Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

¿Se puede aplicar la medicina natural para curar peces?

Redacción República
25 de julio, 2014
Al igual que la homeopatía, que busca darle una mejor calidad de vida a los humanos y tratar sus enfermedades, Josué Rodolfo García Pérez y Carolina Marroquín trabajan en la utilización de extractos de plantas, frutos y cortezas como romero, orégano, pimienta negra, clavo y canela para tratar las infecciones que padecen los peces que son cultivados en granjas. Ambos son investigadores del Centro de Estudios del Mar y Acuicultura (CEMA) de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC).
‘Este estudio es el primero de este tipo que se realiza en Guatemala”, explica García Pérez, investigador principal. Indica que el objetivo es curar a peces como la tilapia, con una forma alternativa y natural, cuando éstos presenten algún padecimiento. Asimismo, los investigadores están utilizando tres tipos de probióticos con el mismo objetivo. 
En China e India este tipo de estudios ya brindaron resultados, logrando que la tilapia cultivada mantengan la salud sin efectos secundarios en el pez ni el ambiente por ser un tratamiento medicinal completamente natural.
La investigación es respaldada por la Dirección General de Investigación (DIGI) y el CEMA, entidades que muestran interés de replicar este método en todas las granjas pequeñas o grandes del país porque saben del beneficio que se obtiene con el ambiente, los peces y los criaderos, por ser un método natural y orgánico.
El estudio esta enfocado netamente a esta variedad de pez, ya que es un animal de alto consumo en la población y fácil producción. Se  estima que la tilapia crece en tres meses logrando tener un cuerpo con suficiente carne para el consumo. 

Tratamiento orgánico 

  
En el caso de Guatemala, la investigación utiliza estas cinco plantas endémicas, ya que otros tipo de estudios han confirmado que sus propiedad son altamente bactericidas, logrando erradicar las infecciones. García explicó que utilizar este sistema medicinal es un plus porque los peces reciben medicina sin químicos, siendo una gran alternativa natural y orgánica.
Al finalizar el estudio, se espera utilizarlo en todas las granjas criadoras, ya que sería una forma de promover alimentos sanos que no tuvieron contacto con medicina química, logrando mantener la calidad de los productos. 
Asimismo, se da la certeza a los consumidores que comerán un filete sano, así como lo consumen en China e India, que usan este sistema de cura natural en los peces. Ahora se expandió a tratar enfermedades infecciosas en el camarón, mostrando una gran efectividad. 

El reto: combatir seis tipos de infecciones 

El grupo de investigadores compuesto por García y Marroquín, previo a realizar todo el conjunto de pruebas, recolectaron muestras de bacterias en los departamentos de Petén, Escuintla, Suchitepéquez y Zacapa, lugares que tienen las granjas de producción piscícolas más grandes. Las bacterias fueron encubadas en forma in vitro, para que se desarrollaran y multiplicaran, seguidamente se inició la prueba de inoculación de los extractos de las plantas para conocer como iban evolucionando y combatiendo la enfermedad.

Hasta la fecha se continúa en el proceso de monitoreo de las bacterias, ya que se han realizado varias pruebas, con el objetivo de tipificar y conocer su patología antes y después de utilizar los extractos vegetales. Los resultados finales se espera tenerlos en octubre. Se prevé que con los extractos se logre combatir aproximadamente seis tipos de infecciones.
Para extraer la esencia de los productos se utiliza un componente llamado etanol 70, una especie de solvente que al mezclarse y realizar varios procesos saca los atributos del clavo, canela, orégano, romero y pimienta negra. Dichos componentes pueden tener la consistencia seca (tipo polvo), acuosa o en algunos casos chiclosa. Al tener los extractos, son mezclados en los alimentos para que coman los peces, que después empiezan a hacer efecto en las enfermedades (ello cuando alguno presente síntomas de enfermedad).

Crecimiento de la producción piscícola 


La producción de tilapia se instaló por medio de programas que impulsó el Gobierno de Taiwán en Guatemala, siendo el objetivo minimizar el hambre en el interior de la república. Se escogió a la tilapia debido a que es un pez fuerte, de rápido crecimiento y reproducción. 
La población guatemalteca ha variado el consumo de carne de pescado y agregó la tilapia, que ya se produce en el país. El costo de un alevin o cría oscila entre 70 y 80 centavos y, cuando tienen un peso optimo, la libra de carne llega a costar entre los Q 11 y Q16. En la actualidad, Guatemala produce aproximadamente unas 17 mil 700 toneladas métricas de tilapia y camarón, que se refleja en ventas de US$88.3 millones al año, según el Fondo para la Alimentación (FAO).

¿Se puede aplicar la medicina natural para curar peces?

Redacción República
25 de julio, 2014
Al igual que la homeopatía, que busca darle una mejor calidad de vida a los humanos y tratar sus enfermedades, Josué Rodolfo García Pérez y Carolina Marroquín trabajan en la utilización de extractos de plantas, frutos y cortezas como romero, orégano, pimienta negra, clavo y canela para tratar las infecciones que padecen los peces que son cultivados en granjas. Ambos son investigadores del Centro de Estudios del Mar y Acuicultura (CEMA) de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC).
‘Este estudio es el primero de este tipo que se realiza en Guatemala”, explica García Pérez, investigador principal. Indica que el objetivo es curar a peces como la tilapia, con una forma alternativa y natural, cuando éstos presenten algún padecimiento. Asimismo, los investigadores están utilizando tres tipos de probióticos con el mismo objetivo. 
En China e India este tipo de estudios ya brindaron resultados, logrando que la tilapia cultivada mantengan la salud sin efectos secundarios en el pez ni el ambiente por ser un tratamiento medicinal completamente natural.
La investigación es respaldada por la Dirección General de Investigación (DIGI) y el CEMA, entidades que muestran interés de replicar este método en todas las granjas pequeñas o grandes del país porque saben del beneficio que se obtiene con el ambiente, los peces y los criaderos, por ser un método natural y orgánico.
El estudio esta enfocado netamente a esta variedad de pez, ya que es un animal de alto consumo en la población y fácil producción. Se  estima que la tilapia crece en tres meses logrando tener un cuerpo con suficiente carne para el consumo. 

Tratamiento orgánico 

  
En el caso de Guatemala, la investigación utiliza estas cinco plantas endémicas, ya que otros tipo de estudios han confirmado que sus propiedad son altamente bactericidas, logrando erradicar las infecciones. García explicó que utilizar este sistema medicinal es un plus porque los peces reciben medicina sin químicos, siendo una gran alternativa natural y orgánica.
Al finalizar el estudio, se espera utilizarlo en todas las granjas criadoras, ya que sería una forma de promover alimentos sanos que no tuvieron contacto con medicina química, logrando mantener la calidad de los productos. 
Asimismo, se da la certeza a los consumidores que comerán un filete sano, así como lo consumen en China e India, que usan este sistema de cura natural en los peces. Ahora se expandió a tratar enfermedades infecciosas en el camarón, mostrando una gran efectividad. 

El reto: combatir seis tipos de infecciones 

El grupo de investigadores compuesto por García y Marroquín, previo a realizar todo el conjunto de pruebas, recolectaron muestras de bacterias en los departamentos de Petén, Escuintla, Suchitepéquez y Zacapa, lugares que tienen las granjas de producción piscícolas más grandes. Las bacterias fueron encubadas en forma in vitro, para que se desarrollaran y multiplicaran, seguidamente se inició la prueba de inoculación de los extractos de las plantas para conocer como iban evolucionando y combatiendo la enfermedad.

Hasta la fecha se continúa en el proceso de monitoreo de las bacterias, ya que se han realizado varias pruebas, con el objetivo de tipificar y conocer su patología antes y después de utilizar los extractos vegetales. Los resultados finales se espera tenerlos en octubre. Se prevé que con los extractos se logre combatir aproximadamente seis tipos de infecciones.
Para extraer la esencia de los productos se utiliza un componente llamado etanol 70, una especie de solvente que al mezclarse y realizar varios procesos saca los atributos del clavo, canela, orégano, romero y pimienta negra. Dichos componentes pueden tener la consistencia seca (tipo polvo), acuosa o en algunos casos chiclosa. Al tener los extractos, son mezclados en los alimentos para que coman los peces, que después empiezan a hacer efecto en las enfermedades (ello cuando alguno presente síntomas de enfermedad).

Crecimiento de la producción piscícola 


La producción de tilapia se instaló por medio de programas que impulsó el Gobierno de Taiwán en Guatemala, siendo el objetivo minimizar el hambre en el interior de la república. Se escogió a la tilapia debido a que es un pez fuerte, de rápido crecimiento y reproducción. 
La población guatemalteca ha variado el consumo de carne de pescado y agregó la tilapia, que ya se produce en el país. El costo de un alevin o cría oscila entre 70 y 80 centavos y, cuando tienen un peso optimo, la libra de carne llega a costar entre los Q 11 y Q16. En la actualidad, Guatemala produce aproximadamente unas 17 mil 700 toneladas métricas de tilapia y camarón, que se refleja en ventas de US$88.3 millones al año, según el Fondo para la Alimentación (FAO).