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Las empresas más exitosas

Invitado
21 de julio, 2021

Con mucha frecuencia observamos con admiración a empresarios que han sido muy exitosos y solemos preguntarnos ¿cuál habrá sido la clave de su éxito? En ese momento muchas personas con diferentes formaciones profesionales comienzan a elucubrar sobre lo que fue la razón del éxito de Steve Jobs, Elon Musk, Jeff Bezos y personajes como ellos.

La respuesta para esos casos lejanos a nuestra geografía suele ser un misterio más. Sin embargo, cuando analizamos historias de éxito muy cercanas de nuestro país-región centroamericana, recibimos información más certera. Y en todas estas historias hay dos aspectos constantes:

Una PROPUESTA DE VALOR realmente innovadora-efectiva y un empresario que convirtió su empresa en su IKIGAI.

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Sin analizar historias particulares explicaré lo que es una PROPUESTA DE VALOR y lo que significa IKIGAI, para que como empresarios nos ocupemos en tener una gran propuesta de valor y convertir nuestra propia empresa en nuestro IKIGAI. Estos dos aspectos nos darán una verdadera oportunidad de triunfar en nuestros mercados.

La propuesta de valor es un enunciado que convierte la misión de la empresa en la solución a una necesidad (histórica o nueva) de nuestros clientes. No se basa en atributos físicos del servicio o del producto, sino más bien en aspectos psicológicos y subjetivos, que dan al cliente satisfacción y certeza en su decisión de compra. 

La propuesta de valor es un elemento tan vital que una empresa que no tiene una versión actualizada, corre el riesgo de desaparecer. La propuesta de valor debe ser revisada por lo menos una vez al año y en mercadeo y contextos tecnológicos, por lo menos 2 veces al año, ya que el ritmo de cambio en estas industrias es mucho más rápido.

La propuesta de valor debe lograr a través de los atributos físicos y de servicio, satisfacer necesidades-aspectos psicológicos “en la mente” del cliente.

Por ello es vital comprender que el concepto de valor es completamente subjetivo. Una persona puede ver muy alto valor en un producto mientras que otra lo ve completamente carente de valor. De aquí la importancia de la investigación y segmentación de mercados y lo que en inglés se llama Customer Insigths.

Una persona puede buscar alimentos teniendo como criterio de valor “máxima nutrición al menor costo”. Mientras que otra puede buscar satisfacer “máxima creatividad y exquisitez, sin importar el costo”.

Un soltero de 45 años puede buscar un auto otorgándole el máximo valor a una apariencia juvenil, deportiva y ostentosa sin importar el precio, mientras que una madre o padre de familia comprará buscando satisfacer máxima seguridad y espacio-funcionalidad a un precio a su alcance. Y finalmente un empresario transportista compra buscando máxima capacidad cúbica y confiabilidad en carreteras.

Una metodología muy difundida para redactar su propuesta de valor fue diseñada por Tim Brown y se llama Design Thinking. Nuestro próximo artículo describirá la secuencia de pasos y bondades de esta metodología.

A manera de ejemplo les comparto la propuesta de valor de mi empresa: llevar tu empresa al siguiente nivel de crecimiento será la experiencia más gratificante de tu vida.

El otro aspecto de vital importancia que explicaremos en este artículo es el IKIGAI. Este bello concepto nace en Japón y se refiere a el punto en el cual se intersectan 1) aquello que tú eres capaz de hacer con gran maestría 2) con gran pasión 3) con mucho amor y 4) que la gente valora a tal punto que pagaría por tenerlo.

Un empresario que convierte su empresa en su IKIGAI convierte la misión de su empresa en la misión de su vida. Es capaz de cumplir su propuesta de valor con gran maestría y excelencia, compasión absoluta y un amor por el trabajo que le provee energías interminables.

Los empresarios con IKIGAI son altamente competitivos porque el desgaste y la desmotivación son mínimos y cada día generan energías y fuerzas para continuar al día siguiente sin arrastrar desgaste.

Otro aspecto de tremenda importancia para los empresarios con IKIGAI es que viven enamorados, no de sus propios productos y servicios sino de la necesidad del cliente y la forma de satisfacerlos.

Esto es crítico importancia pues cuando está enfocado y enamorado de un problema uno puede cambiar y mejorar sus productos y servicios sin ningún apego mi resistencia al cambio. Ello porque el foco central de sus esfuerzos no es el producto o el servicio sino el cliente y su necesidad.

Próximamente tendremos un taller en el cual enseñaremos cómo encontrar su IKIGAI y validar si uno está en la empresa y la idea correcta. O si debe cambiarla para hacer uno de estos empresarios con ilimitadas energías pasión y amor por su trabajo. 

Fernando Valdez, consultor con 25 años de experiencia en Arquitectura Empresarial, Gestión del Conocimiento Empresarial, Transformación Digital y Franquiciamiento y Gestión de Inversiones.



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Las empresas más exitosas

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21 de julio, 2021

Con mucha frecuencia observamos con admiración a empresarios que han sido muy exitosos y solemos preguntarnos ¿cuál habrá sido la clave de su éxito? En ese momento muchas personas con diferentes formaciones profesionales comienzan a elucubrar sobre lo que fue la razón del éxito de Steve Jobs, Elon Musk, Jeff Bezos y personajes como ellos.

La respuesta para esos casos lejanos a nuestra geografía suele ser un misterio más. Sin embargo, cuando analizamos historias de éxito muy cercanas de nuestro país-región centroamericana, recibimos información más certera. Y en todas estas historias hay dos aspectos constantes:

Una PROPUESTA DE VALOR realmente innovadora-efectiva y un empresario que convirtió su empresa en su IKIGAI.

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Sin analizar historias particulares explicaré lo que es una PROPUESTA DE VALOR y lo que significa IKIGAI, para que como empresarios nos ocupemos en tener una gran propuesta de valor y convertir nuestra propia empresa en nuestro IKIGAI. Estos dos aspectos nos darán una verdadera oportunidad de triunfar en nuestros mercados.

La propuesta de valor es un enunciado que convierte la misión de la empresa en la solución a una necesidad (histórica o nueva) de nuestros clientes. No se basa en atributos físicos del servicio o del producto, sino más bien en aspectos psicológicos y subjetivos, que dan al cliente satisfacción y certeza en su decisión de compra. 

La propuesta de valor es un elemento tan vital que una empresa que no tiene una versión actualizada, corre el riesgo de desaparecer. La propuesta de valor debe ser revisada por lo menos una vez al año y en mercadeo y contextos tecnológicos, por lo menos 2 veces al año, ya que el ritmo de cambio en estas industrias es mucho más rápido.

La propuesta de valor debe lograr a través de los atributos físicos y de servicio, satisfacer necesidades-aspectos psicológicos “en la mente” del cliente.

Por ello es vital comprender que el concepto de valor es completamente subjetivo. Una persona puede ver muy alto valor en un producto mientras que otra lo ve completamente carente de valor. De aquí la importancia de la investigación y segmentación de mercados y lo que en inglés se llama Customer Insigths.

Una persona puede buscar alimentos teniendo como criterio de valor “máxima nutrición al menor costo”. Mientras que otra puede buscar satisfacer “máxima creatividad y exquisitez, sin importar el costo”.

Un soltero de 45 años puede buscar un auto otorgándole el máximo valor a una apariencia juvenil, deportiva y ostentosa sin importar el precio, mientras que una madre o padre de familia comprará buscando satisfacer máxima seguridad y espacio-funcionalidad a un precio a su alcance. Y finalmente un empresario transportista compra buscando máxima capacidad cúbica y confiabilidad en carreteras.

Una metodología muy difundida para redactar su propuesta de valor fue diseñada por Tim Brown y se llama Design Thinking. Nuestro próximo artículo describirá la secuencia de pasos y bondades de esta metodología.

A manera de ejemplo les comparto la propuesta de valor de mi empresa: llevar tu empresa al siguiente nivel de crecimiento será la experiencia más gratificante de tu vida.

El otro aspecto de vital importancia que explicaremos en este artículo es el IKIGAI. Este bello concepto nace en Japón y se refiere a el punto en el cual se intersectan 1) aquello que tú eres capaz de hacer con gran maestría 2) con gran pasión 3) con mucho amor y 4) que la gente valora a tal punto que pagaría por tenerlo.

Un empresario que convierte su empresa en su IKIGAI convierte la misión de su empresa en la misión de su vida. Es capaz de cumplir su propuesta de valor con gran maestría y excelencia, compasión absoluta y un amor por el trabajo que le provee energías interminables.

Los empresarios con IKIGAI son altamente competitivos porque el desgaste y la desmotivación son mínimos y cada día generan energías y fuerzas para continuar al día siguiente sin arrastrar desgaste.

Otro aspecto de tremenda importancia para los empresarios con IKIGAI es que viven enamorados, no de sus propios productos y servicios sino de la necesidad del cliente y la forma de satisfacerlos.

Esto es crítico importancia pues cuando está enfocado y enamorado de un problema uno puede cambiar y mejorar sus productos y servicios sin ningún apego mi resistencia al cambio. Ello porque el foco central de sus esfuerzos no es el producto o el servicio sino el cliente y su necesidad.

Próximamente tendremos un taller en el cual enseñaremos cómo encontrar su IKIGAI y validar si uno está en la empresa y la idea correcta. O si debe cambiarla para hacer uno de estos empresarios con ilimitadas energías pasión y amor por su trabajo. 

Fernando Valdez, consultor con 25 años de experiencia en Arquitectura Empresarial, Gestión del Conocimiento Empresarial, Transformación Digital y Franquiciamiento y Gestión de Inversiones.