“Primero Dios” es la frase que más repite Ana María Canel durante su entrevista con Naranja Media para el documental “La Tierra de las Flores. Y es que su amor por las flores es una cuestión de fe. Todo empezó con su papá que trabajó un impresionante jardín dentro del terreno de su casa.  Pero Justo Canel falleció hace 7 años cuando tenía 73.  Lejos de rendirse y dejarse llevar por el dolor, Ana María se puso al frente del negocio junto a su madre y su hermana.

“Él está contento porque su jardín sigue en pie gracias a nosotras. Nos dio un buen ejemplo y nos sigue bendiciendo. Las flores para nosotros son un privilegio. Me lo imagino caminando entre las flores”, comenta Ana María emocionada.

Todos los días, estas mujeres arrancan su jornada a las 4.30 am de la mañana. Cuida, riegan y cortan sus flores: rosas, girasoles y crisantemos. Las preparan para venderlas en el mercado de San Juan Sactepéquez.

Pero ahora, esta familia de mujeres trabajadoras estás a punto de dar el paso definitivo para conseguir el sueño que nació con su papá. Han creado una cooperativa con otros 36 productores y ta tienen muchos compradores llamando. A la espera de cerrar trámites y permisos, “primero Dios”, piensan que sus flores se estarán vendiendo en noviembre en EEUU.

“Hay que saber ganar y hay que saber perder. Sigamos luchando para tener un buen fruto y que nuestro sueño se cumpla”, afirma Ana María tras secarse el sudor de la fuerte.

La inspiradora historia de Ana María Canel forma parte del documental producido por NaranjaMedia para República, “Viaje a la Tierra de la Flores” que puede verse en Youtube.