Pasó una semana más y el Gobierno de Otto Pérez no logró que se aprobara la colocación de Bonos del Tesoro por Q4 mil millones que solicitó. Tampoco se ha logrado que se le dé dictamen favorable al Proyecto de Presupuesto de ingresos y egresos 2015 para que pueda pasar a la discusión y posible aprobación en el Pleno del Congreso de la República.
Dorval Carías, ministro de Finanzas, dijo a los medios que las restricciones presupuestarias y de caja continuarán en las entidades de Gobierno debido a esta situación. Reiteró que mientras continúe seguirán utilizando los ingresos tributarios que se captan a diario para atender las prioridades de pago de nómina, pago del situado constitucional y pago de deuda.
Para hacer ver la gravedad de la crisis de presupuesto, para muchos exagerada por las mismas autoridades, se llegó extremos la semana pasada. Por ejemplo, se cumplió una orden de la Policía Nacional Civil (PNC) que indicaba que los reos serían trasladados a las diligencias judiciales en transporte público si no había combustible para las autopatrullas. Esto provocó la protesta de usuarios y de la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH).
Pero la presión también ha venido de otros frentes. En una reunión con los jefes de bloques del Legislativo la Asamblea Nacional del Magisterio exigió la aprobación de bonos por Q4 mil millones y el presupuesto del 2015, con un techo de Q15 mil millones para Educación.
El panorama podría complicarse porque al salir de la reunión, luego de que los diputados de oposición les reiteraran su negativa a avalar más deuda, representantes del magisterio manifestaron a los medios que daban una semana a los congresistas para que aprueben sus peticiones. Por esa razón, esta semana podrían verse movilizaciones masivas de maestros.
Pero el problema no se detiene allí. El Gobierno central señaló que además de los problemas de presupuesto de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), el Ministerio Público (MP) y el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), a partir de hoy a las municipalidades también podría recortársele la asignación si no se aprueban los bonos. Esto podría provocar que la Asociación Nacional de Municipalidades (ANAM) también convoque a manifestaciones en estos días.
Crisis en salud solucionada a medias
La semana pasada una comisión oficial encabezada por la vicepresidenta Roxana Baldetti y Dorval Carías, así como por el ministro de Salud, Luis Monterroso, acordó pagar este mes a los proveedores de Salud Q100 millones de los Q557 millones de la deuda, con el objetivo de que se reanude el abastecimiento de fármacos e insumos en los centros asistenciales del país. Los funcionarios dijeron que los recursos se obtendrán del ahorro de algunas dependencias.
Según informó la Gremial de Productos Farmacéuticos, los pagos se harían el 21 y 28 de noviembre y las autoridades se comprometieron a cancelar el total del resto en los primeros meses del 2015.
En cuanto a los pagos atrasados de salarios, Monterroso pidió comprensión y calma a los trabajadores de Salud que amenazan con paralizar servicios. Aseguró que es cuestión de liquidez de Finanzas para hacer el pago de Q107 millones, los cuales abonarán a la deuda de Q161 millones a 10, 847 empleados.
Supuesta austeridad
Paralelo a poner en evidencia la falta de recursos, el presidente Pérez asegura que prohibió los gastos superfluos en el Estado y reiteró que la falta de recursos es responsabilidad del Congreso por no aprobar los bonos. Con menos énfasis reconoció que la crisis también se debe a la baja recaudación.
A pesar de la supuesta austeridad anunciada, trascendió que en septiembre y octubre la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia contrató distintos medios de comunicación televisivos por un monto mayor a Q30 millones para transmitir la publicidad gubernamental.
Para justificarse, el ahora exsecretario de Comunicación Social de la Presidencia, Francisco Cuevas, dijo que dichas contrataciones no se han pagado aunque los mensajes presidenciales ya fueron transmitidos. Señalan que debido al crédito que les otorgan los medios de comunicación dicho pago se hará hasta el otro año.
Analistas como Manfredo Marroquín, de Acción Ciudadana, critican que el Gobierno haga recortes en los servicios que debe prestar a la población, pero que no detenga la pauta publicitaría. La cual consideran, además, engañosa por que tratar de ocultar la realidad.
Otro dato criticado fue el contrato de Q500 mil en adquisición de cupones canjeables por combustible diésel y gasolina a nivel nacional, adjudicado para vehículos de la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia.
Rechazo de bonos y presupuesto
Sin importar el escenario de crisis que ha desatado el Gobierno, en el Congreso el intento de aprobar los bonos fracasó y el presupuesto ni siquiera tiene dictamen favorable ni ha entrado en discusión en el Pleno. El plazo para aprobarlo vence el 30 de noviembre, de lo contrario, seguirá vigente el actual que data del 2013.
Como respuesta a esto, Carías dijo que esta semana acudirán a la “emisión pequeña de letras de tesorería” cuyo monto dependerá de la demanda de las instituciones para el final del mes.
Hugo Maúl, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), cuestiona que el Gobierno impulse este tipo de medidas paliativas para financiar el presupuesto y asegura que ha sido imprudente en el gasto público. Califica de extorsión condicionar el pago de servicios básicos como salud y medicina, a la aprobación de la deuda.
En cuanto al presupuesto, las principales bancadas del Congreso la semana pasada manifestaron su intención de que se bajara la suma solicitada para el 2015 que asciende de Q71.8 mil millones. Por su parte, la bancada del Partido Patriota (PP) está dispuesta a negociar que los montos tanto de los bonos como del presupuesto bajen, con el fin de que sean finalmente aprobados y así detener la crisis.
Ya hay propuestas concretas de dónde se pueden hacer los recortes. A congresistas como Nineth Montenegro, jefa de Encuentro por Guatemala (EG), le preocupan que más de Q5 mil millones establecidos en el proyecto podrían utilizarse de manera clientelar para impulsar la campaña política del PP, como el bono seguro, varios subsidios e implementos deportivos.
Carlos Barreda, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), considera que se pueden hacer recortes en el programa de fertilizantes con Q178 millones asignados, también en el del Triángulo de la Dignidad y de expatrulleros de Autodefensa Civil, que figura en el de Agua y Bosques para la Concordia con Q100 millones, así como en varias Secretarías.
Otro punto en el que coinciden los bloques es que se deben establecer restricciones en los desembolsos y préstamos, así como que los gastos en los Ministerios de Salud, Educación y Gobernación no pueden reducirse, transferirse o modificarse.
Baja recaudación
En medio de toda esta compleja situación se dio a conocer que la brecha fiscal (lo que no se ha recaudado y estaba proyectado) pasó de Q1,350.3 millones a Q2,102.3 millones. Se había previsto que este año se recaudaría unos Q51,500.7 millones; sin embargo, la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) ha reconocido que los ingresos llegarían sólo a los Q49 mil millones.
Al reunirse con la Cámara de Industria de Guatemala (CIG) el titular de la SAT, Carlos Muñoz, dijo que la evasión fiscal “es el gran cáncer de la recaudación”.
A pesar del poco éxito de la recaudación de este año, Finanzas ha propuesto una meta de recaudación para el 2015 de Q52,430.8 millones. Según Ricardo Barrientos, analista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), esta meta es mayor que la anterior basándose en que la recaudación está creciendo en entre un 5% y un 6% anual.
Javier Zepeda, director ejecutivo de la CIG, mostró su preocupación por la baja recaudación pero advirtió que “el sistema de pago de impuestos en Guatemala lo único que hace es ahuyentar a los contribuyentes, por lo que se debe hacer un sistema más amigable”. Además, añadió que se debe ampliar la base tributaria, pero no persiguiendo a los informales sino dándoles incentivos para que se vuelvan formales.
Pasó una semana más y el Gobierno de Otto Pérez no logró que se aprobara la colocación de Bonos del Tesoro por Q4 mil millones que solicitó. Tampoco se ha logrado que se le dé dictamen favorable al Proyecto de Presupuesto de ingresos y egresos 2015 para que pueda pasar a la discusión y posible aprobación en el Pleno del Congreso de la República.
Dorval Carías, ministro de Finanzas, dijo a los medios que las restricciones presupuestarias y de caja continuarán en las entidades de Gobierno debido a esta situación. Reiteró que mientras continúe seguirán utilizando los ingresos tributarios que se captan a diario para atender las prioridades de pago de nómina, pago del situado constitucional y pago de deuda.
Para hacer ver la gravedad de la crisis de presupuesto, para muchos exagerada por las mismas autoridades, se llegó extremos la semana pasada. Por ejemplo, se cumplió una orden de la Policía Nacional Civil (PNC) que indicaba que los reos serían trasladados a las diligencias judiciales en transporte público si no había combustible para las autopatrullas. Esto provocó la protesta de usuarios y de la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH).
Pero la presión también ha venido de otros frentes. En una reunión con los jefes de bloques del Legislativo la Asamblea Nacional del Magisterio exigió la aprobación de bonos por Q4 mil millones y el presupuesto del 2015, con un techo de Q15 mil millones para Educación.
El panorama podría complicarse porque al salir de la reunión, luego de que los diputados de oposición les reiteraran su negativa a avalar más deuda, representantes del magisterio manifestaron a los medios que daban una semana a los congresistas para que aprueben sus peticiones. Por esa razón, esta semana podrían verse movilizaciones masivas de maestros.
Pero el problema no se detiene allí. El Gobierno central señaló que además de los problemas de presupuesto de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), el Ministerio Público (MP) y el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), a partir de hoy a las municipalidades también podría recortársele la asignación si no se aprueban los bonos. Esto podría provocar que la Asociación Nacional de Municipalidades (ANAM) también convoque a manifestaciones en estos días.
Crisis en salud solucionada a medias
La semana pasada una comisión oficial encabezada por la vicepresidenta Roxana Baldetti y Dorval Carías, así como por el ministro de Salud, Luis Monterroso, acordó pagar este mes a los proveedores de Salud Q100 millones de los Q557 millones de la deuda, con el objetivo de que se reanude el abastecimiento de fármacos e insumos en los centros asistenciales del país. Los funcionarios dijeron que los recursos se obtendrán del ahorro de algunas dependencias.
Según informó la Gremial de Productos Farmacéuticos, los pagos se harían el 21 y 28 de noviembre y las autoridades se comprometieron a cancelar el total del resto en los primeros meses del 2015.
En cuanto a los pagos atrasados de salarios, Monterroso pidió comprensión y calma a los trabajadores de Salud que amenazan con paralizar servicios. Aseguró que es cuestión de liquidez de Finanzas para hacer el pago de Q107 millones, los cuales abonarán a la deuda de Q161 millones a 10, 847 empleados.
Supuesta austeridad
Paralelo a poner en evidencia la falta de recursos, el presidente Pérez asegura que prohibió los gastos superfluos en el Estado y reiteró que la falta de recursos es responsabilidad del Congreso por no aprobar los bonos. Con menos énfasis reconoció que la crisis también se debe a la baja recaudación.
A pesar de la supuesta austeridad anunciada, trascendió que en septiembre y octubre la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia contrató distintos medios de comunicación televisivos por un monto mayor a Q30 millones para transmitir la publicidad gubernamental.
Para justificarse, el ahora exsecretario de Comunicación Social de la Presidencia, Francisco Cuevas, dijo que dichas contrataciones no se han pagado aunque los mensajes presidenciales ya fueron transmitidos. Señalan que debido al crédito que les otorgan los medios de comunicación dicho pago se hará hasta el otro año.
Analistas como Manfredo Marroquín, de Acción Ciudadana, critican que el Gobierno haga recortes en los servicios que debe prestar a la población, pero que no detenga la pauta publicitaría. La cual consideran, además, engañosa por que tratar de ocultar la realidad.
Otro dato criticado fue el contrato de Q500 mil en adquisición de cupones canjeables por combustible diésel y gasolina a nivel nacional, adjudicado para vehículos de la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia.
Rechazo de bonos y presupuesto
Sin importar el escenario de crisis que ha desatado el Gobierno, en el Congreso el intento de aprobar los bonos fracasó y el presupuesto ni siquiera tiene dictamen favorable ni ha entrado en discusión en el Pleno. El plazo para aprobarlo vence el 30 de noviembre, de lo contrario, seguirá vigente el actual que data del 2013.
Como respuesta a esto, Carías dijo que esta semana acudirán a la “emisión pequeña de letras de tesorería” cuyo monto dependerá de la demanda de las instituciones para el final del mes.
Hugo Maúl, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), cuestiona que el Gobierno impulse este tipo de medidas paliativas para financiar el presupuesto y asegura que ha sido imprudente en el gasto público. Califica de extorsión condicionar el pago de servicios básicos como salud y medicina, a la aprobación de la deuda.
En cuanto al presupuesto, las principales bancadas del Congreso la semana pasada manifestaron su intención de que se bajara la suma solicitada para el 2015 que asciende de Q71.8 mil millones. Por su parte, la bancada del Partido Patriota (PP) está dispuesta a negociar que los montos tanto de los bonos como del presupuesto bajen, con el fin de que sean finalmente aprobados y así detener la crisis.
Ya hay propuestas concretas de dónde se pueden hacer los recortes. A congresistas como Nineth Montenegro, jefa de Encuentro por Guatemala (EG), le preocupan que más de Q5 mil millones establecidos en el proyecto podrían utilizarse de manera clientelar para impulsar la campaña política del PP, como el bono seguro, varios subsidios e implementos deportivos.
Carlos Barreda, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), considera que se pueden hacer recortes en el programa de fertilizantes con Q178 millones asignados, también en el del Triángulo de la Dignidad y de expatrulleros de Autodefensa Civil, que figura en el de Agua y Bosques para la Concordia con Q100 millones, así como en varias Secretarías.
Otro punto en el que coinciden los bloques es que se deben establecer restricciones en los desembolsos y préstamos, así como que los gastos en los Ministerios de Salud, Educación y Gobernación no pueden reducirse, transferirse o modificarse.
Baja recaudación
En medio de toda esta compleja situación se dio a conocer que la brecha fiscal (lo que no se ha recaudado y estaba proyectado) pasó de Q1,350.3 millones a Q2,102.3 millones. Se había previsto que este año se recaudaría unos Q51,500.7 millones; sin embargo, la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) ha reconocido que los ingresos llegarían sólo a los Q49 mil millones.
Al reunirse con la Cámara de Industria de Guatemala (CIG) el titular de la SAT, Carlos Muñoz, dijo que la evasión fiscal “es el gran cáncer de la recaudación”.
A pesar del poco éxito de la recaudación de este año, Finanzas ha propuesto una meta de recaudación para el 2015 de Q52,430.8 millones. Según Ricardo Barrientos, analista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), esta meta es mayor que la anterior basándose en que la recaudación está creciendo en entre un 5% y un 6% anual.
Javier Zepeda, director ejecutivo de la CIG, mostró su preocupación por la baja recaudación pero advirtió que “el sistema de pago de impuestos en Guatemala lo único que hace es ahuyentar a los contribuyentes, por lo que se debe hacer un sistema más amigable”. Además, añadió que se debe ampliar la base tributaria, pero no persiguiendo a los informales sino dándoles incentivos para que se vuelvan formales.