Lanzado como Slava en 1979, el crucero prestó servicio en la Guerra Fría y durante los conflictos en Georgia, Siria y Ucrania, también ayudó a realizar investigaciones científicas en tiempos de paz con los Estados Unidos. La clase Slava, es la designación OTAN para los cruceros de la designación soviética Proyecto 1164 Atlant, un buque de guerra con propulsión convencional, actualmente operado solo por Rusia y Ucrania. 

Su diseño empezó a finales de 1960 para usar el misil P-500 Bazalt/SS-N-12 Sandbox y también como una opción más barata de los cruceros de la clase Kirov. Durante su construcción hubo muchos retrasos con los misiles. Estas naves actuaban como barco insignia de numerosas fuerzas de ataque, todos los barcos fueron construidos en el astillero 61 Kommunar en Nikoláiev, Ucrania.

Desde 15.05.1995 el Slava fue renombrado Moskva por la capital rusa, asignado a la Flota del Mar Negro, hundido durante la invasión rusa de Ucrania. Durante los primeros días de la guerra, la tripulación del Moskva supuestamente alertó a los soldados ucranianos estacionados en la Isla de las Serpientes en el Mar Negro que se rindieran en un enfrentamiento.

El Moskva tenía capacidad para transportar 16 misiles de crucero de largo alcance, y su eliminación reduce la potencia de fuego de Rusia en el Mar Negro. La pérdida del buque de guerra en una invasión que ya se considera un error histórico también fue una derrota simbólica para Moscú, ya que sus tropas se reagrupan para una ofensiva en el este de Ucrania después de retirarse de gran parte del norte.

El ataque de Ucrania al Moskva con misiles, representa el buque de guerra más grande hundido en combate desde la Guerra de las Malvinas de 1982, en la que un crucero de tamaño similar llamado ARA General Belgrano fue torpedeado por un submarino británico, matando a más de 300 marineros a bordo. .

Rusia dijo que las municiones a bordo detonaron como resultado de un “incendio”, sin decir qué causó el incendio. Supuestamente las  principales armas de misiles no sufrieron daños y la tripulación de unos 500, abandonó la embarcación a tiempo, nadie sabe si hubo víctimas.

Dos miles Neptune hundieron al Moskva, son misiles antibuques desarrollados recientemente por Ucrania basados en un diseño soviético anterior (ironías de la vida). Los lanzadores estacionados cerca de la costa pueden alcanzar objetivos a una distancia de hasta 280 kilómetros, eso habría puesto al Moskva dentro del alcance de los ucranianos.  

La pérdida del Moskva probablemente obligará a Moscú a cambiar la forma en que operan sus fuerzas navales en el Mar Negro. El Moskva, volvió al servicio operativo el año pasado después de una importante reparación, desempeñó un papel clave como buque de mando y nodo de defensa aérea.

El hundimiento significa que Rusia ahora ha sufrido daños en dos activos navales clave desde que invadió Ucrania, el primero fue el barco de desembarco ruso de clase Alligator Saratov el 24 de marzo. Es probable que ambos eventos lleven a Rusia a revisar su postura marítima en el Mar Negro.

La realidad con en hundimiento del Moskva, es que tuvieron que elegir entre dos historias: una historia es que solo fue incompetencia y la otra es que fueron atacados, y ninguna de las dos es un resultado particularmente bueno para ellos al final de cuentas.

Rusia invadió el 24 de febrero y ha perdido potencialmente a miles de combatientes. El conflicto ha matado a un número incalculable de civiles ucranianos y ha obligado a millones más a huir. También ha inflado aún más los precios en la canasta básica y el combustible... arrastrando a la economía mundial. El Fondo Monetario Internacional redujo las previsiones económicas en 143 países... adiós Moskva....