Interesante audiencia de confirmación del candidato a Secretario de Estado de los Estados Unidos, el CEO de Exxon Mobile, Rex Tillerson, propuesto por el Presidente Electo Donald Trump para liderar la cartera de relaciones exteriores. Tillerson es un multimillonario con una fortuna que aproximadamente está en torno a los US$150 millones, y quien a lo largo de más o menos 20 años (tiene 40 en Exxon) ha logrado unos US$200 millones en ganancias. Tiene vasta experiencia internacional desde la perspectiva empresarial.
La audiencia transcurrió agitada. Desde gritos furibundos de dos representantes de GreenPeace, a coloridos manifestantes silenciosos, a los ataques de los Senadores evidencia que permanece la “molestia” con los supuestos hackers del Presidente Putin. Acusan a Rusia de crímenes contra la humanidad y promueven sanciones contra ella.
El futuro Secretario de Estado, porque según sondeos será confirmado en el cargo, resultó ser un hombre pausado, mantiene su compostura, y el aplomo y pragmatismo típico de un hombre de negocios de su calibre. Respondió que Rusia ha violado leyes internacionales y si bien debiera ser sancionada, pero que cuando se imponen sanciones contra una nación, y que en realidad las sanciones rara vez funcionan. Ejemplos de ello Cuba e Irán. Rusia es una potencia nuclear, guste o no, un actor principal en el escenario internacional, y debiera ser abordado como un aliado, no como un enemigo. La Guerra Fría terminó, afortunadamente, al menos para la Administración Trump. Será refrescante un enfoque más pragmático y menos flemático. Lógicamente es más fácil negociar con gente que no resulta antipática y conocen a su oponente, ventaja de Tillerson. La idea es mejorar las relaciones y evitar consecuencias peores, no empeorarlas, si bien en su declaración escrita llamó a Rusia un “peligro” para el mundo y aseveró que si ha abusado su poder ha sido porque los Estados Unidos han estado ausentes en la última década.
El ex Secretario de Defensa Robert Gates, quién sirvió en las Administraciones Bush y Obama, manifestó su absoluto apoyo al futuro Secretario de Estado, al igual que el ex Senador Demócrata Sam Nunn.
Será interesante como vea América Latina. El Presidente Electo continúa hablando de construir el muro y de que empresas estadounidenses vuelvan a los Estados Unidos. Creo que está llegando la hora en que tomemos responsabilidad sin esperar que los Estados Unidos nos resuelvan nuestros tangos, y finalmente, tomar el timón de nuestros propios barcos. Esperemos deje de imponernos resarcimientos y medidas que son más negativas que tragarse una aspirina sin agua y que nos dejen trabajar, producir, crear y mirar hacia el futuro con algo de esperanzas. Finalmente.
Republicagt es ajena a la opinión expresada en este artículo
Interesante audiencia de confirmación del candidato a Secretario de Estado de los Estados Unidos, el CEO de Exxon Mobile, Rex Tillerson, propuesto por el Presidente Electo Donald Trump para liderar la cartera de relaciones exteriores. Tillerson es un multimillonario con una fortuna que aproximadamente está en torno a los US$150 millones, y quien a lo largo de más o menos 20 años (tiene 40 en Exxon) ha logrado unos US$200 millones en ganancias. Tiene vasta experiencia internacional desde la perspectiva empresarial.
La audiencia transcurrió agitada. Desde gritos furibundos de dos representantes de GreenPeace, a coloridos manifestantes silenciosos, a los ataques de los Senadores evidencia que permanece la “molestia” con los supuestos hackers del Presidente Putin. Acusan a Rusia de crímenes contra la humanidad y promueven sanciones contra ella.
El futuro Secretario de Estado, porque según sondeos será confirmado en el cargo, resultó ser un hombre pausado, mantiene su compostura, y el aplomo y pragmatismo típico de un hombre de negocios de su calibre. Respondió que Rusia ha violado leyes internacionales y si bien debiera ser sancionada, pero que cuando se imponen sanciones contra una nación, y que en realidad las sanciones rara vez funcionan. Ejemplos de ello Cuba e Irán. Rusia es una potencia nuclear, guste o no, un actor principal en el escenario internacional, y debiera ser abordado como un aliado, no como un enemigo. La Guerra Fría terminó, afortunadamente, al menos para la Administración Trump. Será refrescante un enfoque más pragmático y menos flemático. Lógicamente es más fácil negociar con gente que no resulta antipática y conocen a su oponente, ventaja de Tillerson. La idea es mejorar las relaciones y evitar consecuencias peores, no empeorarlas, si bien en su declaración escrita llamó a Rusia un “peligro” para el mundo y aseveró que si ha abusado su poder ha sido porque los Estados Unidos han estado ausentes en la última década.
El ex Secretario de Defensa Robert Gates, quién sirvió en las Administraciones Bush y Obama, manifestó su absoluto apoyo al futuro Secretario de Estado, al igual que el ex Senador Demócrata Sam Nunn.
Será interesante como vea América Latina. El Presidente Electo continúa hablando de construir el muro y de que empresas estadounidenses vuelvan a los Estados Unidos. Creo que está llegando la hora en que tomemos responsabilidad sin esperar que los Estados Unidos nos resuelvan nuestros tangos, y finalmente, tomar el timón de nuestros propios barcos. Esperemos deje de imponernos resarcimientos y medidas que son más negativas que tragarse una aspirina sin agua y que nos dejen trabajar, producir, crear y mirar hacia el futuro con algo de esperanzas. Finalmente.
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