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Joviel Acevedo, el líder non grato que se perpetuó en el poder

Redacción República
02 de julio, 2016

Sus amigos de juventud no pueden creer cuán tan lejos llegó Joviel Acevedo Ayala al frente de la Asamblea Nacional del Magisterio (ANM), aunque reconocen que desde la década de los ochenta ya mostraba habilidades de dirigente y “fogosidad” para hablar frente a las masas.

En esos años, empezó a formarse como dirigente sindical y salía del país invitado por organizaciones internacionales que empezaron a “darle forma” a quien daría más dolores de cabeza a Gobiernos y docentes.

Según sus allegados, en Morales, Izabal, permanecen su esposa e hijos y por lo regular, los comentarios que se escuchan es que “sigue siendo el mismo” con sus amigos de infancia y juventud.

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Sin embargo, su presencia entre el gremio magisterial (el más grande a nivel nacional) genera división. Por un lado, están los docentes que lo apoyan (aunque varios explican que se ven obligados a acudir a las convocatorias de marchas y manifestaciones, a cambio de no tener represalias laborales) y quienes definitivamente, ven en él un tropiezo para el futuro de los niños en el país en términos educativos.

Incriminado por Monzón

El secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Educación de Guatemala (STEG) vuelve de nuevo a la polémica con la descripción que Juan Carlos Monzón, testigo protegido del Ministerio Público (MP), hizo acerca de supuestos regalos y prebendas que recibió del exbinomio presidencial de Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti.

Resulta que según Monzón, Acevedo aceptó la remodelación de la Casa del Maestro, ubicada en la 4a. avenida y 6a. calle de la zona 1, por Q425 mil 321, lo cual incluyó un televisor, pintura, camas, sábanas y también insumos de limpieza.

El exsecretario privado de Baldetti, añadió que tenía un convenio con ella para que fuera afín al Gobierno y no causara inconvenientes, principalmente para “estarlos apoyando, más que todo al Gobierno para evitar manifestaciones y cosas para el estilo”, refirió.

Respecto a los viajes, Pérez Molina, delegó a Acevedo en la Conferencia Internacional del Trabajo en Ginebra, Suiza, del 4 al 20 de junio 2013 y ello generó rechazo en varios sectores. Un año después la historia se repitió y eso causó que los miembros de la Coordinadora Nacional del Magisterio en Resistencia, que aglutina varios sindicatos, declarararan que él “no representa los intereses del magisterio ni de los trabajadores del país”.

Asimismo, las protestas del sindicato de Acevedo eran por lo regular, para solicitar una ampliación presupuestaria planteada por el Ejecutivo o pedir la aprobación del presupuesto del Estado de esos años. Acevedo aseguró que él no apoyó a Pérez para la Presidencia, aunque refirió en una columna de opinión que no apoyaban forzar su renuncia, pero sí emitió señalamientos hacia la cúpula empresarial.

¿Introvertido?

La exministra de Educación, María del Carmen Aceña, refirió que cuando llegó a dirigir esa dependencia se le habló claramente a Acevedo: “él no trabajaba en la escuela, la ley no le permitía ausentarse y debía ir a dar clases, pero no hizo caso porque todos los demás gobiernos le habían dado permiso para hacerlo”.

Lo que recibió la exministra al asumir en 2004 fue un caos entre el gremio magisterial y autoridades educativas. Resulta que hubo tres años de bonanza entre el gobierno del Frente Republicano Guatemalteco (FRG) y la dirigencia magiesterial, pero el último año, en 2003, se rompieron las relaciones y los paros del magisterio fueron constantes.

[quote_right]”Creo que él es un buen líder, pero no se actualizó, no es democrático y el punto acá es es que la democracia debe ser en todos lados. Él tiene poder porque se lo han dado las autoridades pero uno como Ministro debe rendir cuentas y no hay que ofrecer más de lo que se puede”. María del Carmen Aceña, exministra de Educación. [/quote_right]

Otro maestro ocupa su lugar

El dirigente sindical subcontrató a alguien más para que lo reemplazara en la Escuela Nacional Mixta 20 de Octubre, donde impartía clases. Las autoridades dedujeron que él no cumplía su contrato y recibía un salario, además de que tenía a alguien en su lugar, por lo tanto, eran dos inconsistencias.

En esos años se desarrollaba el Programa Nacional de Autogestión Educativa (Pronade), el cual Acevedo adversó. El programa pretendía introducir sistemas innovadores para la administración de los recursos en educación, pero fue eliminado por la Unidad de Nacional de la Esperanza (UNE) en contubernio con Manuel Baldizón, entonces presidente de la Comisión de Finanzas en el Congreso, de acuerdo con Aceña.

Se le consultó a la exministra cómo era el trato entre ambos y aseveró “él es agresivo en los medios, pero en persona lo vi introvertido”, y explicó que en varias ocasiones le solicitó una reunión para dialogar seriamente, pero él nunca aceptó.

Joviel Acevedo, el líder non grato que se perpetuó en el poder

Redacción República
02 de julio, 2016

Sus amigos de juventud no pueden creer cuán tan lejos llegó Joviel Acevedo Ayala al frente de la Asamblea Nacional del Magisterio (ANM), aunque reconocen que desde la década de los ochenta ya mostraba habilidades de dirigente y “fogosidad” para hablar frente a las masas.

En esos años, empezó a formarse como dirigente sindical y salía del país invitado por organizaciones internacionales que empezaron a “darle forma” a quien daría más dolores de cabeza a Gobiernos y docentes.

Según sus allegados, en Morales, Izabal, permanecen su esposa e hijos y por lo regular, los comentarios que se escuchan es que “sigue siendo el mismo” con sus amigos de infancia y juventud.

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Sin embargo, su presencia entre el gremio magisterial (el más grande a nivel nacional) genera división. Por un lado, están los docentes que lo apoyan (aunque varios explican que se ven obligados a acudir a las convocatorias de marchas y manifestaciones, a cambio de no tener represalias laborales) y quienes definitivamente, ven en él un tropiezo para el futuro de los niños en el país en términos educativos.

Incriminado por Monzón

El secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Educación de Guatemala (STEG) vuelve de nuevo a la polémica con la descripción que Juan Carlos Monzón, testigo protegido del Ministerio Público (MP), hizo acerca de supuestos regalos y prebendas que recibió del exbinomio presidencial de Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti.

Resulta que según Monzón, Acevedo aceptó la remodelación de la Casa del Maestro, ubicada en la 4a. avenida y 6a. calle de la zona 1, por Q425 mil 321, lo cual incluyó un televisor, pintura, camas, sábanas y también insumos de limpieza.

El exsecretario privado de Baldetti, añadió que tenía un convenio con ella para que fuera afín al Gobierno y no causara inconvenientes, principalmente para “estarlos apoyando, más que todo al Gobierno para evitar manifestaciones y cosas para el estilo”, refirió.

Respecto a los viajes, Pérez Molina, delegó a Acevedo en la Conferencia Internacional del Trabajo en Ginebra, Suiza, del 4 al 20 de junio 2013 y ello generó rechazo en varios sectores. Un año después la historia se repitió y eso causó que los miembros de la Coordinadora Nacional del Magisterio en Resistencia, que aglutina varios sindicatos, declarararan que él “no representa los intereses del magisterio ni de los trabajadores del país”.

Asimismo, las protestas del sindicato de Acevedo eran por lo regular, para solicitar una ampliación presupuestaria planteada por el Ejecutivo o pedir la aprobación del presupuesto del Estado de esos años. Acevedo aseguró que él no apoyó a Pérez para la Presidencia, aunque refirió en una columna de opinión que no apoyaban forzar su renuncia, pero sí emitió señalamientos hacia la cúpula empresarial.

¿Introvertido?

La exministra de Educación, María del Carmen Aceña, refirió que cuando llegó a dirigir esa dependencia se le habló claramente a Acevedo: “él no trabajaba en la escuela, la ley no le permitía ausentarse y debía ir a dar clases, pero no hizo caso porque todos los demás gobiernos le habían dado permiso para hacerlo”.

Lo que recibió la exministra al asumir en 2004 fue un caos entre el gremio magisterial y autoridades educativas. Resulta que hubo tres años de bonanza entre el gobierno del Frente Republicano Guatemalteco (FRG) y la dirigencia magiesterial, pero el último año, en 2003, se rompieron las relaciones y los paros del magisterio fueron constantes.

[quote_right]”Creo que él es un buen líder, pero no se actualizó, no es democrático y el punto acá es es que la democracia debe ser en todos lados. Él tiene poder porque se lo han dado las autoridades pero uno como Ministro debe rendir cuentas y no hay que ofrecer más de lo que se puede”. María del Carmen Aceña, exministra de Educación. [/quote_right]

Otro maestro ocupa su lugar

El dirigente sindical subcontrató a alguien más para que lo reemplazara en la Escuela Nacional Mixta 20 de Octubre, donde impartía clases. Las autoridades dedujeron que él no cumplía su contrato y recibía un salario, además de que tenía a alguien en su lugar, por lo tanto, eran dos inconsistencias.

En esos años se desarrollaba el Programa Nacional de Autogestión Educativa (Pronade), el cual Acevedo adversó. El programa pretendía introducir sistemas innovadores para la administración de los recursos en educación, pero fue eliminado por la Unidad de Nacional de la Esperanza (UNE) en contubernio con Manuel Baldizón, entonces presidente de la Comisión de Finanzas en el Congreso, de acuerdo con Aceña.

Se le consultó a la exministra cómo era el trato entre ambos y aseveró “él es agresivo en los medios, pero en persona lo vi introvertido”, y explicó que en varias ocasiones le solicitó una reunión para dialogar seriamente, pero él nunca aceptó.