Hoy dictan sentencia en caso La Línea que involucra a Otto Pérez Molina y a Roxana Baldetti
Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti se mostraron confiados al finalizar el juicio. Consideran que el Ministerio Público no pudo comprobar los delitos por los cuales fueron procesados: caso especial de defraudación aduanera, enriquecimiento ilícito y asociacion ilicita.
El jueves 16 de abril de 2015 los guatemaltecos despertaron con un operativo que marcó la historia reciente del país. Fue el inicio de una investigación que llevó al final del gobierno del Partido Patriota (PP) presidido por Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti.
El caso, que de inmediato fue conocido como La Línea, empezó con la captura de exfuncionarios de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), trabajadores de la entidad estatal y personas particulares. Pero entre los buscados por las fuerzas de seguridad apareció un nombre que sacudió el entorno politico y gubernamental: Juan Carlos Monzón.
Monzón era la mano derecha de la exvicepresidenta Baldetti y por eso el nombre del entonces funcionario llevó de inmediato a especular que en este proceso podría estar implicada su jefa. Y así fue. Cuatro meses después, el 21 de agosto, el juez de Mayor Riesgo B, Miguel Ángel Gálvez, le notificó en un hospital privado la orden de captura a Baldetti.
Para ese entonces la exgobernante había dejado el cargo tras la presión pública y, según ella, también luego de recibir la petición directa del exembajador de Estados Unidos, Todd Robinson, de abandonar el cargo.
Ese día, el viernes 21 de agosto, también la Fiscalía a cargo de Thelma Aldana presentó la solicitud de antejuicio contra Pérez Molina, quien apenas duró unos días más en el cargo antes de entregarse a la justicia. Al recordar los hechos, el exmandatario asegura que pudo huir con apoyo de otros gobernantes que le ofrecieron ayuda, pero prefirió quedarse para enfrentar la justicia.
Siete años después
Todos estos hechos que causaron un terremoto político en aquel 2015 terminaron con el fortalecimiento de la entonces Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), dirigida por Iván Velásquez.
El apoyo para esta entidad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), creció en todos los sectores, aunque con los años se debilitó y terminó por llevarla a la extinción.
Ese año, el 2015, inició el proceso contra los 29 implicados que durante estos siete años han permanecido en prisión provisional. Entre recursos legales planteados, la pandemia del covid-19 y otros retrasos, por fin el proceso está a pocos días de llegar al final.
El lunes 5 de diciembre finalizó el juicio con la última declaración de Pérez Molina y Baldetti y este miércoles 7 de diciembre, a partir de las 11:00 horas, se dictará la esperada sentencia a cargo del Tribunal de Mayor Riesgo B.
Pérez Molina y Baldetti se mostraron confiados al finalizar el juicio, pues consideran que el Ministerio Público no pudo comprobar los delitos por los cuales fueron procesados: caso especial de defraudación aduanera, enriquecimiento ilícito y asociacion ilicita.
Hoy dictan sentencia en caso La Línea que involucra a Otto Pérez Molina y a Roxana Baldetti
Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti se mostraron confiados al finalizar el juicio. Consideran que el Ministerio Público no pudo comprobar los delitos por los cuales fueron procesados: caso especial de defraudación aduanera, enriquecimiento ilícito y asociacion ilicita.
El jueves 16 de abril de 2015 los guatemaltecos despertaron con un operativo que marcó la historia reciente del país. Fue el inicio de una investigación que llevó al final del gobierno del Partido Patriota (PP) presidido por Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti.
El caso, que de inmediato fue conocido como La Línea, empezó con la captura de exfuncionarios de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), trabajadores de la entidad estatal y personas particulares. Pero entre los buscados por las fuerzas de seguridad apareció un nombre que sacudió el entorno politico y gubernamental: Juan Carlos Monzón.
Monzón era la mano derecha de la exvicepresidenta Baldetti y por eso el nombre del entonces funcionario llevó de inmediato a especular que en este proceso podría estar implicada su jefa. Y así fue. Cuatro meses después, el 21 de agosto, el juez de Mayor Riesgo B, Miguel Ángel Gálvez, le notificó en un hospital privado la orden de captura a Baldetti.
Para ese entonces la exgobernante había dejado el cargo tras la presión pública y, según ella, también luego de recibir la petición directa del exembajador de Estados Unidos, Todd Robinson, de abandonar el cargo.
Ese día, el viernes 21 de agosto, también la Fiscalía a cargo de Thelma Aldana presentó la solicitud de antejuicio contra Pérez Molina, quien apenas duró unos días más en el cargo antes de entregarse a la justicia. Al recordar los hechos, el exmandatario asegura que pudo huir con apoyo de otros gobernantes que le ofrecieron ayuda, pero prefirió quedarse para enfrentar la justicia.
Siete años después
Todos estos hechos que causaron un terremoto político en aquel 2015 terminaron con el fortalecimiento de la entonces Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), dirigida por Iván Velásquez.
El apoyo para esta entidad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), creció en todos los sectores, aunque con los años se debilitó y terminó por llevarla a la extinción.
Ese año, el 2015, inició el proceso contra los 29 implicados que durante estos siete años han permanecido en prisión provisional. Entre recursos legales planteados, la pandemia del covid-19 y otros retrasos, por fin el proceso está a pocos días de llegar al final.
El lunes 5 de diciembre finalizó el juicio con la última declaración de Pérez Molina y Baldetti y este miércoles 7 de diciembre, a partir de las 11:00 horas, se dictará la esperada sentencia a cargo del Tribunal de Mayor Riesgo B.
Pérez Molina y Baldetti se mostraron confiados al finalizar el juicio, pues consideran que el Ministerio Público no pudo comprobar los delitos por los cuales fueron procesados: caso especial de defraudación aduanera, enriquecimiento ilícito y asociacion ilicita.