Guatemala podría sufrir una nueva catástrofe con la llegada de la tormenta Iota a territorio centroamericano. El fenómeno tropical que podría convertirse en huracán en las próximas horas, afectará al país a partir de la otra semana.
El Insivumeh anticipa que con los suelos aún cargados e inundados por la depresión tropical Eta, existe el riesgo de que más lluvia aumente los daños.
“Se prevé que la lluvia incremente de manera gradual y debido a que los suelos continúan saturados, se recomienda precaución”, indican las autoridades.
“No se descarta lahares en la cadena volcánica, crecidas repentinas de ríos, inundaciones, deslizamientos de tierra o problemas en la red vial del país”, subraya el Insivumeh.
Hasta las 18:00 horas del viernes 13 de noviembre, Iota se encontraba a 950 kilómetros al este de Nicaragua. En esa distancia “aún no tendremos su influencia sobre Guatemala hasta la siguiente semana“, informó la entidad por medio de un boletín.
Suelo saturado y llega Iota
Centroamérica, con suelos saturados de agua luego del fenómeno climático Eta, teme vientos ciclónicos y abundante lluvia a partir del domingo 15 de noviembre.
Las heridas de Eta no han cicatrizado y ahora se anuncia otro fenómeno de consecuencias inciertas. Eta dejó en la región al menos 130 muertos, 119 desaparecidos y destrucción,
Este nuevo fenómeno, que puede convertirse en un huracán mayor cuando se aproxime a Nicaragua y Honduras, se presenta cuando en Centroamérica todavía busca desaparecidos por la lluvia causada por Eta.
En Guatemala algunos poblados siguen aislados por la destrucción de caminos rurales, sobre todo en Izabal y Alta Verapaz.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés), indicó que Iota se moverá por el centro del Mar Caribe durante los dos próximos días. A Nicaragua y el noreste de Honduras llegará entre la tarde del domingo y el lunes.
La tormenta podría convertirse en un huracán mayor en la escala de Saffir-Simpson (se considera así a los que tienen de categoría 3 para arriba).
Hasta el próximo miércoles se espera que produzca lluvia en el norte de Colombia, Panamá y Costa Rica, Jamaica y el sur de Haití.
Alerta en la fŕagil Centroamérica
Centroamérica, con unos 50 millones de habitantes, es un territorio con costas en el Atlántico y el Pacífico, cuenta con volcanes y montañas en cuyas laderas se levantan comunidades pobres, urbanas y rurales. Ello la hace una de las regiones más vulnerables del mundo a los desastres naturales.
Eta llegó al istmo el 3 de noviembre como un poderoso huracán que tocó tierra en una zona poco poblada del norte de Nicaragua.
En ese país dejó una gran destrucción, para luego degradarse a depresión tropical y entrar así en Honduras un día después.
El Gobierno de Nicaragua informó este viernes de que vigila “de cerca” al nuevo fenómeno climático formado en el Caribe. Esta nueva tormenta podría impactar en la misma zona que lo hizo Eta dejando miles de damnificados.
En estas regiones aún no se han levantado las 1 mil 890 casas destruidas ni otras 8 mil 30 con daños parciales.
Honduras mantiene la alerta máxima decretada por Eta, que dejó al menos 62 muertos, ocho desaparecidos, más de 2 millones de personas afectadas. Además de destrucción de infraestructura y de cultivos, según los datos oficiales.
El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández,convocó de emergencia a una reunión al Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) para coordinar “acciones preventivas de inmediato”.
Aunque Eta llegó solo a Nicaragua y Honduras, su influencia afectó a todo el istmo. Se repite en los países la imagen de infraestructura y sembradíos destruidos y comunidades rurales arrasadas por inundaciones y deslaves.
El daño en Guatemala
En Guatemala se contabilizan 46 muertos, al menos 96 desaparecidos, más de 100.000 personas evacuadas y desolación en poblados del norte del país.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), informó que el nuevo fenómeno climático puede tener una trayectoria similar a Eta.
Ello podría favorecer el incremento de lluvia en las zonas del norte del país afectadas por Eta.
En Panamá, las muertes se elevaron a 19 con el hallazgo en las últimas horas de dos nuevos cuerpos. Hay doce desaparecidos y fueron destruidos caminos productivos y fincas en el norte del país, donde siguen en albergues más de 2.500 personas.
El Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), de Panamá, declaró un alerta de prevención hasta el 15 de noviembre para siete de las 10 provincias del país y la comarca de Guna Yala, las mismas zonas azotadas por lluvias asociadas a Eta.
En Costa Rica, que registra dos muertes y 300 personas albergadas por las lluvias de los días pasados, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) inició preparación ante los efectos que podría causar el nuevo fenómeno que se encuentra en el Caribe.
En El Salvador se registró un fallecido y más de 2.200 personas fueron llevadas a albergues por las lluvias de Eta.
Con información de EFE
Guatemala podría sufrir una nueva catástrofe con la llegada de la tormenta Iota a territorio centroamericano. El fenómeno tropical que podría convertirse en huracán en las próximas horas, afectará al país a partir de la otra semana.
El Insivumeh anticipa que con los suelos aún cargados e inundados por la depresión tropical Eta, existe el riesgo de que más lluvia aumente los daños.
“Se prevé que la lluvia incremente de manera gradual y debido a que los suelos continúan saturados, se recomienda precaución”, indican las autoridades.
“No se descarta lahares en la cadena volcánica, crecidas repentinas de ríos, inundaciones, deslizamientos de tierra o problemas en la red vial del país”, subraya el Insivumeh.
Hasta las 18:00 horas del viernes 13 de noviembre, Iota se encontraba a 950 kilómetros al este de Nicaragua. En esa distancia “aún no tendremos su influencia sobre Guatemala hasta la siguiente semana“, informó la entidad por medio de un boletín.
Suelo saturado y llega Iota
Centroamérica, con suelos saturados de agua luego del fenómeno climático Eta, teme vientos ciclónicos y abundante lluvia a partir del domingo 15 de noviembre.
Las heridas de Eta no han cicatrizado y ahora se anuncia otro fenómeno de consecuencias inciertas. Eta dejó en la región al menos 130 muertos, 119 desaparecidos y destrucción,
Este nuevo fenómeno, que puede convertirse en un huracán mayor cuando se aproxime a Nicaragua y Honduras, se presenta cuando en Centroamérica todavía busca desaparecidos por la lluvia causada por Eta.
En Guatemala algunos poblados siguen aislados por la destrucción de caminos rurales, sobre todo en Izabal y Alta Verapaz.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés), indicó que Iota se moverá por el centro del Mar Caribe durante los dos próximos días. A Nicaragua y el noreste de Honduras llegará entre la tarde del domingo y el lunes.
La tormenta podría convertirse en un huracán mayor en la escala de Saffir-Simpson (se considera así a los que tienen de categoría 3 para arriba).
Hasta el próximo miércoles se espera que produzca lluvia en el norte de Colombia, Panamá y Costa Rica, Jamaica y el sur de Haití.
Alerta en la fŕagil Centroamérica
Centroamérica, con unos 50 millones de habitantes, es un territorio con costas en el Atlántico y el Pacífico, cuenta con volcanes y montañas en cuyas laderas se levantan comunidades pobres, urbanas y rurales. Ello la hace una de las regiones más vulnerables del mundo a los desastres naturales.
Eta llegó al istmo el 3 de noviembre como un poderoso huracán que tocó tierra en una zona poco poblada del norte de Nicaragua.
En ese país dejó una gran destrucción, para luego degradarse a depresión tropical y entrar así en Honduras un día después.
El Gobierno de Nicaragua informó este viernes de que vigila “de cerca” al nuevo fenómeno climático formado en el Caribe. Esta nueva tormenta podría impactar en la misma zona que lo hizo Eta dejando miles de damnificados.
En estas regiones aún no se han levantado las 1 mil 890 casas destruidas ni otras 8 mil 30 con daños parciales.
Honduras mantiene la alerta máxima decretada por Eta, que dejó al menos 62 muertos, ocho desaparecidos, más de 2 millones de personas afectadas. Además de destrucción de infraestructura y de cultivos, según los datos oficiales.
El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández,convocó de emergencia a una reunión al Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) para coordinar “acciones preventivas de inmediato”.
Aunque Eta llegó solo a Nicaragua y Honduras, su influencia afectó a todo el istmo. Se repite en los países la imagen de infraestructura y sembradíos destruidos y comunidades rurales arrasadas por inundaciones y deslaves.
El daño en Guatemala
En Guatemala se contabilizan 46 muertos, al menos 96 desaparecidos, más de 100.000 personas evacuadas y desolación en poblados del norte del país.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), informó que el nuevo fenómeno climático puede tener una trayectoria similar a Eta.
Ello podría favorecer el incremento de lluvia en las zonas del norte del país afectadas por Eta.
En Panamá, las muertes se elevaron a 19 con el hallazgo en las últimas horas de dos nuevos cuerpos. Hay doce desaparecidos y fueron destruidos caminos productivos y fincas en el norte del país, donde siguen en albergues más de 2.500 personas.
El Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), de Panamá, declaró un alerta de prevención hasta el 15 de noviembre para siete de las 10 provincias del país y la comarca de Guna Yala, las mismas zonas azotadas por lluvias asociadas a Eta.
En Costa Rica, que registra dos muertes y 300 personas albergadas por las lluvias de los días pasados, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) inició preparación ante los efectos que podría causar el nuevo fenómeno que se encuentra en el Caribe.
En El Salvador se registró un fallecido y más de 2.200 personas fueron llevadas a albergues por las lluvias de Eta.
Con información de EFE