Recuerdo la primera vez que tuve la oportunidad de visitar Costa Rica, era el año 1999 y dos cosas me llamaron la atención: primero la diferencia en el tipo de cambio de su moneda, el Colón (? 299.00 por US$ 1.00), y el mal estado de sus carreteras. Con mi poca percepción de cómo funcionaba el mundo, deduje que Guatemala estaba mucho mejor que Costa Rica. Un par de años más tarde tuve la oportunidad de hablar con un tico de mayor edad y le dije mi percepción de su país basado en el “mal estado de sus carreteras”, a lo que él respondió, consciente de mi ingenuidad, que el gobierno costarricense prefería utilizar ese dinero para brindar un buen servicio de salud y una buena educación pública. La respuesta del costarricense me obligó a preguntarme a mis 14 años de edad, ¿Entonces cómo estaremos en Guatemala en Salud, Educación y todos esos servicios básicos? Para ese entonces, poco a poco fui entendiendo e interesándome en por qué estábamos como estábamos y qué nos hacía diferentes de nuestros hermanos centroamericanos.
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Al día de hoy, 15 años después, vuelvo hacer la misma pregunta y me doy cuenta que Guatemala, ese país que en toda Centroamérica lo ven como “El Grande” con sus casi 16 millones de habitantes se ha quedado con cierto rezago en materia social y económica frente a otros países considerados pequeños como Costa Rica y Panamá. Mientras en Guatemala nos ponemos de acuerdo en definir cuál es la mejor solución para resolver nuestros problemas identificados desde hace años (pobreza, desnutrición, corrupción, violencia, etc.), nuestros hermanos menores ya nos han ganado la jugada ante el resto del mundo, siendo más competitivos y atractivos para generar inversión. Excusas y comparaciones de por qué nos estancamos, encontraremos muchas, pues hay quienes culparán desde que tuvimos un Conflicto Armado interno de 36 años, otros dirán que la calidad de nuestros políticos no ha sido la mejor, pero ¿Es momento de justificar nuestro rezago a estas alturas? ¿O será momento para analizar qué han hecho mejor nuestros vecinos e imitar lo bueno?
Desde el punto de vista social, de acuerdo al Informe sobre Desarrollo Humano del Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas del 2013, Guatemala ocupa el puesto 133 de 186, último lugar de Centroamérica, poco adelante de países como Camboya (138) y un poco detrás de Iraq (131), todos ubicados en el nivel de desarrollo humano medio. Por otro lado, Panamá lidera la lista de países centroamericanos en el puesto 59 y poco atrás Costa Rica en el puesto 62 ubicándose en el eslabón de países con nivel de desarrollo humano alto.
Por el lado de competitividad, Guatemala se encuentra de igual forma rezagada frente a sus dos vecinos. De acuerdo al Índice de Competitividad Global del Foro Económico Mundial 2013, la economía de Guatemala se encuentra en el puesto 86 de 148 economías evaluadas, por delante de El Salvador, Honduras y Nicaragua pero detrás de Panamá y Costa Rica quienes ocupan el puesto 40 y 54 respectivamente.
Entonces, ¿Qué debemos hacer en Guatemala para ser más competitivos? En mi opinión, es necesario brindar certeza jurídica a los inversionistas, no cambiándoles las reglas del juego cada cuatro años, principalmente en materia fiscal. Sin olvidar que luego de definir las reglas, es necesario reforzar el sistema de justicia para que haga cumplir la ley de forma eficaz y efectiva. De igual forma, aunque es un tema complejo, es necesario combatir los robos y criminalidad, los cuales hacen que las empresas incurran en altos gastos operativos, al contratar seguridad privada. Finalmente apostaría por agilizar y modernizar el proceso de inscripción de nuevas empresas haciéndolo mas sencillo, no sólo para el inversionista extranjero sino para el local.
En lo personal no quisiera que pasaran otros 15 años cuando me vuelva a preguntar, adónde se encuentra Guatemala y la respuesta sea la misma o peor que la que obtenemos al día de hoy. No es necesario inventar el agua azucarada sino imitar lo bueno de otros, adaptado a nuestra realidad. Sin embargo no pierdo la esperanza que algún día nos pongamos de acuerdo en este país.
Twitter: @HerbsMelendez