Luego de la publicación de un informe independiente de la Organización de Estados Americanos (OEA), por la muerte de un adolescente guatemalteco por parte de fuerzas beliceñas, ocurrido en la zona de adyacencia entre Guatemala y Belice, vuelven a fragmentarse las relaciones diplomáticas entre los dos países.
Por tal situación, el Gobierno de Belice espera de Guatemala una disculpa. “Espero que sean lo suficientemente maduros como para aceptar que erraron, que las acusaciones que hicieron contra las fuerzas beliceñas fueron injustificadas y que le deben a Belice una disculpa“, afirmó Dean Barrow, primer ministro de Belice, el viernes último.
“Improcedente y absurda una disculpa”
Por estas declaraciones, excancilleres aseguran que es “absurdo” que Guatemala ofrezca una disculpa, pero que la solución a los conflictos diplomáticos con el vecino país será llevar el diferendo territorial y marítimo a la Corte Interamericana de Justicia.
El embajador de Guatemala ante la OEA, Gabriel Aguilera, indicó que es improcedente que Guatemala ofrezca disculpas, porque el incidente causó la muerte de un niño guatemalteco, entonces Guatemala es el ofendido.
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“Lo que Guatemala ha demandando es que se esclarezca la responsabilidad de ese hecho y que los responsables sean consignados a la justicia y esa demanda se mantiene”, manifestó el embajador Aguilera.
Aguilera anunció que Guatemala reaccionara este miércoles al entregar una carta al Secretario General de la OEA, Luis Almagro, expresando que muchos elementos del informe presentado por dos expertos independientes, son inaceptables, demandando una ampliación de los temas.
Además explicó que las relaciones diplomáticas con Belice están afectadas por ese incidente; sin embargo, será el embajador de Guatemala en Belice quien podría dar detalles al respecto. De acuerdo con Aguilera, el tema se trata en el campo diplomático, pero la intención es que pase al campo jurídico.
“Lo que Guatemala no va a aceptar es que quede impune el asesinato del menor guatemalteco, sino más bien se consigne a la justicia a los responsables del hecho”.
Inaceptable la muerte de guatemaltecos en la zona de adyacencia
Por su lado, el excanciller Eduardo Stein, dice que esta problemática afecta a Belice, a Guatemala y a la oficina encargada por la OEA para facilitar las medidas de confianza ante ambos países, poniendo en duda el rigor del informe de la entidad internacional para que se tome como definitivo e incluyente.
Stein dice que Belice ha argumentado que no fueron sus fuerzas armadas las responsables del asesinato del menor; no obstante, las armas utilizadas eran de guardabosques integradas también por fuerzas militares beliceñas, “de tal manera que hay una corresponsabilidad que no puede eludirse, no podemos admitir que se asesine a un joven que se encontraba a unos metros de la zona de adyacencia, no hay razón para utilizar armas de fuego”.
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Según el exministro, lo que Guatemala necesita es que se llegue a una solución jurídica internacionalmente planteada, a la cual ambas naciones se sometan luego de haber consultado a la población, si quiere que se siga ese camino o no, porque de lo contrario se va a mantener una zona de adyacencia difícil, por esa falta de definición.
Para el exministro de Relaciones Exteriores, Fernando Carrera, existen varias inconsistencias en el informe presentado por la OEA, al punto de dejar vacíos de responsabilidad y algo muy extraño entre el patrullaje armado, entre la asociación ambientalista y las fuerzas castrenses de Belice, “es una investigación inconclusa donde no cabe una disculpa por parte de Guatemala”.
Carrera refiere que la asociación ambientalista a la que hace referencia el informe, actuó como “un grupo paramilitar”. Además, manifiesta que la impunidad debe acabar por este tipo de crímenes y que sea este un caso paradigmático.
Por su lado, Gabriel Orellana, también excanciller, indica que Guatemala ya no debe seguirle el juego a Belice, porque pareciera que el vecino país tuviera problemas de política interna y por eso el Primer Ministro de Belice hace declaraciones de tipo provocativo, para desviar la atención de su población.
Orellana dice que seguirle el juego a Belice no lleva a ningún lugar, por que el punto fundamental para Guatemala es resolver el diferendo territorial, por lo que estos asuntos deben tratarse con calma.
Luego de la publicación de un informe independiente de la Organización de Estados Americanos (OEA), por la muerte de un adolescente guatemalteco por parte de fuerzas beliceñas, ocurrido en la zona de adyacencia entre Guatemala y Belice, vuelven a fragmentarse las relaciones diplomáticas entre los dos países.
Por tal situación, el Gobierno de Belice espera de Guatemala una disculpa. “Espero que sean lo suficientemente maduros como para aceptar que erraron, que las acusaciones que hicieron contra las fuerzas beliceñas fueron injustificadas y que le deben a Belice una disculpa“, afirmó Dean Barrow, primer ministro de Belice, el viernes último.
“Improcedente y absurda una disculpa”
Por estas declaraciones, excancilleres aseguran que es “absurdo” que Guatemala ofrezca una disculpa, pero que la solución a los conflictos diplomáticos con el vecino país será llevar el diferendo territorial y marítimo a la Corte Interamericana de Justicia.
El embajador de Guatemala ante la OEA, Gabriel Aguilera, indicó que es improcedente que Guatemala ofrezca disculpas, porque el incidente causó la muerte de un niño guatemalteco, entonces Guatemala es el ofendido.
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“Lo que Guatemala ha demandando es que se esclarezca la responsabilidad de ese hecho y que los responsables sean consignados a la justicia y esa demanda se mantiene”, manifestó el embajador Aguilera.
Aguilera anunció que Guatemala reaccionara este miércoles al entregar una carta al Secretario General de la OEA, Luis Almagro, expresando que muchos elementos del informe presentado por dos expertos independientes, son inaceptables, demandando una ampliación de los temas.
Además explicó que las relaciones diplomáticas con Belice están afectadas por ese incidente; sin embargo, será el embajador de Guatemala en Belice quien podría dar detalles al respecto. De acuerdo con Aguilera, el tema se trata en el campo diplomático, pero la intención es que pase al campo jurídico.
“Lo que Guatemala no va a aceptar es que quede impune el asesinato del menor guatemalteco, sino más bien se consigne a la justicia a los responsables del hecho”.
Inaceptable la muerte de guatemaltecos en la zona de adyacencia
Por su lado, el excanciller Eduardo Stein, dice que esta problemática afecta a Belice, a Guatemala y a la oficina encargada por la OEA para facilitar las medidas de confianza ante ambos países, poniendo en duda el rigor del informe de la entidad internacional para que se tome como definitivo e incluyente.
Stein dice que Belice ha argumentado que no fueron sus fuerzas armadas las responsables del asesinato del menor; no obstante, las armas utilizadas eran de guardabosques integradas también por fuerzas militares beliceñas, “de tal manera que hay una corresponsabilidad que no puede eludirse, no podemos admitir que se asesine a un joven que se encontraba a unos metros de la zona de adyacencia, no hay razón para utilizar armas de fuego”.
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Según el exministro, lo que Guatemala necesita es que se llegue a una solución jurídica internacionalmente planteada, a la cual ambas naciones se sometan luego de haber consultado a la población, si quiere que se siga ese camino o no, porque de lo contrario se va a mantener una zona de adyacencia difícil, por esa falta de definición.
Para el exministro de Relaciones Exteriores, Fernando Carrera, existen varias inconsistencias en el informe presentado por la OEA, al punto de dejar vacíos de responsabilidad y algo muy extraño entre el patrullaje armado, entre la asociación ambientalista y las fuerzas castrenses de Belice, “es una investigación inconclusa donde no cabe una disculpa por parte de Guatemala”.
Carrera refiere que la asociación ambientalista a la que hace referencia el informe, actuó como “un grupo paramilitar”. Además, manifiesta que la impunidad debe acabar por este tipo de crímenes y que sea este un caso paradigmático.
Por su lado, Gabriel Orellana, también excanciller, indica que Guatemala ya no debe seguirle el juego a Belice, porque pareciera que el vecino país tuviera problemas de política interna y por eso el Primer Ministro de Belice hace declaraciones de tipo provocativo, para desviar la atención de su población.
Orellana dice que seguirle el juego a Belice no lleva a ningún lugar, por que el punto fundamental para Guatemala es resolver el diferendo territorial, por lo que estos asuntos deben tratarse con calma.