La misión Artemis I lleva un pedacito de Guatemala a la órbita de la Luna
Guatemala participa en la misión no tripulada Artemis I que despegó en la madrugada del miércoles 16 de noviembre.
Tras varios meses de espera, por fin la NASA vio el despegue hacia la Luna de la misión no tripulada Artemis I donde Guatemala tiene participación. El evento estaba programado para el lunes 29 de agosto, pero se retrasó y hasta este miércoles inició su recorrido.
Esta misión servirá para probar las capacidades del cohete SLS, el más potente construido hasta la fecha y con casi 100 metros de altura, y de la cápsula Orion en el que será un viaje hasta la Luna de ida y vuelta de 42 días de duración y durante el cual se habrán habrá cubierto 2,1 millones de km.
La misión ha cobrado relevancia en el país, pues dos piezas elaboradas por guatemaltecos se colocaron en un hardware que despegará a bordo de Artemis I.
"Estas piezas manufacturadas en Guatemala son una parte fundamental de PLASM, el hardware especial desarrollado en BioServe Space Technologies que hará posible un experimento biológico seleccionado por el departamento de Ciencias Biológicas y Físicas (BPS, por sus siglas en inglés) de la NASA", detalla un comunicado publicado por la agencia espacial.
El proyecto, llamado Genómica de la radiación en el espacio profundo (DSRG, por sus siglas en inglés) estudiará el efecto de la radiación espacial sobre microorganismos. Es uno de los cuatro experimentos biológicos que harán el viaje de ida y vuelta a la órbita de la Luna.
El experimento DSGR es liderado por el ingeniero y científico originario de Guatemala Luis Zea, quien hasta hace poco se desempeñó como jefe de implementación e investigador principal en proyectos de BioServe Space Technologies, en la Universidad de Colorado Boulder. Algunos de sus experimentos son financiados por la NASA; unos están basados en la Tierra, otros, en órbita terrestre a bordo de la Estación Espacial Internacional, detalló el documento.
El doctor Zea ha sido el nexo con el equipo de la Universidad del Valle de Guatemala (en donde él mismo estudió), compuesto por dos profesores de ingeniería mecánica y cinco estudiantes, según un texto de la NASA.
Como Artemis I no es una misión tripulada y el experimento tiene que ponerse en marcha una vez que Orion pase la magnetosfera de la Tierra, PLASM depende de sensores que “avisarán” cuándo activar el experimento.
El lanzamiento
La propia agencia se encargó de compartir el video en vivo en su página web y en NASA TV.
La transmisión ocurrió en las primeras horas del miércoles y con el seguimiento de miles de aficionados y expertos cuando se cargó el propulsor superfrío en el cohete SLS.
La NASA realizó una sesión informativa y, posteriormente, compartirá las primeras vistas de la Tierra desde las cámaras a bordo de la nave espacial Orion.
Además, las cámaras que se encuentran en el interior y en el exterior de Orion mostrarán imágenes y videos a lo largo de la misión, donde se incluirán vistas en vivo del experimento Callisto.
Se trata de un proyecto que capturará una secuencia de un maniquí llamado Comandante Moonikin Campos sentado en el asiento del comandante.
La misión Artemis I lleva un pedacito de Guatemala a la órbita de la Luna
Guatemala participa en la misión no tripulada Artemis I que despegó en la madrugada del miércoles 16 de noviembre.
Tras varios meses de espera, por fin la NASA vio el despegue hacia la Luna de la misión no tripulada Artemis I donde Guatemala tiene participación. El evento estaba programado para el lunes 29 de agosto, pero se retrasó y hasta este miércoles inició su recorrido.
Esta misión servirá para probar las capacidades del cohete SLS, el más potente construido hasta la fecha y con casi 100 metros de altura, y de la cápsula Orion en el que será un viaje hasta la Luna de ida y vuelta de 42 días de duración y durante el cual se habrán habrá cubierto 2,1 millones de km.
La misión ha cobrado relevancia en el país, pues dos piezas elaboradas por guatemaltecos se colocaron en un hardware que despegará a bordo de Artemis I.
"Estas piezas manufacturadas en Guatemala son una parte fundamental de PLASM, el hardware especial desarrollado en BioServe Space Technologies que hará posible un experimento biológico seleccionado por el departamento de Ciencias Biológicas y Físicas (BPS, por sus siglas en inglés) de la NASA", detalla un comunicado publicado por la agencia espacial.
El proyecto, llamado Genómica de la radiación en el espacio profundo (DSRG, por sus siglas en inglés) estudiará el efecto de la radiación espacial sobre microorganismos. Es uno de los cuatro experimentos biológicos que harán el viaje de ida y vuelta a la órbita de la Luna.
El experimento DSGR es liderado por el ingeniero y científico originario de Guatemala Luis Zea, quien hasta hace poco se desempeñó como jefe de implementación e investigador principal en proyectos de BioServe Space Technologies, en la Universidad de Colorado Boulder. Algunos de sus experimentos son financiados por la NASA; unos están basados en la Tierra, otros, en órbita terrestre a bordo de la Estación Espacial Internacional, detalló el documento.
El doctor Zea ha sido el nexo con el equipo de la Universidad del Valle de Guatemala (en donde él mismo estudió), compuesto por dos profesores de ingeniería mecánica y cinco estudiantes, según un texto de la NASA.
Como Artemis I no es una misión tripulada y el experimento tiene que ponerse en marcha una vez que Orion pase la magnetosfera de la Tierra, PLASM depende de sensores que “avisarán” cuándo activar el experimento.
El lanzamiento
La propia agencia se encargó de compartir el video en vivo en su página web y en NASA TV.
La transmisión ocurrió en las primeras horas del miércoles y con el seguimiento de miles de aficionados y expertos cuando se cargó el propulsor superfrío en el cohete SLS.
La NASA realizó una sesión informativa y, posteriormente, compartirá las primeras vistas de la Tierra desde las cámaras a bordo de la nave espacial Orion.
Además, las cámaras que se encuentran en el interior y en el exterior de Orion mostrarán imágenes y videos a lo largo de la misión, donde se incluirán vistas en vivo del experimento Callisto.
Se trata de un proyecto que capturará una secuencia de un maniquí llamado Comandante Moonikin Campos sentado en el asiento del comandante.