50 años de Consagración del Cristo del Amor, conoce la historia del Sepultado del Templo de Santo Domingo
Aunque algunos sitúan el Santo Entierro de Santo Domingo en 1547 como año de su inicio, no hay prueba escrita que lo respalde.
Cómo fue la consagración del Sepultado del Templo de Santo Domingo. Según datos obtenidos de publicaciones en medios de comunicación de aquella época, el acto se realizó la mañana del 11 de marzo de 1973, específicamente durante el Primer Domingo de Cuaresma.
El Cristo del Amor fue el primer yacente de Guatemala en ser consagrado. En aquel entonces como ahora en el 2023, la imagen salió en una procesión extraordinaria a recorrer calles y avenidas del Centro Histórico.
Las andas fueron levantadas a las 8 de la mañana y por primera vez los guatemaltecos pudieron ver al sepultado sin su tradicional urna. Otro dato que vale la pena destacar es que la imagen utilizó una túnica nueva de terciopelo en color vino bordada con hilos de oro.
La procesión pasó por La Merced, San Sebastián, la 4a avenida, llegando al atrio de la Catedral Metropolitana alrededor de las 11 de la mañana, lugar en donde se realizó el acto de consagración que estuvo a cargo del arzobispo Mario Cardenal Casariego, asistido por los reverendos Mario Reinoso y Álvaro Ramazzini.
Cuándo fue la primera procesión del Cristo del Amor
Algunos historiadores aseguran que el primer documento de una procesión con el sepultado aparece con fecha de 1582, pero lo que si es cierto, es que en 1650 la procesión comienza a tener cambios importantes, por ejemplo, la primera urna hecha de carey y plata atribuida al escultor colonial Pedro de Mendoza.
En 1697 comienza la participación de los gremios de la época (panaderos, herreros, carpinteros, etcétera), quienes se encargaban de vestir y decorar a los llamados ángeles llorones que a la fecha siguen formando parte del cortejo dominico.
Luego de destruida la capital del reino por los terremotos de Santa marta en 1773 fueron los dominicos una de las primera órdenes religiosas en trasladarse a la Nueva Guatemala de la Asunción.
No pasarían muchos años para que el Santo Entierro volviera a recorrer las calles de la nueva capital manteniendo la estructura que traía de la antigua ciudad.
La procesión con el paso de los años
En 1940 se realizan modificaciones definitivas a la urna para dejarla como la conocemos en la actualidad: se hizo más alta y se hicieron de nuevo las patas y los cerchones, trabajo efectuado en los talleres de don Benjamín Granados.
En 1868 y para darle más cuerpo al cortejo comienzan a salir las imágenes de los santos varones José de Arimatea y Nicodemo, imágenes que siguen saliendo en la actualidad.
En 1888 se trae de Europa un Vía Crucis con cuadros pintados al óleo y que salieron hasta 1936 cuando, con la venida de los pasos, dejan de salir.
Con la llegada del siglo XX vendrían más cambios. Por ejemplo, en 1907 principian a salir las imágenes de los soldados romanos Longinos, quien fue quien atravesó con su lanza el costado del Señor y Cornelio uno de los primeros romanos en convertirse en seguidores de Jesús.
En 1929 comienzan a llegar procedentes de España los pasos del Vía Crucis, grupos escultóricos que representan la pasión de Nuestro Señor.
El Señor sepultado inicia su recorrido pocos minutos antes de las 3 de la tarde del Viernes Santo de cada año, recorriendo calles y avenidas del Centro Histórico, es acompañado por las imágenes de la Virgen de Soledad, bella obra del barroco Guatemalteco que proviene de finales del siglo XVI o principios del XVII.