A las puertas de un nuevo proceso de elecciones
En año preelectoral vemos muchos compromisos que cumplir políticamente, es evidente que este año no es nada calmado en la sociedad y que solo es preámbulo a lo que se viene.
La sociedad guatemalteca se encuentra en camino a la reactivación de sus actividades más importantes, en medio de nuevas medidas de relajamiento y en año preelectoral encontramos muestras de lo que viviremos en 2023.
De vuelta a esa “normalidad”, entonces vemos de vuelta el tráfico y como los estudiantes volverán a las aulas de manera presencial, además que las reuniones ya se realizan sin distanciamiento y algunos lugares como gimnasios ya de a poco dejan el uso de las mascarillas.
Es un hecho que las consecuencias de la pandemia todavía están presentes, y con eso se agudiza la crisis en las que nos encontramos, en muchos casos esta complejidad nos dejara fuera del espectro del desarrollo y seguiremos encontrando cada vez condiciones de pobreza y extrema pobreza que afectan sin lugar a dudas a los más vulnerables.
Por supuesto no estamos en las mejores condiciones como país, porque poco ha cambiado para bien. En año preelectoral vemos muchos compromisos que cumplir políticamente, es evidente que este año no es nada calmado en la sociedad y que solo es preámbulo a lo que se viene.
Al ver la dinámica del país podemos ver como hay acciones que nos llevan a comprender que este es un momento de gran complejidad que debemos encarar con sabiduría y a reflexionar sobre lo que hemos hecho con nuestro voto en otros años, porque la pandemia nos dejó en muy malas condiciones.
Claro que es un momento complejo y sin lugar a dudas no es desaprovechado por aquellos que empiezan a hacer campaña o como en la ley electoral “proselitismo”, es un poco complejo encontrar esa línea que divide el proselitismo de la propaganda, pero se esta haciendo y nos esta llevando a entrar de a poco a las condiciones y el ambiente electoral al que llegaremos en unos meses.
Esperemos que estas condiciones de país, también hagan reflexionar a los políticos de siempre para que de verdad actúen pensando en quienes menos tienen, porque cada centavo que se queda en las promesas sin cumplir, se traduce en vidas o futuros que se pierden porque la política electoral solo queda en nada, es tiempo que también como ciudadanos ejerzamos nuestros derechos, pero también analicemos todo lo que viene.
La pandemia no se ha ido y la situación del país, tampoco ha mejorado y ante la cercanía de las elecciones no dudo que muchos vendrán a querer aprovecharse, es tiempo de poner atención a lo que se viene, porque sin duda el proceso electoral se encuentra a la vuelta de la esquina.
A las puertas de un nuevo proceso de elecciones
En año preelectoral vemos muchos compromisos que cumplir políticamente, es evidente que este año no es nada calmado en la sociedad y que solo es preámbulo a lo que se viene.
La sociedad guatemalteca se encuentra en camino a la reactivación de sus actividades más importantes, en medio de nuevas medidas de relajamiento y en año preelectoral encontramos muestras de lo que viviremos en 2023.
De vuelta a esa “normalidad”, entonces vemos de vuelta el tráfico y como los estudiantes volverán a las aulas de manera presencial, además que las reuniones ya se realizan sin distanciamiento y algunos lugares como gimnasios ya de a poco dejan el uso de las mascarillas.
Es un hecho que las consecuencias de la pandemia todavía están presentes, y con eso se agudiza la crisis en las que nos encontramos, en muchos casos esta complejidad nos dejara fuera del espectro del desarrollo y seguiremos encontrando cada vez condiciones de pobreza y extrema pobreza que afectan sin lugar a dudas a los más vulnerables.
Por supuesto no estamos en las mejores condiciones como país, porque poco ha cambiado para bien. En año preelectoral vemos muchos compromisos que cumplir políticamente, es evidente que este año no es nada calmado en la sociedad y que solo es preámbulo a lo que se viene.
Al ver la dinámica del país podemos ver como hay acciones que nos llevan a comprender que este es un momento de gran complejidad que debemos encarar con sabiduría y a reflexionar sobre lo que hemos hecho con nuestro voto en otros años, porque la pandemia nos dejó en muy malas condiciones.
Claro que es un momento complejo y sin lugar a dudas no es desaprovechado por aquellos que empiezan a hacer campaña o como en la ley electoral “proselitismo”, es un poco complejo encontrar esa línea que divide el proselitismo de la propaganda, pero se esta haciendo y nos esta llevando a entrar de a poco a las condiciones y el ambiente electoral al que llegaremos en unos meses.
Esperemos que estas condiciones de país, también hagan reflexionar a los políticos de siempre para que de verdad actúen pensando en quienes menos tienen, porque cada centavo que se queda en las promesas sin cumplir, se traduce en vidas o futuros que se pierden porque la política electoral solo queda en nada, es tiempo que también como ciudadanos ejerzamos nuestros derechos, pero también analicemos todo lo que viene.
La pandemia no se ha ido y la situación del país, tampoco ha mejorado y ante la cercanía de las elecciones no dudo que muchos vendrán a querer aprovecharse, es tiempo de poner atención a lo que se viene, porque sin duda el proceso electoral se encuentra a la vuelta de la esquina.