Las extorsiones contra el transporte público es una de las situaciones que
muestra la poca seguridad e impunidad que vive cada día el país. También es la causa de que muchos
pilotos pierdan sus vidas haciendo su trabajo. Los extorsionistas piden cierta
cantidad de dinero semanal y si no lo reciben entonces arremeten contra los
pilotos, ayudantes, transportistas y ponen en peligro a los usuarios.

Las fuerzas de seguridad de
la División del Programa Nacional Contra el Desarrollo Criminal de las
Pandillas (PANDA) fueron las encargadas de la detención de Juana Marisol Alvarado Castro de 23 años. Esto
sucedió en la calzada San Juan y 27 avenida de la zona 7 capitalina. Según las indagaciones de la Fiscalía Municipal del Ministerio Público de Mixco, la detenida le exigía Q700 semanales a los transportistas a cambio de sus vidas. Se le identificó como integrante de la Mara 18 y de ser conviviente del presunto pandillero Estiven Mejía, recluso desde el 2010.

Los usuarios del transporte
público también se ven afectados, ya que al momento de un ataque, sus vidas
también corren peligro. Por otra parte, los constantes paros de los buses urbanos exigiendo seguridad, afectan
a los usuarios porque deben conseguir transportarse por otras vías y pagan más
de lo normal para movilizarse.