educación para contar con una fuerza laboral calificada.

Guatemala puede reforzar su economía con los acuerdos de libre comercio que posee con Estados Unidos, la Unión Europea y otros países centroamericanos.

Guatemala esta bendecida por su ubicación estratégica geográfica, que representa un puente natural entre América del Norte y Sur. Adicionalmente, su ubicación en la zona horaria estándar del este (EST), que es congruente con los centros clave de Estados Unidos, tenemos las mejores condiciones para llevar a cabo actividades comerciales y otras actividades económicas con varios actores clave en el mercado global.

El futuro del régimen comercial guatemalteco depende más de lo que Guatemala negocie y no de lo que Guatemala merece, por lo que debemos buscar activamente el compromiso comercial en primer lugar y en segundo lugar el compromiso comercial (lo menciono dos veces a propósito).  Cualquier potencia mundial protegerá inequívocamente a su propio país primero en el comercio, porque desde tiempos del trueque, el comercio ha creado sociedad, ciudad, cultura.

El comercio es un motor potencial para el desarrollo económico y la reducción de la pobreza, en el mundo existen más de 270 tratados de libre comercio que cubren la mitad del comercio mundial. América Latina y el Caribe participan en más de 70 de estos tratados de comercio. ¡Ánimos Guate!

¿Una Guatemala más próspera? Comercio, para reducir la dependencia de la ayuda internacional

Melanie Müllers
16 de junio, 2021

Estamos convencidos de que el comercio es lo más importante para los países en desarrollo. Los programas de ayuda muchas veces conducen a la dependencia y la pasividad, impiden la creatividad y la responsabilidad de querer salir adelante por sus propios medios. Es fundamental que los países industrializados abran sus fronteras y permitan que los países en desarrollo participen en el crecimiento económico. Guatemala no debe ser vista como un proveedor sencillo y barato de recursos, adicionar valor a  la cadena de  suministros es parte de la garantizar el desarrollo para crear puestos de trabajo cualificados y mejor remunerados.

Un libro de la economista zambiana Dambisa Moyo llamado “Dead Aid” sostiene que la ayuda occidental ha dado lugar a una cultura de dependencia en los países en desarrollo.  Pero la pregunta es: ¿Por qué debería sustituirse la ayuda? Expertos en organizaciones sin fines de lucro, empresarios y grupos de la sociedad civil opinan que los emprendedores, deben ser ayudados no solo a subirse a la bicicleta sino a mantenerse en ella.

La crisis financiera mundial ha aumentado las tendencias proteccionistas entre las potencias del mundo, lo que dificulta el acceso de países en desarrollo a esos mercados. Se estima que en Guatemala, la población menor de 20 años asciende al 55%, la concentración de población en zonas rurales es de las más altas de América Latina y el Caribe, después de Haití. El nivel de escolaridad en Guatemala es sumamente bajo, el Instituto Nacional de Estadística (INE) estima que el promedio es de solo 2.3 años. Incluso menor en los departamentos mayoritariamente indígenas (1.3 años). Las oportunidades de acceso y permanencia en el sistema educativo no se hayan al alcance de la mayoría de la población guatemalteca.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Guatemala debe crear políticas y planes de implementación que permitan un sector privado más competitivo que favorezca el crecimiento empresarial, la creación de empleo y el estímulo de la economía guatemalteca, un mejor clima de inversión y reducción de la corrupción. En especial fomentar con certeza jurídica, inversiones a largo plazo en el sector privado, infraestructura y las industrias manufactureras. En la agricultura, se debe impulsar la seguridad alimentaria para mejorar la situación de salud de la población lo cual reforzará  las oportunidades de empleo necesarias para los jóvenes guatemaltecos e impulsar los incentivos para mejorar la calidad de la educación para contar con una fuerza laboral calificada.

Guatemala puede reforzar su economía con los acuerdos de libre comercio que posee con Estados Unidos, la Unión Europea y otros países centroamericanos.

Guatemala esta bendecida por su ubicación estratégica geográfica, que representa un puente natural entre América del Norte y Sur. Adicionalmente, su ubicación en la zona horaria estándar del este (EST), que es congruente con los centros clave de Estados Unidos, tenemos las mejores condiciones para llevar a cabo actividades comerciales y otras actividades económicas con varios actores clave en el mercado global.

El futuro del régimen comercial guatemalteco depende más de lo que Guatemala negocie y no de lo que Guatemala merece, por lo que debemos buscar activamente el compromiso comercial en primer lugar y en segundo lugar el compromiso comercial (lo menciono dos veces a propósito).  Cualquier potencia mundial protegerá inequívocamente a su propio país primero en el comercio, porque desde tiempos del trueque, el comercio ha creado sociedad, ciudad, cultura.

El comercio es un motor potencial para el desarrollo económico y la reducción de la pobreza, en el mundo existen más de 270 tratados de libre comercio que cubren la mitad del comercio mundial. América Latina y el Caribe participan en más de 70 de estos tratados de comercio. ¡Ánimos Guate!