Un entrenador de voleibol japonés aparece dándole 13 bofetadas en 16 segundos a un joven en un vídeo difundido por internet cuya autenticidad ha sido confirmada y que perjudica la imagen de Japón tras la designación de Tokio para organizar los Juegos Olímpicos de 2020.
‘Conmigo no se bromea, chico, ¿eh? ¿Entiendes? ¡Eres estúpido!’, grita el profesor, mientras abofetea al estudiante de secundaria, que permanece inmóvil con la manos en la espalda.
El establecimiento confirmó que las imágenes difundidas por YouTube eran auténticas y que el profesor había golpeado a otro estudiante el mismo día.
Varios casos de violencia vinculada con el deporte en Japón han salido a la luz recientemente.
El pasado 13 de septiembre se supo que el japonés Shohei Ono, campeón del mundo de judo (-73 kg) en Río de Janeiro a finales de agosto, había sido suspendido por su universidad por haber golpeado a otro judoka.
El presidente de la Federación Japonesa de Judo, Haruki Uemura, se vio obligado a dimitir a finales de julio tras una serie de escándalos, incluyendo actos violentos de los entrenadores hacia los judokas.
En enero el equipo de judo femenino de Japón para los Juegos Olímpicos de Londres-2012 denunció a su entrenador por golpear a las judokas con una espada de bambú.
Un entrenador de voleibol japonés aparece dándole 13 bofetadas en 16 segundos a un joven en un vídeo difundido por internet cuya autenticidad ha sido confirmada y que perjudica la imagen de Japón tras la designación de Tokio para organizar los Juegos Olímpicos de 2020.
‘Conmigo no se bromea, chico, ¿eh? ¿Entiendes? ¡Eres estúpido!’, grita el profesor, mientras abofetea al estudiante de secundaria, que permanece inmóvil con la manos en la espalda.
El establecimiento confirmó que las imágenes difundidas por YouTube eran auténticas y que el profesor había golpeado a otro estudiante el mismo día.
Varios casos de violencia vinculada con el deporte en Japón han salido a la luz recientemente.
El pasado 13 de septiembre se supo que el japonés Shohei Ono, campeón del mundo de judo (-73 kg) en Río de Janeiro a finales de agosto, había sido suspendido por su universidad por haber golpeado a otro judoka.
El presidente de la Federación Japonesa de Judo, Haruki Uemura, se vio obligado a dimitir a finales de julio tras una serie de escándalos, incluyendo actos violentos de los entrenadores hacia los judokas.
En enero el equipo de judo femenino de Japón para los Juegos Olímpicos de Londres-2012 denunció a su entrenador por golpear a las judokas con una espada de bambú.