Según
indican los informes policíacos, el cuerpo de Evelio Arana Pérez se encontraba a 35 metros
de una champa construida con nylon y madera, lugar en que presuntamente lo
mantuvieron cautivo. Los fiscales que examinaron los restos calculan que el
cuerpo estaba sin vida desde hace 20 días, lo que determinaron por el estado
de putrefacción.

El
ganadero fue secuestrado el 17 de agosto cuando se dirigía a su finca en
Jalpatagua, Jutiapa, según la información que dieron las autoridades y los
parientes de la víctima. Los familiares aseguran que los
secuestradores exigían Q1 millón a cambio de su libertad.

El
alcalde auxiliar de la comunidad, Víctor Carías, supone a que
allí se mantuvo en cautiverio a Arana Pérez, ya que en el lugar encontraron ropa, empaques de
comida, agua y bolsas plásticas de supermercado.

Según familiares, Arana padecía de problemas cardíacos y dependía de un medicamento, por lo que se presume que la víctima del secuestro
murió por un paro cardíaco. La familia del  ganadero logró identificarlo por pertenencias personales encontradas en el lugar. Agregaron que  los secuestradores suspendieron las
negociaciones desde hace una semana.