El biatleta noruego Ole Einar Bjoerndalen se convirtió este miércoles en el atleta más laureado de la historia de los Juegos Olímpicos de Invierno, con 13 medallas, después de ganar el oro con su país en el relevo mixto de biatlón.
Bjoerndalen desempata así con su compatriota, el fondista Bjoern Daehlie, ambos sumaban doce metales, desde que el biatleta ganase la prueba del sprint el pasado 8 de febrero. El relevo mixto noruego dominó la carrera, aventajando a la República Checa en 32 segundos y a Italia en 58.
A sus 40 años, Bjoerndalen sigue agrandando su leyenda y aún podría sumar una nueva medalla como parte del relevo masculino que participará en la carrera del próximo fin de semana.
El equipo formado, por este orden, por Tora Berger, Tiril Eckhoff, el propio Bjoerndalen y Emil Svendsen, necesitó que ‘El Caníbal’ -como es apodado Bjoerndalen- volviera a dar una lección, recuperando el liderato de la cabeza que su equipo había perdido en el relevo anterior y abriendo hueco sobre sus perseguidores para dejar la carrera casi sentenciada.
El biatleta noruego Ole Einar Bjoerndalen se convirtió este miércoles en el atleta más laureado de la historia de los Juegos Olímpicos de Invierno, con 13 medallas, después de ganar el oro con su país en el relevo mixto de biatlón.
Bjoerndalen desempata así con su compatriota, el fondista Bjoern Daehlie, ambos sumaban doce metales, desde que el biatleta ganase la prueba del sprint el pasado 8 de febrero. El relevo mixto noruego dominó la carrera, aventajando a la República Checa en 32 segundos y a Italia en 58.
A sus 40 años, Bjoerndalen sigue agrandando su leyenda y aún podría sumar una nueva medalla como parte del relevo masculino que participará en la carrera del próximo fin de semana.
El equipo formado, por este orden, por Tora Berger, Tiril Eckhoff, el propio Bjoerndalen y Emil Svendsen, necesitó que ‘El Caníbal’ -como es apodado Bjoerndalen- volviera a dar una lección, recuperando el liderato de la cabeza que su equipo había perdido en el relevo anterior y abriendo hueco sobre sus perseguidores para dejar la carrera casi sentenciada.