Lo que hace el miedo
Pero como en casi todo, el poder y la política son un péndulo que, así como viene, va.
El miedo paraliza a quién se deja vencer por él. Hace a la persona tomar las decisiones erróneas, no ver más allá de lo obvio y lo inmediato. El miedo hace al ser humano víctima o presa de sus propias pasiones. Es por ello que admiramos a los héroes en las películas, en los libros o en la Historia. A esas personas que han logrado superar ese sentimiento tan nefasto, para alcanzar el bien común. Un verdadero líder no tiene miedo. Un verdadero líder mide, pesa y calcula sus movimientos no gobernados por el hígado o el corazón, sino por la razón.
El miedo nos hace tener visión de corto plazo, en vez de permitirnos analizar que un mal menor en el momento puede redundar en un gran beneficio a largo plazo. En la vida, triunfa el que arriesga con lógica, no el que esconde la cabeza en la tierra, ni el que tira la piedra y esconde la mano.
Eso necesitó Singapur para ser lo que hoy es, en menos de 50 años. Un líder que supo tomar las decisiones incómodas, políticamente incorrectas, con valentía. Me pregunto si existe un líder así en Guatemala... Conozco a un par, pero no se meten en política porque saben que, de hacerlo, serían duramente castigados por osar ir contra el sistema imperante.
Ese miedo es la herramienta que utiliza la izquierda en todos los países, incluyendo los Estados Unidos, para manipular masas, derrotar adversarios, comprar piezas claves en el ajedrez político, y obtener sus metas. Es así que amedrentan con retirar visas, único colmillo que tienen realmente para presionar y extorsionar empresarios.
Haber usado la lista Engels contra gente que tiene los recursos monetarios para entablar las demandas en USA por difamación, daños y perjuicios, es un error garrafal. Error especialmente porque las razones que podrían usar para incluir empresarios en la lista son todas espurias, estúpidas y ridículas. Y los burócratas del Departamento de Estado, nido de el Deep State, saben que los Republicanos les tienen el ojo puesto. Saben que, al cambiar el balance en el Congreso, ellos tendrían que responder por sus decisiones y sus acciones con sendas repercusiones legales. Espero que los recién nombrados en la lista que pueden demandar al Departamento de Estado, lo hagan. Ganarían, sin duda.
Lo de las visas funciona, porque todos tienen relaciones comerciales con empresas gringas y por ende, les toca viajar. Pero como en casi todo, el poder y la política son un péndulo que, así como viene, va. Así vemos cómo todos los otros reyes del país (Iván Velásquez, Todd Robinson, Thelma Aldana, Juan Francisco Sandoval, etc) van cayendo uno a uno conforme sale a la luz su podredumbre, sus acciones criminales y tarde o temprano tendrán que afrontar las consecuencias de sus actos. No podrán esconderse en Washington o en un cargo burocrático por siempre.
La lista incluye a Magistrados y al Fiscal de la FECI, por no plegarse a las porquerías que pide y ordena la Embajada y el degenerado criminal Robinson. Les dijeron que se vengarían, y lo están cumpliendo. Pero su lista ya sólo resuena entre las pocas y raquíticas filas de la izquierda, y de ese puñado de gente ignorante y manipulada que aplaude como foca todo lo que hace la Administración Biden. Es evidente que las alimañas del pantano están preocupadas de no lograr su fraude en el 2023 para finalmente como diría Brain (de Pinky and the Brain) "dominar" Guatemala consolidándose en el poder.
En Guatemala lo que urge es que los políticos y las personas en el poder, recuerden que son personas de carne y hueso y no semidioses. Tengan presente que hoy están y mañana ya no. Que no son dueños de sus cargos, que serán responsables durante 20 años de lo que hagan en sus cargos, y que tarde o temprano si abusan o cometen faltas, deberán afrontar las consecuencias de las mismas. Así que tengan visión de poder, bajen de la nube y trabajen por el país y no por sus bolsillos.
Lo que hoy tienen mal habido, tarde o temprano lo van a perder. Y peor aún si se dicen Cristianos de alguna denominación. Rendir cuentas a Dios no será tarea fácil y esa parte no es temporal como este mundo, esa, es eterna. Me pregunto cuántos realmente aferran estos conceptos.
Lo que hace el miedo
Pero como en casi todo, el poder y la política son un péndulo que, así como viene, va.
El miedo paraliza a quién se deja vencer por él. Hace a la persona tomar las decisiones erróneas, no ver más allá de lo obvio y lo inmediato. El miedo hace al ser humano víctima o presa de sus propias pasiones. Es por ello que admiramos a los héroes en las películas, en los libros o en la Historia. A esas personas que han logrado superar ese sentimiento tan nefasto, para alcanzar el bien común. Un verdadero líder no tiene miedo. Un verdadero líder mide, pesa y calcula sus movimientos no gobernados por el hígado o el corazón, sino por la razón.
El miedo nos hace tener visión de corto plazo, en vez de permitirnos analizar que un mal menor en el momento puede redundar en un gran beneficio a largo plazo. En la vida, triunfa el que arriesga con lógica, no el que esconde la cabeza en la tierra, ni el que tira la piedra y esconde la mano.
Eso necesitó Singapur para ser lo que hoy es, en menos de 50 años. Un líder que supo tomar las decisiones incómodas, políticamente incorrectas, con valentía. Me pregunto si existe un líder así en Guatemala... Conozco a un par, pero no se meten en política porque saben que, de hacerlo, serían duramente castigados por osar ir contra el sistema imperante.
Ese miedo es la herramienta que utiliza la izquierda en todos los países, incluyendo los Estados Unidos, para manipular masas, derrotar adversarios, comprar piezas claves en el ajedrez político, y obtener sus metas. Es así que amedrentan con retirar visas, único colmillo que tienen realmente para presionar y extorsionar empresarios.
Haber usado la lista Engels contra gente que tiene los recursos monetarios para entablar las demandas en USA por difamación, daños y perjuicios, es un error garrafal. Error especialmente porque las razones que podrían usar para incluir empresarios en la lista son todas espurias, estúpidas y ridículas. Y los burócratas del Departamento de Estado, nido de el Deep State, saben que los Republicanos les tienen el ojo puesto. Saben que, al cambiar el balance en el Congreso, ellos tendrían que responder por sus decisiones y sus acciones con sendas repercusiones legales. Espero que los recién nombrados en la lista que pueden demandar al Departamento de Estado, lo hagan. Ganarían, sin duda.
Lo de las visas funciona, porque todos tienen relaciones comerciales con empresas gringas y por ende, les toca viajar. Pero como en casi todo, el poder y la política son un péndulo que, así como viene, va. Así vemos cómo todos los otros reyes del país (Iván Velásquez, Todd Robinson, Thelma Aldana, Juan Francisco Sandoval, etc) van cayendo uno a uno conforme sale a la luz su podredumbre, sus acciones criminales y tarde o temprano tendrán que afrontar las consecuencias de sus actos. No podrán esconderse en Washington o en un cargo burocrático por siempre.
La lista incluye a Magistrados y al Fiscal de la FECI, por no plegarse a las porquerías que pide y ordena la Embajada y el degenerado criminal Robinson. Les dijeron que se vengarían, y lo están cumpliendo. Pero su lista ya sólo resuena entre las pocas y raquíticas filas de la izquierda, y de ese puñado de gente ignorante y manipulada que aplaude como foca todo lo que hace la Administración Biden. Es evidente que las alimañas del pantano están preocupadas de no lograr su fraude en el 2023 para finalmente como diría Brain (de Pinky and the Brain) "dominar" Guatemala consolidándose en el poder.
En Guatemala lo que urge es que los políticos y las personas en el poder, recuerden que son personas de carne y hueso y no semidioses. Tengan presente que hoy están y mañana ya no. Que no son dueños de sus cargos, que serán responsables durante 20 años de lo que hagan en sus cargos, y que tarde o temprano si abusan o cometen faltas, deberán afrontar las consecuencias de las mismas. Así que tengan visión de poder, bajen de la nube y trabajen por el país y no por sus bolsillos.
Lo que hoy tienen mal habido, tarde o temprano lo van a perder. Y peor aún si se dicen Cristianos de alguna denominación. Rendir cuentas a Dios no será tarea fácil y esa parte no es temporal como este mundo, esa, es eterna. Me pregunto cuántos realmente aferran estos conceptos.