Un grupo de manifestantes se enfrentó y lanzó piedras a la policía este martes en una protesta contra la Copa del Mundo en la ciudad de Fortaleza (noreste de Brasil), y fueron repelidos con gases lacrimógenos, balas de goma y carros lanza agua.

Los enfrentamientos estallaron cuando cerca de 300 personas se pronunciaban en contra de los gastos públicos destinados a la Copa del Mundo, poco antes de que Brasil jugara contra México en el estadio Castelao de Fortaleza (empate 0-0).

Los manifestantes bloquearon una vía que conduce al estadio e impidieron brevemente la llegada de aficionados, reportó el portal de noticias G1. Según una información de prensa, la policía arrestó a 30 personas.

Algunos de quienes se manifestaban llevaban máscaras y prendas negras, que usualmente los identifica como miembros de la agrupación anarquista Black Bloc, sindicados como los más violentos en las protestas antiCopa que han afectado Brasil en el último año.

Recientes manifestaciones han tenido mucho menos convocatoria que en el 2013, cuando un millón de personas inundaron las calles durante la Copa Confederaciones, que fue un test para el Mundial, demandando mejoras en salud, educación y transporte.

‘Creo que con la Policía y el Ejército en la calle el movimiento se intimidó’, dijo a la AFP Edelvina Costa, una manifestante de 53 años.

La protesta fue disuelta antes de que comience el juego, que terminó 0 -0.

Activistas también realizaron pequeñas protestas pequeñas en ciudades anfitrionas de la Copa Mundial como Río de Janeiro y Belo Horizonte.

En Río, los periodistas superaban en número a los manifestantes. Eran 30 personas vigiladas por alrededor de 250 policías.

En Belo Horizonte, cerca de 200 se manifestaron, pero la protesta fue disuelta sin reportes de violencia.