Un centro de investigación en España prepara una nanovacuna para curar el melanoma.
La Fundación para la Innovación y la Prospectiva de la Salud en España (FIPSE), ha comunicado que está impulsando un proyecto para curar el cáncer en la piel.
El proyecto lo realiza el Instituto de Investigación Marqués de Valdecilla de Santander (IDIVAL).
Este consiste en una nanovacuna que permite reducir el tamaño del melanoma, e incluso, evitar la metástasis en el pulmón.
FIPSE facilita al equipo de investigación el acceso a un plan de negocio y una hoja de ruta para el desarrollo preclínico de la nanovacuna terapéutica.
El aporte de FIPSE incluye la identificación de socios industriales para el proceso de prueba y posible venta al mercado.
El melanoma es considerado como el cáncer de piel más agresivo.
Cuando se encuentra en fase avanzada es considerada una enfermedad incurable y la administración de tratamientos se realiza con finalidad paliativa.
En los años ochentas, los pacientes que padecían esta enfermedad, contaban con una media de supervivencia de menos de un año.
Sin embargo, la FIPSE asegura que, “desde hace 10 años, y gracias a tratamientos revolucionarios, la esperanza de vida ha aumentado considerablemente”.
Nanovacuna de oro
Una investigación de la Fundación Instituto de Investigación Marqués de Valdecilla, desarrolló una nanovacuna terapeútica.
Esta vacuna con nanopartículas de oro logra una regresión del melanoma.
Este trabajo de investigación todavía requiere un estudio de validación de su uso.
Sobre el futuro de la lucha contra el cáncer, FIPSE indica que el camino va hacia el uso de la inmunoterapia como la principal alternativa a las terapias dirigidas.
La nanovaculogia representa un nuevo paradigma y un gran salto en las inmunizaciones.
Esta nueva ciencia permitirá desechar el uso de las jeringas, aplicarlas en una sola dosis, optimizar la inmunogenicidad.
Además, reduce las reacciones en los pacientes y no requiere refrigeración.
También ofrece la posibilidad de fabricar vacunas multivalentes para atender varias enfermedades.
Estas características mejorarán las inmunizaciones en favor de los países pobres.
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Con información de Acta Sanitaria.
Un centro de investigación en España prepara una nanovacuna para curar el melanoma.
La Fundación para la Innovación y la Prospectiva de la Salud en España (FIPSE), ha comunicado que está impulsando un proyecto para curar el cáncer en la piel.
El proyecto lo realiza el Instituto de Investigación Marqués de Valdecilla de Santander (IDIVAL).
Este consiste en una nanovacuna que permite reducir el tamaño del melanoma, e incluso, evitar la metástasis en el pulmón.
FIPSE facilita al equipo de investigación el acceso a un plan de negocio y una hoja de ruta para el desarrollo preclínico de la nanovacuna terapéutica.
El aporte de FIPSE incluye la identificación de socios industriales para el proceso de prueba y posible venta al mercado.
El melanoma es considerado como el cáncer de piel más agresivo.
Cuando se encuentra en fase avanzada es considerada una enfermedad incurable y la administración de tratamientos se realiza con finalidad paliativa.
En los años ochentas, los pacientes que padecían esta enfermedad, contaban con una media de supervivencia de menos de un año.
Sin embargo, la FIPSE asegura que, “desde hace 10 años, y gracias a tratamientos revolucionarios, la esperanza de vida ha aumentado considerablemente”.
Nanovacuna de oro
Una investigación de la Fundación Instituto de Investigación Marqués de Valdecilla, desarrolló una nanovacuna terapeútica.
Esta vacuna con nanopartículas de oro logra una regresión del melanoma.
Este trabajo de investigación todavía requiere un estudio de validación de su uso.
Sobre el futuro de la lucha contra el cáncer, FIPSE indica que el camino va hacia el uso de la inmunoterapia como la principal alternativa a las terapias dirigidas.
La nanovaculogia representa un nuevo paradigma y un gran salto en las inmunizaciones.
Esta nueva ciencia permitirá desechar el uso de las jeringas, aplicarlas en una sola dosis, optimizar la inmunogenicidad.
Además, reduce las reacciones en los pacientes y no requiere refrigeración.
También ofrece la posibilidad de fabricar vacunas multivalentes para atender varias enfermedades.
Estas características mejorarán las inmunizaciones en favor de los países pobres.