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La Laguna de azufre de Ixpaco

Vive
27 de abril, 2021

La Laguna de Ixpaco es una laguna de agua azufrada situada en las faldas del volcán Tecuamburro, en el departamento de Santa Rosa.

Se halla a mil 100 metros sobre el nivel del mar y tiene un diámetro de 350 metros. La lámina de agua abarca una superficie de 0,13 km² y la temperatura del agua varía desde los 25°C a los casi 100°C.


Una laguna con olor a huevo duro​


La reconocerás por su peculiar olor a huevos duros, el azufre de “una vena del volcán Tecuanburro”, explican los pobladores de la región, que alimenta el afluente. Lo mejor de este destino es que no pagas por visitarlo.

Debes llegar a Pueblo Nuevo Viñas, busca la ruta hacia la aldea El Mora, ahí pregunta a los vecinos por la ruta a Ixpaco. El último tramo es de terracería, aún así abre tus ventanas para que te acostumbres al intenso olor azufrado.

Por supuesto que puedes sumergirte en sus tibias aguas, de hecho les atribuyen propiedades curativas por sus componentes minerales.

También puedes caminar por los alrededores; si guardas silencio escucharás el canto de las aves, el fluir del agua, el viento y los respiraderos a la orilla de la laguna, como cuando hierve la olla de los tamales.

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La Laguna de azufre de Ixpaco

Vive
27 de abril, 2021

La Laguna de Ixpaco es una laguna de agua azufrada situada en las faldas del volcán Tecuamburro, en el departamento de Santa Rosa.

Se halla a mil 100 metros sobre el nivel del mar y tiene un diámetro de 350 metros. La lámina de agua abarca una superficie de 0,13 km² y la temperatura del agua varía desde los 25°C a los casi 100°C.


Una laguna con olor a huevo duro​


La reconocerás por su peculiar olor a huevos duros, el azufre de “una vena del volcán Tecuanburro”, explican los pobladores de la región, que alimenta el afluente. Lo mejor de este destino es que no pagas por visitarlo.

Debes llegar a Pueblo Nuevo Viñas, busca la ruta hacia la aldea El Mora, ahí pregunta a los vecinos por la ruta a Ixpaco. El último tramo es de terracería, aún así abre tus ventanas para que te acostumbres al intenso olor azufrado.

Por supuesto que puedes sumergirte en sus tibias aguas, de hecho les atribuyen propiedades curativas por sus componentes minerales.

También puedes caminar por los alrededores; si guardas silencio escucharás el canto de las aves, el fluir del agua, el viento y los respiraderos a la orilla de la laguna, como cuando hierve la olla de los tamales.

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