La vicepresidenta de la República, Roxana Baldetti, dio instrucciones para que se detenga el estudio que había pedido a la SAT sobre modelos de cómo ampliar la base tributaria; al IGSS se había solicitado su opinión de cómo incorporarlos a la seguridad social.

La iniciativa ya no se discutirá en la reunión de Gabinete Económico que se realizará en los primeros días de marzo. 

Según el analista económico del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), Abelardo Medina, la propuesta no era nada nuevo, ya que fue discutida en el pasado, y no hubo consenso para impulsarla. Para Medina, el fisco solo lograría unos Q300 millones más en la recaudación y no resolvería el problema de recaudación. 

El Sindicato de Trabajadores de la Economía Informal recibió con beneplácito la noticia porque dicho monotributo afectaría su economía de subsistencia. Además, demandaron al Ejecutivo de fuentes de trabajo.

 

 “El Gobierno tomó la decisión correcta, porque un impuesto así impactaría a la población guatemalteca que vive del comercio informal, expresó Mirna Nij, de esta organización sindical.

El ministro de Economía, Sergio de la Torre, había declarado que un 80% de las actividades productivas de Guatemala se realizan en el sector informal. La propuesta hubiera ampliado la base tributaria y también incorporado a ese sector al IGSS.