En la actualidad Guatemala pasa por muchos problemas estructurales que han dado pie a que seamos un país con pocas oportunidades para la gran mayoría de los guatemaltecos. Hay muchos factores que inciden en esos problemas de estructura como la débil educación que recibimos, y posiblemente, éste sea el factor que más afecta a la población.
Los maestros tienen un papel importante en el desarrollo de un país, ya que la educación es el motor de todo pensamiento de desarrollo. Si un país cuenta con los niveles de educación adecuados, es de esperar que sea exitoso y alcance el desarrollo por una simple razón, dado que el pensamiento que fomenta la educación es un pensamiento de progreso y genera bienestar en todos sus ámbitos.
Por eso es que la educación debe ser vista desde una perspectiva trascendental en la que se debe priorizar y sobre todo poner mayor énfasis en que si mejoramos la educación de todas y todos mejoraremos la calidad de vida y con esto estableceremos procesos propicios para llegar a las metas establecidas en el cumplimiento de lograr el desarrollo que necesitamos.
En este punto, quiero destacar cómo los maestros son la esencia de esa educación, y por eso hay que poner mucho énfasis en esos formadores y claro motivar a que la excelencia de esos maestros sea sobre todo inculcada desde la formación de los mismos, y con esto mejorar las condiciones de educación y por lo tanto es necesario que empecemos a ver que la educación sea una construcción de pensamiento analítico y no un proceso mecánico que disminuye la capacidad de ser críticos.
Hacer esencial la educación en un sistema como el nuestro es necesario y por eso pensar en la inversión en educación es el mecanismo mejor hilvanado que producirá una línea directa al desarrollo y con esto mejores niveles de vida para todas y todos.
La prioridad es recordar que la educación debe ser tratada como algo que sí se debe mejorar. El mismo hecho que lo pensemos así, nos lleva a convencernos que sólo con educación podemos solventar todos los demás problemas que nos aquejan, ya que sólo con pensamientos académicos y críticos podemos resolver esos grandes problemas estructurales del país.
Es por ello que el mejor escenario que se puede desarrollar es que tengamos propuestas educativas, en donde se destine la inversión del estado y que en los lugares de nuestra Guatemala profunda encontremos altos niveles de educación y con esto generar niveles de desarrollo óptimo.
Al conmemorar el Día del Maestro, celebro a quienes luchan con las peores condiciones pero con una dedicación que nace de su vocación, porque entregan su vida por sus alumnos y dan lo mejor para mejorar las condiciones de ellos muchas veces con sus propios recursos.
En la actualidad Guatemala pasa por muchos problemas estructurales que han dado pie a que seamos un país con pocas oportunidades para la gran mayoría de los guatemaltecos. Hay muchos factores que inciden en esos problemas de estructura como la débil educación que recibimos, y posiblemente, éste sea el factor que más afecta a la población.
Los maestros tienen un papel importante en el desarrollo de un país, ya que la educación es el motor de todo pensamiento de desarrollo. Si un país cuenta con los niveles de educación adecuados, es de esperar que sea exitoso y alcance el desarrollo por una simple razón, dado que el pensamiento que fomenta la educación es un pensamiento de progreso y genera bienestar en todos sus ámbitos.
Por eso es que la educación debe ser vista desde una perspectiva trascendental en la que se debe priorizar y sobre todo poner mayor énfasis en que si mejoramos la educación de todas y todos mejoraremos la calidad de vida y con esto estableceremos procesos propicios para llegar a las metas establecidas en el cumplimiento de lograr el desarrollo que necesitamos.
En este punto, quiero destacar cómo los maestros son la esencia de esa educación, y por eso hay que poner mucho énfasis en esos formadores y claro motivar a que la excelencia de esos maestros sea sobre todo inculcada desde la formación de los mismos, y con esto mejorar las condiciones de educación y por lo tanto es necesario que empecemos a ver que la educación sea una construcción de pensamiento analítico y no un proceso mecánico que disminuye la capacidad de ser críticos.
Hacer esencial la educación en un sistema como el nuestro es necesario y por eso pensar en la inversión en educación es el mecanismo mejor hilvanado que producirá una línea directa al desarrollo y con esto mejores niveles de vida para todas y todos.
La prioridad es recordar que la educación debe ser tratada como algo que sí se debe mejorar. El mismo hecho que lo pensemos así, nos lleva a convencernos que sólo con educación podemos solventar todos los demás problemas que nos aquejan, ya que sólo con pensamientos académicos y críticos podemos resolver esos grandes problemas estructurales del país.
Es por ello que el mejor escenario que se puede desarrollar es que tengamos propuestas educativas, en donde se destine la inversión del estado y que en los lugares de nuestra Guatemala profunda encontremos altos niveles de educación y con esto generar niveles de desarrollo óptimo.
Al conmemorar el Día del Maestro, celebro a quienes luchan con las peores condiciones pero con una dedicación que nace de su vocación, porque entregan su vida por sus alumnos y dan lo mejor para mejorar las condiciones de ellos muchas veces con sus propios recursos.