Los señalamientos de corrupción del Gobierno del Partido Patriota (PP) no solo afectaron las finanzas públicas en todos los niveles, sino que marcaron la salud de miles de niños guatemaltecos que no completaron su esquema de vacunas porque el dinero destinado para ese programa, se transfirió para atender el Pacto Hambre Cero, que ahora se sabe, entregó maíz y frijol que ni siquiera era apto para ser consumido por animales.
En el caso de las vacunas, los menores están expuestos a contraer enfermedades que marcarán su vida, en tanto que haber consumido granos en mal estado, puede causar cáncer en el largo plazo, según expertos consultados.
El Pacto Hambre Cero entregó 1 millón 500 mil cupones a los afectados por la ´prolongada sequía en Huehuetenango y Sololá en 2014. Cada cupón significó un quintal de maíz, 30 libras de frijol y azúcar para las familias de esos departamentos, luego de que el Ministerio de Agricultura y la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan), determinaran la necesidad de dar alimentos en estos lugares.
En la imagen aparecen Roxana Baldetti y el exministro de Agricultura, Elmer López, vinculado al caso El Bodegón, que señala al exfuncionario y diez personas más por ingresar maíz y frijol de contrabando, granos no aptos para el consumo humano, pero que fueron entregados a famiilas pobres en el marco del Pacto Hambre Cero.
El supuesto propósito era apoyar a los más pobres, pero en realidad fue un programa dañino para salud de las personas. ¿Y cuántas serían las víctimas? Se desconoce, pero si esos 1.5 millones de cupones se habrían repartido a igual número de familias con un promedio de cinco personas por hogar, unos 7.5 millones habrían consumido maiz y frijol contaminado, productos comprados en México sin pagar impuestos porque ingresaron como contrabando.
Este es un caso más de la supuesta corrupción del gobierno del Partido Patriota, destapado por el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), bautizado como “El Bodegón”.
Qué dicen los expertos en salud
A criterio de la doctora e investigadora Olga Torres, quien tiene un máster en microbiología molecular, el consumo de estos granos tendrá consecuencias cancerígenas a largo plazo, pues está comprobado que comer maíz en mal estado, causa cáncer.
Según la experta, el frijol no se consume tanto como el maiz procesado a tortilla, ya que al combinarlos la cantidad de aflatoxinas (sustancias altamente cancerígenas) es baja, pero dadas las condiciones de pobreza del campo, las familias consumen en grandes cantidades tortillas de maíz.
Agrega que consumir granos en mal estado tiene efectos inmediatos en el desarrolo de los niños y las graves consecuencias a largo plazo.
El exministro de Agricultura, Elmer López, está acusado del delito de incumplimiento de deberes en el caso El Bodegón.
Gabriela Beltetón, quien es nutrióloga clínica, comenta que ese maíz nunca debió llegar a las mesas de nadie, pues solo sirve para producir biodisel.
Según Torres, no almacenar de manera adecuada el maíz, genera los hongos que afectan la salud.
Se agravó la pobreza
Torres y Beltetón expresan que la tortilla debe ser un acompañamiento de la comida principal, pero la pobreza obliga a muchos mantener una dieta solo de tortilla, y para complicar, la corrupción terminó de agravar la salud de la población de escasos recursos económicos.
Torres enfatiza que estas políticas públicas deben blindarse contra la corrupción para asegurar que sí se beneficará a los necesitados y no los hará más pobres.
Y mientras los sindicados en el caso El Bodegón fueron favorecidos con medidas sustitutivas, nunca se sabrá el daño físico que hicieron a una generación de niños de Huehuetenango y Sololá.
Mejorar los procesos para evitar la corrupción
Para Luis Linares de la Asociación de Investigación en Estudios Sociales la corrupción causó un doble daño que dejó a los hospitales sin vacunas y la compra de granos en mal estado.
Agregó que se deben mejorar los mecanismos de compra sean competitivos porque hoy no se puede comprar nada por las ley de contrataciones y ahora están intentan hacer compras con montos elevados para hacer compras directas y es donde están los negocios “turbios”.
Los señalamientos de corrupción del Gobierno del Partido Patriota (PP) no solo afectaron las finanzas públicas en todos los niveles, sino que marcaron la salud de miles de niños guatemaltecos que no completaron su esquema de vacunas porque el dinero destinado para ese programa, se transfirió para atender el Pacto Hambre Cero, que ahora se sabe, entregó maíz y frijol que ni siquiera era apto para ser consumido por animales.
En el caso de las vacunas, los menores están expuestos a contraer enfermedades que marcarán su vida, en tanto que haber consumido granos en mal estado, puede causar cáncer en el largo plazo, según expertos consultados.
El Pacto Hambre Cero entregó 1 millón 500 mil cupones a los afectados por la ´prolongada sequía en Huehuetenango y Sololá en 2014. Cada cupón significó un quintal de maíz, 30 libras de frijol y azúcar para las familias de esos departamentos, luego de que el Ministerio de Agricultura y la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan), determinaran la necesidad de dar alimentos en estos lugares.
En la imagen aparecen Roxana Baldetti y el exministro de Agricultura, Elmer López, vinculado al caso El Bodegón, que señala al exfuncionario y diez personas más por ingresar maíz y frijol de contrabando, granos no aptos para el consumo humano, pero que fueron entregados a famiilas pobres en el marco del Pacto Hambre Cero.
El supuesto propósito era apoyar a los más pobres, pero en realidad fue un programa dañino para salud de las personas. ¿Y cuántas serían las víctimas? Se desconoce, pero si esos 1.5 millones de cupones se habrían repartido a igual número de familias con un promedio de cinco personas por hogar, unos 7.5 millones habrían consumido maiz y frijol contaminado, productos comprados en México sin pagar impuestos porque ingresaron como contrabando.
Este es un caso más de la supuesta corrupción del gobierno del Partido Patriota, destapado por el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), bautizado como “El Bodegón”.
Qué dicen los expertos en salud
A criterio de la doctora e investigadora Olga Torres, quien tiene un máster en microbiología molecular, el consumo de estos granos tendrá consecuencias cancerígenas a largo plazo, pues está comprobado que comer maíz en mal estado, causa cáncer.
Según la experta, el frijol no se consume tanto como el maiz procesado a tortilla, ya que al combinarlos la cantidad de aflatoxinas (sustancias altamente cancerígenas) es baja, pero dadas las condiciones de pobreza del campo, las familias consumen en grandes cantidades tortillas de maíz.
Agrega que consumir granos en mal estado tiene efectos inmediatos en el desarrolo de los niños y las graves consecuencias a largo plazo.
El exministro de Agricultura, Elmer López, está acusado del delito de incumplimiento de deberes en el caso El Bodegón.
Gabriela Beltetón, quien es nutrióloga clínica, comenta que ese maíz nunca debió llegar a las mesas de nadie, pues solo sirve para producir biodisel.
Según Torres, no almacenar de manera adecuada el maíz, genera los hongos que afectan la salud.
Se agravó la pobreza
Torres y Beltetón expresan que la tortilla debe ser un acompañamiento de la comida principal, pero la pobreza obliga a muchos mantener una dieta solo de tortilla, y para complicar, la corrupción terminó de agravar la salud de la población de escasos recursos económicos.
Torres enfatiza que estas políticas públicas deben blindarse contra la corrupción para asegurar que sí se beneficará a los necesitados y no los hará más pobres.
Y mientras los sindicados en el caso El Bodegón fueron favorecidos con medidas sustitutivas, nunca se sabrá el daño físico que hicieron a una generación de niños de Huehuetenango y Sololá.
Mejorar los procesos para evitar la corrupción
Para Luis Linares de la Asociación de Investigación en Estudios Sociales la corrupción causó un doble daño que dejó a los hospitales sin vacunas y la compra de granos en mal estado.
Agregó que se deben mejorar los mecanismos de compra sean competitivos porque hoy no se puede comprar nada por las ley de contrataciones y ahora están intentan hacer compras con montos elevados para hacer compras directas y es donde están los negocios “turbios”.