El Ministerio Público (MP) comenzó una investigación de oficio sobre el viaje del presidente Jimmy Morales a Israel.
El mandatario asistió a ese país para el cambio de la embajada de Tel Aviv a Jerusalén, el pasado 15 de mayo.
Según el Ministerio Público, se trata de una investigación de oficio para determinar si hay alguna irregularidad en el viaje.
El ente investigador le giró una solicitud a la Contraloría General de Cuentas para que audite y verifique si hay alguna inconsistencia.
El secretario de Comunicación Social de la Presidencia, Alfredo Brito, dijo que colaborarán con lo que sea necesario a requerimiento del MP.
El funcionario explicó que la intención del Ejecutivo es dejar claro que no hay ninguna irregularidad en el viaje del mandatario.
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Viaje cuestionado
Morales estuvo en Israel con una comitiva de más de 40 personas, entre diputados, funcionarios de gobierno, personas ajenas al Ejecutivo y hasta su familia.
El presidente asistió al evento de traslado de la embajada que estaba en Tel Aviv a Jerusalén, como “respaldo” y por la “amistad” que Guatemala tiene con el Estado de Israel desde hace 70 años.
Uno de los aspectos más criticados por la sociedad civil fue la forma en que viajó el mandatario, que fue por medio de un viaje directo en un avión privado.
El Ejecutivo se negaba a revelar el nombre del patrocinador, con el argumento de que la persona no quería que se revelara.
Finalmente la canciller Sandra Jovel, durante un programa de radio, dijo que el vuelo fue pagado por el empresario estadounidense Sheldon Adelson.
Otro punto que causó duda fue que José Manuel Morales Marroquín, hijo del presidente, y Samuel Morales, hermano, también viajaron a Israel.
Ambos son procesados en el caso de corrupción Botín Registro de la Propiedad, pero el juzgado les otorgó permiso para asistir al evento diplomático.
Guatemala realizó el traslado de la embajada dos días después de EE. UU. Fueron los primeros dos países en tomar esa postura, pese al rechazo de los países que integran la Liga Árabe.
Guatemala recibió fuertes críticas por esa decisión, incluso advertencias de consecuencias comerciales en la exportación de cardamomo.
El Ministerio Público (MP) comenzó una investigación de oficio sobre el viaje del presidente Jimmy Morales a Israel.
El mandatario asistió a ese país para el cambio de la embajada de Tel Aviv a Jerusalén, el pasado 15 de mayo.
Según el Ministerio Público, se trata de una investigación de oficio para determinar si hay alguna irregularidad en el viaje.
El ente investigador le giró una solicitud a la Contraloría General de Cuentas para que audite y verifique si hay alguna inconsistencia.
El secretario de Comunicación Social de la Presidencia, Alfredo Brito, dijo que colaborarán con lo que sea necesario a requerimiento del MP.
El funcionario explicó que la intención del Ejecutivo es dejar claro que no hay ninguna irregularidad en el viaje del mandatario.
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Morales estuvo en Israel con una comitiva de más de 40 personas, entre diputados, funcionarios de gobierno, personas ajenas al Ejecutivo y hasta su familia.
El presidente asistió al evento de traslado de la embajada que estaba en Tel Aviv a Jerusalén, como “respaldo” y por la “amistad” que Guatemala tiene con el Estado de Israel desde hace 70 años.
Uno de los aspectos más criticados por la sociedad civil fue la forma en que viajó el mandatario, que fue por medio de un viaje directo en un avión privado.
El Ejecutivo se negaba a revelar el nombre del patrocinador, con el argumento de que la persona no quería que se revelara.
Finalmente la canciller Sandra Jovel, durante un programa de radio, dijo que el vuelo fue pagado por el empresario estadounidense Sheldon Adelson.
Otro punto que causó duda fue que José Manuel Morales Marroquín, hijo del presidente, y Samuel Morales, hermano, también viajaron a Israel.
Ambos son procesados en el caso de corrupción Botín Registro de la Propiedad, pero el juzgado les otorgó permiso para asistir al evento diplomático.
Guatemala realizó el traslado de la embajada dos días después de EE. UU. Fueron los primeros dos países en tomar esa postura, pese al rechazo de los países que integran la Liga Árabe.
Guatemala recibió fuertes críticas por esa decisión, incluso advertencias de consecuencias comerciales en la exportación de cardamomo.