El Congreso de México aprobó este miércoles una parte de la reforma fiscal que eleva de 11% a 16% el Impuesto al Valor Agregado (IVA) en los estados fronterizos con Estados Unidos, pese a que empresarios y la oposición aseguran que esto deteriorará la economía.
Tras una maratónica discusión, el Senado aprobó la madrugada de este miércoles una iniciativa ya revisada por los diputados que consiste en homologar el IVA que se aplica en la zona fronteriza norte, actualmente de 11%, con la del resto del país, de 16%.
Ese incremento -avalado con 68 votos a favor y 55 en contra- contó con el apoyo del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Verde Ecologista (PVEM) y una fracción del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En tanto, el conservador Partido Acción Nacional (PAN), en un rotundo desacuerdo, abandonó el recinto legislativo, suspendiendo así la discusión de otros puntos importantes de la reforma fiscal, como la aplicación de un nuevo gravamen a bebidas azucaradas y alimentos altamente calóricos.
La homologación del IVA supone una ‘chata (estrecha) visión sobre la región fronteriza de México’, dijo el senador Javier Corral, del PAN.
‘Esto reducirá el poder de compra de los trabajadores y elevará el costo de las empresas, lo cual tendrá efectos inflacionarios’, añadió.
Recaudación versus competitividad
La reforma fiscal, que no se ha validado aún en su conjunto, fue enviada el 8 de septiembre al Congreso por el presidente Enrique Peña Nieto, con la intensión de reducir el grave índice de desigualdad en el país a través de la recaudación de unos 80.000 millones de dólares.
En México, los ingresos tributarios equivalen al 13,7% del PIB, mientras que en el resto de América Latina el promedio es de 18,4%.
Sin embargo, hay quienes aseguran que el incremento del IVA en la zona fronteriza transferirá el consumo al lado estadounidense y mermará la competitividad de las exportaciones mexicanas.
Jorge Escalante, presidente de la filial en Tijuana (noroeste) de la Confederación Patronal de la República Mexicana, aseguró a la AFP que la decisión legislativa provocaría la pérdida de 25.000 empleos y afectará directamente a los empresarios fronterizos.
‘Ahora mismo, los precios en San Diego (California, suroeste de EEUU) son 37% más baratos que en Tijuana, y con la reforma serán 42% más baratos aún’, explicó.
A raíz de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) que México firmó con Estados Unidos (su principal socio comercial) y Canadá en 1994, proliferó la industria maquiladora (ensambladora) en su frontera norte.
Los legisladores tienen que pensar ‘en el gran reto que tenemos de mejorar la competitividad del país y sobre todo del sector exportador mexicano’, aseguró a la AFP Luis Aguirre, presidente del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación.
En una metáfora, Aguirre comentó: ‘Quieren que sigamos compitiendo en la Copa Mundial y nos quieren mandar con polainas de seis kilos en cada pie’.
Pacto en juego
Diversas manifestaciones de protesta se han venido sucediendo recientemente a lo largo de la frontera con Estados Unidos, de más de 3.000 km. La más importante se realizó el martes en Ciudad Juárez (vecina de El Paso, Texas, sur de EEUU), donde unos 5.000 obreros y empresarios marcharon hasta un puente internacional.
Pacto en juego
Desde que asumió el poder en diciembre pasado, Peña Nieto ha impulsado una serie de reformas estructurales a través del inédito Pacto por México, firmado con los opositores PAN y PRD. Hasta ahora han sido aprobadas dos iniciativas: una en materia educativa y otra en telecomunicaciones y competencia.
Sin embargo, los desacuerdos en materia fiscal comprometen la perennidad de esta alianza.
‘El gobierno federal ha decidido ignorar a uno de sus dos aliados estratégicos’, por lo que ‘ha llegado el momento de que el PAN replantee su relación con el gobierno y concluya su participación en el Pacto por México’, aseguró el senador Javier Corral.
El Pacto también se encuentra amenazado por otra polémica iniciativa en materia energética, que busca abrir a capital privado la paraestatal Petróleos Mexicanos y que es fuertemente contestada por el PRD.
El Congreso de México aprobó este miércoles una parte de la reforma fiscal que eleva de 11% a 16% el Impuesto al Valor Agregado (IVA) en los estados fronterizos con Estados Unidos, pese a que empresarios y la oposición aseguran que esto deteriorará la economía.
Tras una maratónica discusión, el Senado aprobó la madrugada de este miércoles una iniciativa ya revisada por los diputados que consiste en homologar el IVA que se aplica en la zona fronteriza norte, actualmente de 11%, con la del resto del país, de 16%.
Ese incremento -avalado con 68 votos a favor y 55 en contra- contó con el apoyo del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Verde Ecologista (PVEM) y una fracción del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD).
En tanto, el conservador Partido Acción Nacional (PAN), en un rotundo desacuerdo, abandonó el recinto legislativo, suspendiendo así la discusión de otros puntos importantes de la reforma fiscal, como la aplicación de un nuevo gravamen a bebidas azucaradas y alimentos altamente calóricos.
La homologación del IVA supone una ‘chata (estrecha) visión sobre la región fronteriza de México’, dijo el senador Javier Corral, del PAN.
‘Esto reducirá el poder de compra de los trabajadores y elevará el costo de las empresas, lo cual tendrá efectos inflacionarios’, añadió.
Recaudación versus competitividad
La reforma fiscal, que no se ha validado aún en su conjunto, fue enviada el 8 de septiembre al Congreso por el presidente Enrique Peña Nieto, con la intensión de reducir el grave índice de desigualdad en el país a través de la recaudación de unos 80.000 millones de dólares.
En México, los ingresos tributarios equivalen al 13,7% del PIB, mientras que en el resto de América Latina el promedio es de 18,4%.
Sin embargo, hay quienes aseguran que el incremento del IVA en la zona fronteriza transferirá el consumo al lado estadounidense y mermará la competitividad de las exportaciones mexicanas.
Jorge Escalante, presidente de la filial en Tijuana (noroeste) de la Confederación Patronal de la República Mexicana, aseguró a la AFP que la decisión legislativa provocaría la pérdida de 25.000 empleos y afectará directamente a los empresarios fronterizos.
‘Ahora mismo, los precios en San Diego (California, suroeste de EEUU) son 37% más baratos que en Tijuana, y con la reforma serán 42% más baratos aún’, explicó.
A raíz de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) que México firmó con Estados Unidos (su principal socio comercial) y Canadá en 1994, proliferó la industria maquiladora (ensambladora) en su frontera norte.
Los legisladores tienen que pensar ‘en el gran reto que tenemos de mejorar la competitividad del país y sobre todo del sector exportador mexicano’, aseguró a la AFP Luis Aguirre, presidente del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación.
En una metáfora, Aguirre comentó: ‘Quieren que sigamos compitiendo en la Copa Mundial y nos quieren mandar con polainas de seis kilos en cada pie’.
Pacto en juego
Diversas manifestaciones de protesta se han venido sucediendo recientemente a lo largo de la frontera con Estados Unidos, de más de 3.000 km. La más importante se realizó el martes en Ciudad Juárez (vecina de El Paso, Texas, sur de EEUU), donde unos 5.000 obreros y empresarios marcharon hasta un puente internacional.
Pacto en juego
Desde que asumió el poder en diciembre pasado, Peña Nieto ha impulsado una serie de reformas estructurales a través del inédito Pacto por México, firmado con los opositores PAN y PRD. Hasta ahora han sido aprobadas dos iniciativas: una en materia educativa y otra en telecomunicaciones y competencia.
Sin embargo, los desacuerdos en materia fiscal comprometen la perennidad de esta alianza.
‘El gobierno federal ha decidido ignorar a uno de sus dos aliados estratégicos’, por lo que ‘ha llegado el momento de que el PAN replantee su relación con el gobierno y concluya su participación en el Pacto por México’, aseguró el senador Javier Corral.
El Pacto también se encuentra amenazado por otra polémica iniciativa en materia energética, que busca abrir a capital privado la paraestatal Petróleos Mexicanos y que es fuertemente contestada por el PRD.