Este semana la Patrulla Fronteriza de EE. UU. rescató a un adolescente de Guatemala, quien estuvo cerca de morir en el desierto.
El guatemalteco ingresó a ese país de manera irregular por alguno de los puntos no controlados por la Patrulla Fronteriza (CBP, en inglés).
El adolescente de 17 años fue rescatado por la Guardia Nacional de Arizona y el CBP. Estaba solo y en el peligro en el desierto, informaron.
Para localizar al menor utilizaron un helicóptero y sobrevolaron varios kilómetros del desierto de Arizona, en respuesta a una llamada de emergencia al 911.
“El joven ingresó ilegalmente a los Estados Unidos antes de sucumbir a los efectos del duro ambiente desértico de Arizona. Un técnico médico de la Patrulla Fronteriza administró fluidos intravenosos al menor no acompañado que sufría de agotamiento por calor severo y deshidratación”, informó el CBP.
El guatemalteco fue trasladado a la estación de la Patrulla Fronteriza en Tucson, donde comenzaron el procesamiento legal.
“Las acciones rápidas y el servicio dedicado tanto del personal de la Guardia Nacional como de los agentes de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. Se acreditan con salvarle la vida”, comunicaron las autoridades.
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Peligros del desierto
Las condiciones climáticas en el desierto son cambiantes y las personas se enfrentan a constantes cambios de temperatura.
Los niños son los más afectados por su vulnerabilidad a este tipo de condiciones, que van de calores sofocantes a fríos extremos.
“Los agentes de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. combaten contrabando de organizaciones que intentan transportar ilegalmente personas y contrabando a través de las fronteras de la nación”, afirmó la CBP.
En los últimos meses fue público el plan de Donald Trump de separar a los niños de sus padres en la frontera sur, también conocido como “tolerancia cero”.
Con esa medida, al menos unos 465 menores de Guatemala fueron separados de sus familiares en la frontera, y otros cinco mil llegaron como no acompañados.
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El adolescente de 17 años fue rescatado por la Guardia Nacional de Arizona y el CBP. Estaba solo y en el peligro en el desierto, informaron.
Para localizar al menor utilizaron un helicóptero y sobrevolaron varios kilómetros del desierto de Arizona, en respuesta a una llamada de emergencia al 911.
“El joven ingresó ilegalmente a los Estados Unidos antes de sucumbir a los efectos del duro ambiente desértico de Arizona. Un técnico médico de la Patrulla Fronteriza administró fluidos intravenosos al menor no acompañado que sufría de agotamiento por calor severo y deshidratación”, informó el CBP.
El guatemalteco fue trasladado a la estación de la Patrulla Fronteriza en Tucson, donde comenzaron el procesamiento legal.
“Las acciones rápidas y el servicio dedicado tanto del personal de la Guardia Nacional como de los agentes de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. Se acreditan con salvarle la vida”, comunicaron las autoridades.
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