La incierta y peligrosa situación que enfrenta la filial petrolera Citgo, uno de los pocos activos de envergadura para Venezuela en el exterior
La empresa de refinación de petróleo con sede en EE. UU. se ha enfrentado a una situación tumultuosa en los últimos años. En este análisis te contamos los idas y vueltas que ha tenido en manos del chavismo hasta su inminente subasta.
El pasado 1 de mayo El Departamento del Tesoro estadounidense anunció que no tomará “medidas coercitivas” para bloquear la subasta o un acuerdo negociado sobre las acciones de PDV Holding, empresa tenedora de Citgo, filial de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) en suelo estadounidense.
Esta noticia ha causado controversia y aún más división política en Venezuela. Debido a la actual crisis política y económica en el país sudamericano, la propiedad de Citgo ha sido objeto de litigio. La empresa subsidiaria de PDVSA fue afectada por las sanciones que en 2018 Estados Unidos impuso sobre Venezuela
En ese momento PDVSA no pudo acceder a sus fondos en bancos de EE. UU., incluidos los de Citgo. La situación empeoró en 2020 cuando un tribunal estadounidense accedió a una solicitud de Crystallex, una empresa minera canadiense que operaba en Venezuela y fue expropiada durante los años del gobierno de Hugo Chávez. La compañía minera pedía embargar los activos de Citgo en compensación por una deuda millonaria contraída por el estado venezolano.
Ante este escenario, el Especialista en Política y Tecnología (ETH-Zürich), Jorge Alejandro Rodríguez, explicó a República que “la situación actual de Citgo es de un agotamiento de las posibilidades de que la propiedad de la misma se mantenga en cabeza, sea de PDV Holding o de la República, por cuánto se van acelerando los tiempos en el posible cobro de las acreencias por parte de una cantidad de empresas, el primer caso que es el más cercano a ejecución es el de Crystallex, pero hay un segundo caso de otras empresas que vienen como en un segundo lote y hay un grupo de tenedores de bonos que serían un tercer lote”.
“La situación no es insalvable”
Citgo se encuentra en una posición difícil, ya que la empresa lucha por seguir siendo rentable y al mismo tiempo enfrenta desafíos legales por su propiedad. La compañía ha estado bajo presión financiera debido a la creciente competencia de los combustibles alternativos y las tensiones geopolíticas, estos problemas financieros se vieron agravados durante el confinamiento por la pandemia del COVID-19, lo que provocó en su momento una disminución de la demanda de gasolina.
Jorge Alejandro Rodríguez, quien ha denunciado activamente desde 2020 los riegos que corría la filial, asegura que si se toman las medidas correctas el tema podría ser remediado en el corto plazo.
“No es cierto que sea insalvable la situación, es aún recuperable o reversible pero ciertamente los errores cometidos estos últimos 20 años hacen cada vez más difícil que se pueda lograr. El hecho más reciente fue una sentencia de la semana pasada en la cual se le permite a PDVSA Ad Hoc un espacio para que negocie con los acreedores, en este caso el grupo de Crystallex y de los otros acreedores”, agregó Rodríguez
Para hacer frente a sus dificultades financieras, Citgo ha estado siguiendo una serie de estrategias. La compañía ha estado recortando costos, reduciendo su fuerza laboral y vendiendo activos secundarios. Citgo también ha estado trabajando para expandir su presencia en los mercados internacionales, incluidos India y China, para diversificar sus fuentes de ingresos.
A pesar de estos esfuerzos, la situación sigue siendo incierta para la filial. La propiedad futura de la empresa aún está en litigio y aún no está claro cómo se resolverá finalmente la situación en Venezuela. Mientras tanto, los empleados y accionistas quedan en un estado de incertidumbre mientras esperan una resolución.
Rodríguez afirma que, “lo que le corresponde a la Asamblea Nacional y a PDVSA Ad Hoc es denunciar y reclamar el perjuicio por las actuaciones más recientes del grupo encabezado por Juan Guaidó”.
Del mismo modo, insiste en que gran parte de la responsabilidad por la posible pérdida de Citgo recae directamente en las manos del régimen de Nicolás Maduro, pues indica que, “uno pudiera estar de acuerdo o no con la deuda a Crystallex, pero el origen de la misma es que la empresa canadiense alega que fue una expropiación arbitraria por parte del régimen, mientras que el Estado decía que fue un incumplimiento de Crystallex de los términos ambientales, entre otras cosas. Pero lo cierto es que hay una sentencia firme al respecto de un tribunal arbitral que determinó que la República debe indemnizar a Crystallex, con un monto que es perfectamente pagable hoy en día, estamos hablando de casi US 1.000$ millones”.
De igual modo señala que, tras las ganancias obtenidas a raíz de la guerra con Ucrania (que dejó sumas record de dinero a todas las grandes petroleras) podría llegarse a un acuerdo de pago con Crystallex y el resto de los acreedores.
Asimismo, insta a que “la junta Ad Hoc de PDVSA actúe en denunciar formalmente, como lo hicimos un grupo ya en el año 2020, las desafortunadas decisiones que se tomaron específicamente durante el interinato de Juan Guaidó”.
“Con la actuación del Departamento del Tesoro quedó confirmado lo absurdo de pretender contar con la OFAC para la defensa de los intereses nacionales”, concluyó Rodríguez.
Crystallex versus Venezuela: una disputa de más de 20 años
La disputa entre Crystallex y Venezuela se remonta al año 2002, cuando la minera canadiense obtuvo un permiso del gobierno venezolano para desarrollar la mina de oro Las Cristinas. Sin embargo, el gobierno venezolano luego revocó el permiso y confiscó los activos de la subsidiaria de Crystallex en Venezuela.
Crystallex presentó una demanda de arbitraje contra Venezuela en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) del Banco Mundial en 2011, en busca de compensación por la expropiación de sus activos. En 2016, el CIADI falló a favor de Crystallex y otorgó a la empresa $1200 millones en daños.
Sin embargo, Venezuela se negó a pagar la compensación y, en cambio, impugnó el fallo en los tribunales de los Estados Unidos. En 2018, un tribunal de EE. UU. autorizó la venta de CITGO Petroleum para pagar la deuda con Crystallex. Venezuela apeló la decisión y el caso aún está en curso.
La disputa entre Crystallex y Venezuela es un emblema de los desafíos que enfrentan los inversionistas extranjeros en países con climas políticos y económicos volátiles.
En conclusión, la situación de Citgo es compleja, con una combinación de factores financieros y geopolíticos en juego. La propiedad de la empresa está en disputa y enfrenta importantes desafíos financieros. Si bien la empresa sigue varias estrategias para hacer frente a sus dificultades financieras, el resultado final sigue siendo incierto.
La incierta y peligrosa situación que enfrenta la filial petrolera Citgo, uno de los pocos activos de envergadura para Venezuela en el exterior
La empresa de refinación de petróleo con sede en EE. UU. se ha enfrentado a una situación tumultuosa en los últimos años. En este análisis te contamos los idas y vueltas que ha tenido en manos del chavismo hasta su inminente subasta.
El pasado 1 de mayo El Departamento del Tesoro estadounidense anunció que no tomará “medidas coercitivas” para bloquear la subasta o un acuerdo negociado sobre las acciones de PDV Holding, empresa tenedora de Citgo, filial de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) en suelo estadounidense.
Esta noticia ha causado controversia y aún más división política en Venezuela. Debido a la actual crisis política y económica en el país sudamericano, la propiedad de Citgo ha sido objeto de litigio. La empresa subsidiaria de PDVSA fue afectada por las sanciones que en 2018 Estados Unidos impuso sobre Venezuela
En ese momento PDVSA no pudo acceder a sus fondos en bancos de EE. UU., incluidos los de Citgo. La situación empeoró en 2020 cuando un tribunal estadounidense accedió a una solicitud de Crystallex, una empresa minera canadiense que operaba en Venezuela y fue expropiada durante los años del gobierno de Hugo Chávez. La compañía minera pedía embargar los activos de Citgo en compensación por una deuda millonaria contraída por el estado venezolano.
Ante este escenario, el Especialista en Política y Tecnología (ETH-Zürich), Jorge Alejandro Rodríguez, explicó a República que “la situación actual de Citgo es de un agotamiento de las posibilidades de que la propiedad de la misma se mantenga en cabeza, sea de PDV Holding o de la República, por cuánto se van acelerando los tiempos en el posible cobro de las acreencias por parte de una cantidad de empresas, el primer caso que es el más cercano a ejecución es el de Crystallex, pero hay un segundo caso de otras empresas que vienen como en un segundo lote y hay un grupo de tenedores de bonos que serían un tercer lote”.
“La situación no es insalvable”
Citgo se encuentra en una posición difícil, ya que la empresa lucha por seguir siendo rentable y al mismo tiempo enfrenta desafíos legales por su propiedad. La compañía ha estado bajo presión financiera debido a la creciente competencia de los combustibles alternativos y las tensiones geopolíticas, estos problemas financieros se vieron agravados durante el confinamiento por la pandemia del COVID-19, lo que provocó en su momento una disminución de la demanda de gasolina.
Jorge Alejandro Rodríguez, quien ha denunciado activamente desde 2020 los riegos que corría la filial, asegura que si se toman las medidas correctas el tema podría ser remediado en el corto plazo.
“No es cierto que sea insalvable la situación, es aún recuperable o reversible pero ciertamente los errores cometidos estos últimos 20 años hacen cada vez más difícil que se pueda lograr. El hecho más reciente fue una sentencia de la semana pasada en la cual se le permite a PDVSA Ad Hoc un espacio para que negocie con los acreedores, en este caso el grupo de Crystallex y de los otros acreedores”, agregó Rodríguez
Para hacer frente a sus dificultades financieras, Citgo ha estado siguiendo una serie de estrategias. La compañía ha estado recortando costos, reduciendo su fuerza laboral y vendiendo activos secundarios. Citgo también ha estado trabajando para expandir su presencia en los mercados internacionales, incluidos India y China, para diversificar sus fuentes de ingresos.
A pesar de estos esfuerzos, la situación sigue siendo incierta para la filial. La propiedad futura de la empresa aún está en litigio y aún no está claro cómo se resolverá finalmente la situación en Venezuela. Mientras tanto, los empleados y accionistas quedan en un estado de incertidumbre mientras esperan una resolución.
Rodríguez afirma que, “lo que le corresponde a la Asamblea Nacional y a PDVSA Ad Hoc es denunciar y reclamar el perjuicio por las actuaciones más recientes del grupo encabezado por Juan Guaidó”.
Del mismo modo, insiste en que gran parte de la responsabilidad por la posible pérdida de Citgo recae directamente en las manos del régimen de Nicolás Maduro, pues indica que, “uno pudiera estar de acuerdo o no con la deuda a Crystallex, pero el origen de la misma es que la empresa canadiense alega que fue una expropiación arbitraria por parte del régimen, mientras que el Estado decía que fue un incumplimiento de Crystallex de los términos ambientales, entre otras cosas. Pero lo cierto es que hay una sentencia firme al respecto de un tribunal arbitral que determinó que la República debe indemnizar a Crystallex, con un monto que es perfectamente pagable hoy en día, estamos hablando de casi US 1.000$ millones”.
De igual modo señala que, tras las ganancias obtenidas a raíz de la guerra con Ucrania (que dejó sumas record de dinero a todas las grandes petroleras) podría llegarse a un acuerdo de pago con Crystallex y el resto de los acreedores.
Asimismo, insta a que “la junta Ad Hoc de PDVSA actúe en denunciar formalmente, como lo hicimos un grupo ya en el año 2020, las desafortunadas decisiones que se tomaron específicamente durante el interinato de Juan Guaidó”.
“Con la actuación del Departamento del Tesoro quedó confirmado lo absurdo de pretender contar con la OFAC para la defensa de los intereses nacionales”, concluyó Rodríguez.
Crystallex versus Venezuela: una disputa de más de 20 años
La disputa entre Crystallex y Venezuela se remonta al año 2002, cuando la minera canadiense obtuvo un permiso del gobierno venezolano para desarrollar la mina de oro Las Cristinas. Sin embargo, el gobierno venezolano luego revocó el permiso y confiscó los activos de la subsidiaria de Crystallex en Venezuela.
Crystallex presentó una demanda de arbitraje contra Venezuela en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) del Banco Mundial en 2011, en busca de compensación por la expropiación de sus activos. En 2016, el CIADI falló a favor de Crystallex y otorgó a la empresa $1200 millones en daños.
Sin embargo, Venezuela se negó a pagar la compensación y, en cambio, impugnó el fallo en los tribunales de los Estados Unidos. En 2018, un tribunal de EE. UU. autorizó la venta de CITGO Petroleum para pagar la deuda con Crystallex. Venezuela apeló la decisión y el caso aún está en curso.
La disputa entre Crystallex y Venezuela es un emblema de los desafíos que enfrentan los inversionistas extranjeros en países con climas políticos y económicos volátiles.
En conclusión, la situación de Citgo es compleja, con una combinación de factores financieros y geopolíticos en juego. La propiedad de la empresa está en disputa y enfrenta importantes desafíos financieros. Si bien la empresa sigue varias estrategias para hacer frente a sus dificultades financieras, el resultado final sigue siendo incierto.