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¿Quién fue el hombre por el que Irán exige venganza contra EE. UU.?

Braulio Palacios
03 de enero, 2020

Qasem Soleimani ha sido elevado de “héroe” a “mártir” de Irán a sus 62 años. Su ejecución la noche del jueves 2 de enero representa el punto más alto en la tensión que tienen EE. UU. e Irán, quien exige “venganza”.

Soleimani (1957) fue un militar iraní que alcanzó el grado de general y su actividad en el exterior popularizó su figura. Llevaba más de 20 años al frente de las Brigadas Quds, una milicia islamista palestina financiada por Irán.

Se unió a los Guardianes de la Revolución en 1979. Ese mismo año, ya convertido en miembro del Cuerpo de los Guardianes fue movilizado y enviado a Mahabad para sofocar el levantamiento kurdo.

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Después de regresar, fue ascendido a comandante de la Guarnición de Quds del Cuerpo de los Guardianes en Kerman. Al comienzo de la guerra entre Irán e Irak (1980-1988), comandó batallones de la provincia de Kerman y posteriormente, formó una nueva brigada de fuerzas.

Ya entonces desempeñó una notable presencia en varias operaciones de guerra y debido a la explosión de un proyectil de mortero resultó gravemente herido en la mano derecha y el abdomen.

El general Qasem Soleimani fue el comandante de la fuerza élite Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán.

Entrada a las fuerzas Quds

Tras la guerra, un Soleimaní de 32 años combatió con la División “41 de Saralá” y gracias a sus éxitos, en 1997 fue llamado por Ali Jameneí, líder supremo iraní, quien le nombró comandante de la fuerza Quds.

A través de los años, se le pudo observar en varios conflictos, incluida la guerra de 2006 de Hizbulah en Líbano contra Israel y en el enfrentamiento de Hamas en 2009 en la franja de Gaza con el Ejército israelí.

Su entrada en Siria

En enero de 2011, fue nombrado general de división por Jameneí y tras la formación del grupo terrorista del Estado Islámico (EI) y el Frente al Nusra tuvo como misión de luchar contra ellos.

Soleimani formó, orientó y asesoró el “Al-Hashd Al-Sha’abi” (Multitud Popular) en Irak y la Fuerza de Defensa Nacional en Siria, y participó en la derrota del EI y el Frente al Nusra en Irak y Siria, lo que contribuyó a evitar la caída de los gobiernos de Bagdad y Damasco.

Su popularidad como figura militar de alto rango creció con la guerra en Siria y luego en el combate contra el Estado Islámico, también en territorio iraquí. Fue reconocido por su brutalidad en las estrategias de combate. “La mitad de los muertos en Siria lleva su acta de defunción“, aseguran expertos.

En misión diplomática, Soleimani viajó a Moscú para acercar con éxito posturas con Moscú y allegarse el apoyo de Rusia en el campo de batalla sirio.

La caída de Soleimani

En 2019 se frustró un plan para asesinar a Soleimaní, lo que da idea del papel que desempeñaba. “Comandante fantasma” y “El más poderoso de Oriente Medio”, entre otros, fueron algunos apodos que le dieron sus seguidores.

Soleimani, padre de dos hijos, murió en plena escalada de las tensiones entre Washington y Teherán, tras el cerco de los seguidores de Multitud Popular a la Embajada estadounidense en Bagdad el 31 de diciembre pasado.

El presidente iraní Hassan Rouhani ha prometido venganza para los asesinos de Soleimaní lo que augura más enfrentamientos entre Irán y EE.UU:

“Se alzará la bandera del general Soleimani, en defensa de la integridad territorial del país y la lucha contra el terrorismo y el extremismo en la región. La gran nación de Irán se vengará de este crimen atroz“, publicó Rouhani.

El máximo órgano de seguridad iraní prometió este viernes vengar la muerte del general Qasem Soleimani “en el momento y lugar apropiados” tras el ataque que acabó con la vida del responsable de la fuerza Al Quds.

Justo este jueves, el jefe del Pentágono, Mark Esper, había advertido a Irán de que si proseguía con su campaña de “provocaciones” contra intereses de EE.UU. en Oriente Medio, “lo lamentaría”.

Según Esper, EE. UU. ya que estaba preparada para encarar más “comportamiento ofensivo” visto el intento de asalto a la Embajada estadounidense en Bagdad.

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Soleimani (1957) fue un militar iraní que alcanzó el grado de general y su actividad en el exterior popularizó su figura. Llevaba más de 20 años al frente de las Brigadas Quds, una milicia islamista palestina financiada por Irán.

Se unió a los Guardianes de la Revolución en 1979. Ese mismo año, ya convertido en miembro del Cuerpo de los Guardianes fue movilizado y enviado a Mahabad para sofocar el levantamiento kurdo.

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Después de regresar, fue ascendido a comandante de la Guarnición de Quds del Cuerpo de los Guardianes en Kerman. Al comienzo de la guerra entre Irán e Irak (1980-1988), comandó batallones de la provincia de Kerman y posteriormente, formó una nueva brigada de fuerzas.

Ya entonces desempeñó una notable presencia en varias operaciones de guerra y debido a la explosión de un proyectil de mortero resultó gravemente herido en la mano derecha y el abdomen.

El general Qasem Soleimani fue el comandante de la fuerza élite Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán.

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Tras la guerra, un Soleimaní de 32 años combatió con la División “41 de Saralá” y gracias a sus éxitos, en 1997 fue llamado por Ali Jameneí, líder supremo iraní, quien le nombró comandante de la fuerza Quds.

A través de los años, se le pudo observar en varios conflictos, incluida la guerra de 2006 de Hizbulah en Líbano contra Israel y en el enfrentamiento de Hamas en 2009 en la franja de Gaza con el Ejército israelí.

Su entrada en Siria

En enero de 2011, fue nombrado general de división por Jameneí y tras la formación del grupo terrorista del Estado Islámico (EI) y el Frente al Nusra tuvo como misión de luchar contra ellos.

Soleimani formó, orientó y asesoró el “Al-Hashd Al-Sha’abi” (Multitud Popular) en Irak y la Fuerza de Defensa Nacional en Siria, y participó en la derrota del EI y el Frente al Nusra en Irak y Siria, lo que contribuyó a evitar la caída de los gobiernos de Bagdad y Damasco.

Su popularidad como figura militar de alto rango creció con la guerra en Siria y luego en el combate contra el Estado Islámico, también en territorio iraquí. Fue reconocido por su brutalidad en las estrategias de combate. “La mitad de los muertos en Siria lleva su acta de defunción“, aseguran expertos.

En misión diplomática, Soleimani viajó a Moscú para acercar con éxito posturas con Moscú y allegarse el apoyo de Rusia en el campo de batalla sirio.

La caída de Soleimani

En 2019 se frustró un plan para asesinar a Soleimaní, lo que da idea del papel que desempeñaba. “Comandante fantasma” y “El más poderoso de Oriente Medio”, entre otros, fueron algunos apodos que le dieron sus seguidores.

Soleimani, padre de dos hijos, murió en plena escalada de las tensiones entre Washington y Teherán, tras el cerco de los seguidores de Multitud Popular a la Embajada estadounidense en Bagdad el 31 de diciembre pasado.

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“Se alzará la bandera del general Soleimani, en defensa de la integridad territorial del país y la lucha contra el terrorismo y el extremismo en la región. La gran nación de Irán se vengará de este crimen atroz“, publicó Rouhani.

El máximo órgano de seguridad iraní prometió este viernes vengar la muerte del general Qasem Soleimani “en el momento y lugar apropiados” tras el ataque que acabó con la vida del responsable de la fuerza Al Quds.

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